Acci¨®n cl¨¢sica

Desde que las tres dimensiones hicieron aparici¨®n en el mundo del entretenimiento electr¨®nico y, sobre todo, desde que las herramientas de desarrollo permiten trabajar con ellas con gran fluidez, cualquier pretexto es bueno para utilizarlas en un videojuego.

Aunque no es la intenci¨®n menospreciar a todos lo t¨ªtulos que hacen gala de mundos tridimensionales, s¨ª que es verdad que muchos de ellos abusan de despliegue t¨¦cnico dejando de lado otros aspectos m¨¢s importantes.

Blowout se desmarca del resto y presenta un planteamiento que, a d¨ªa de hoy, roza lo novedoso, y es que lo 'retro' est¨¢ de moda. Con su sistema de juego en el que s¨®lo podemos movernos de izquierda a derecha y abajo o arriba, nos trae viejos recuerdos a los que disfrutamos en su momento de las viejas glorias de los entonces llamados beat ?em up (golp¨¦alos) o su equivalente con armas shoot ?em up (disp¨¢rales).

Y es que el desarrollo del juego es completamente bidimensional aunque los escenarios est¨¦n realizados en tres dimensiones, as¨ª como las explosiones, enemigos y el propio protagonista. Esto simplifica enormemente el manejo del juego fundamentalmente en las versiones de consola si, como ocurre con el que suscribe, se es bastante torpe movi¨¦ndose por ambientes 3D sin usar el rat¨®n. Adem¨¢s elimina de un plumazo problemas cl¨¢sicos de c¨¢mara en los juegos de acci¨®n 3D.

Las pantallas del juego son multitud de pasillos interconectados por ascensores, como si hubieran sido excavados por hormigas en un terrario. Son realmente grandes y aunque no supone mucho esfuerzo avanzar por ellos e ir abriendo puertas, es f¨¢cil que acabemos una partida habi¨¦ndonos dejado alguna estancia por visitar. Un peque?o mapa arriba a la derecha de la pantalla nos ir¨¢ mostrando las estancias visitadas, as¨ª como el final de la fase.

El infierno convertido en estaci¨®n espacial

En muchas ocasiones el gui¨®n de un juego no es m¨¢s que una bonita excusa para pasar unas horas divertidas frente a la pantalla, otras es mucho m¨¢s que eso y acaba por eclipsar otros aspectos del t¨ªtulo en cuesti¨®n.

Blowout es de los que tiene una enorme excusa por gui¨®n. Tomamos el control del comandante 'Dutch' Cane, miembro de Jump Rose, una organizaci¨®n que vela por el cumplimiento de la ley y regula las plataformas de batalla cuyas tripulaciones est¨¢n formadas por clones humanos M1-2. El comandante es el encargado de poner orden en una plataforma de batalla, la Honour Guard, habitada por clones humanos que por culpa de un ataque de Xenos alien¨ªgenas han mutado hasta convertirse en t¨ªpicos bichos asquerosos, violentos y sanguinarios. Todo este enjambre de criaturas, son la descendencia de C.F. Stephens el clon que recibi¨® el virus alien¨ªgeno y se replic¨® en los malvados bichos.

Como se puede ver imaginaci¨®n no les falta a la gente de Terminal Reality, puestos a poner excusas son todo unos profesionales.

Abriendo paso hasta la meta

El mecanismo es siempre el mismo y no destaca por ser novedoso. Nuestro protagonista aparece cerca de un teletransportador sin conocimiento de la zona por la que se ha de mover, va explorando el nivel hasta llegar al punto donde descargar el mapa del lugar, en todo momento en nuestro radar aparece el punto al que tenemos que llegar que (?oh, sorpresa!) est¨¢ ocupado por un temible jefe final que, para vencer, deberemos atacar de frente, es decir, nuestro personaje se pone de espaldas a nosotros y dispara al fondo de la pantalla donde est¨¢ el bicho.

En nuestro camino por la plataforma espacial tendremos tres grandes enemigos, por un lado los consabidos enemigos asquerosos de los que en unas l¨ªneas hablaremos, por otro las defensas de las naves como l¨¢sers o metralletas autom¨¢ticas y por ¨²ltimo los diferentes tipos de puertas que nos impiden el acceso a ciertos pasillos. Estas puertas son de tres tipos, a saber, puertas con c¨®digo de color que necesitan una llave para abrirse, puertas de un sentido, que s¨®lo se abren desde un lado y las puertas blindadas que deben activarse desde un interruptor.

En cualquier caso para avanzar siempre es lo mismo: puerta cerrada, buscar llave o control, abrirla y seguir por ah¨ª. Como se puede ver m¨¢s lineal imposible. Lo ¨²nico que rompe un poco esta t¨®nica es la posibilidad de rejugar los niveles que ya hemos superado, para acabar de recorrerlos o conseguir m¨¢s puntos que la vez anterior.

Me he dejado por comentar los enemigos. Qu¨¦ ser¨ªa de un juego de acci¨®n sin un buen surtido de malvadas criaturas mutantes... un t¨ªtulo aburrido desde luego, por eso se han encargado de que este apartado cuente con bichos feos que no dudar¨¢n un instante en abalanzarse sobre nuestro protagonista en masa y sin ning¨²n tipo de orden. Sus movimientos son absolutamente predecibles, e incluso cuando se juntan enemigos de diferentes especies el resultado es siempre el mismo, todos en tropel a por el pobre comandante.

Afortunadamente deshacerse de la horda de atacantes no es tarea excesivamente complicada, si bien tampoco podremos dormirnos en los laureles, porque aunque hubiera sido m¨¢s deseable una buena t¨¦cnica de IA para cada tipo de criatura, su t¨¦cnica 'todos a una' es, en general, bastante efectiva, sobre todo si avanzamos por un pasillo en busca de una llave y al llegar al final y dar la vuelta aparecen de la nada una manada de perros asesinos, varias abejas, y un tipo con patas largas que toma la pose de una rana y que no dudar¨¢ en lanzarse contra nosotros.

Para enfrentarnos a tan desorganizado grupo de energ¨²menos tenemos a nuestra disposici¨®n un peque?o arsenal formado por una metralleta con munici¨®n infinita pero que si la usamos muy seguido deja de funcionar por unos segundos, un lanzallamas, escopeta, lanza clavos, etc¨¦tera.

Sonido

El apartado sonoro merece un aprobado alto sobre todo por sus efectos de sonido, las explosiones o los disparos destacan entre la casi inexistente banda sonora y las voces de los personajes, que pese a ser de gran calidad, est¨¢n en un perfecto ingl¨¦s y a los hispano-hablantes nos sabe a poco.

Gr¨¢ficos

Ya se ha comentado que el despliegue t¨¦cnico no es uno de los puntos fuertes del juego, pero tampoco hay que despreciarlo. Los gr¨¢ficos cumplen sobradamente su papel, escenarios que recuerdan a una estaci¨®n espacial, enemigos asquerosos y explosiones efectistas, ?qu¨¦ mas se puede pedir?

Est¨¢ claro que hay que mantener la uniformidad entre partes de la plataforma pero ocurre igual que los enemigos, a partir de la tercera pantalla te das cuenta de que van a ser todas iguales, hasta el punto de plantearte si en verdad no est¨¢n formadas por m¨®dulos que se combinan aleatoriamente para formar los distintos niveles.

Estrategia y trucos

Como ya se ha comentado avanzar no es muy complicado aunque en ciertos momentos tendremos dificultades en algunos pasillos donde nos atacan varios enemigos a la vez y adem¨¢s hay que sortear las defensas de la plataforma. Como principios a seguir est¨¢ recorrer la mayor cantidad de salas que se puedan y ser prudente al entrar en alg¨²n pasillo donde a la salida pueden estar esper¨¢ndonos.

Compar¨¢ndolo con...

Hay otros muchos juegos de acci¨®n para todas las plataformas que dejan en rid¨ªculo a este 'Blowout'. Sin embargo, en vez de ponerlo en frente a los grandes y lanzar una comparaci¨®n que lo dejar¨ªa en rid¨ªculo, es mejor decir que es un juego que recuerda bastante t¨ªtulos tan entra?ables como los Megaman y cualquier plataformas/acci¨®n de hace unos a?os, cuando los juegos s¨®lo hablaban en dos dimensiones.