World in your eyes...

La tierra de Ulgress se ha convertido en un aut¨¦ntico campo de batalla. Los Pocket Kingdoms que existen est¨¢n en guerra entre ellos. Una devastadora lucha que parece no tener fin. Y no es por darte malas noticias, ?pero t¨² acabas de aterrizar en pleno campo de combate!

Por suerte o por desgracia, Pathway of Glory ha marcado un antes y un despu¨¦s en el cat¨¢logo de N-Gage. A partir de ahora cualquier equipo de programaci¨®n lo tendr¨¢ m¨¢s dif¨ªcil a la hora de intentar endosarnos una mediocridad puesto que despu¨¦s de haber visto de lo que es capaz la port¨¢til de Nokia, ya no hay excusa que sirva. De ahora en adelante  analizaremos los juegos con mano firme. Y eso hemos hecho con Pocket Kingdom: Own the World.

La obra de Sega es un juego un tanto diferente. Un juego de los que se suelen ver en Jap¨®n y se caracterizan por su est¨¦tica 2-D tipo manga y el continuo uso de men¨²s. Pero Pocket Kingdom es diferente. Es un juego que est¨¢ llamado a hacer algo grande dentro del cat¨¢logo de N-Gage y del panorama port¨¢til. Sus infinitas posibilidades har¨¢n de ¨¦l una aut¨¦ntica delicia para los jugones mas adeptos al rol y a las batallas configuradas por men¨²s.

PK (Pocket Kingdom) naci¨® con la idea de trasladar los maravillosos mundos persistentes existentes en los PC a nuestra N-Gage. Es decir, nosotros podremos combatir contra miles de usuarios (si, miles) enfrent¨¢ndonos en el gran mapa de Ulgress teniendo presente que al apagar la consola nada va a desaparecer. Es un mundo persistente en el que todo sigue creciendo y evolucionando con o sin nosotros. Y ah¨ª reside gran parte del encanto que tiene este genial juego comprimido en una imprescindible MMC que no deber¨ªa faltar en tu estanter¨ªa. Pero para llegar a ser un reino poderoso donde los haya primeramente deberemos entrenar muy duro y adaptarnos a un concepto de juego nada habitual.

Al cargar el juego empezaremos la partida en el modo off-line. Y no os dej¨¦is enga?ar por el hecho de combatir contra la m¨¢quina porque es realmente divertido y nos sirve de entreno as¨ª como para encontrar tesoros y objetos ocultos. Somos informados de que hemos heredado un reino de bolsillo  (Pocket Kingdom) junto con algo de dinero y una magn¨ªfica ayudante, que se encargar¨¢ en todo momento de informarnos de lo que debemos saber. Con ese dinero y el reino reci¨¦n adquirido, debemos expandir nuestro reinado e ir conquistando, poco a poco, cualquier reino que se cruce en nuestro camino. En l¨ªneas generales este es el simple argumento que PK nos propone. La primera vez que empezamos a jugar, se nos ir¨¢ explicando el funcionamiento del juego en una especie de tutorial. El funcionamiento, en un principio, ser¨¢ bastante simple. Deberemos ir conquistando e ir ganando dinero, el cual invertiremos en comprar y mejorar soldados y armamento a medida que avanzamos hacia diferentes territorios.

Los objetos, armas y joyas que adquirimos en el juego, ya sean de  nuestros rivales vencidos o al comprarlos en las tiendas tienen multitud de aplicaciones diferentes. Mediante el laboratorio que dispondremos en nuestro reino deberemos ir mezclando diferentes objetos para adquirir armas m¨¢s poderosas, armaduras m¨¢s resistentes as¨ª como diferentes objetos que nos servir¨¢n para transformar a nuestros guerreros en aut¨¦nticos l¨ªderes subiendo sus atributos y adapt¨¢ndolos mejor para la batalla. Todas estas configuraciones posibles partir¨¢n siempre de la base de unir 4 elementos (en ocasiones basta con 3) y dar¨¢ la escalofriante cifra de mas de 50.000 combinaciones diferentes. No vivir¨¢s para verlas todas.

Lo mismo podemos decir de la navegaci¨®n por los men¨²s. El fondo de pantalla nos situar¨¢ en una parte diferente del reino que gobernamos seg¨²n el men¨² en que nos encontremos. Es decir, cuando compremos, veremos de fondo unas cuantas cajas que nos har¨¢n deducir que posiblemente el material vaya dentro de ellas, o cuando nuestros soldados requieran descanso y medicina, veremos en el fondo unas literas con una pinta estupenda. Son peque?os detalles que logran meternos mas a¨²n en la ambientaci¨®n del juego. 

Por otra parte tenemos las batallas. En ellas veremos a nuestro ej¨¦rcito compuesto por cuatro guerreros enfrentarse a las hordas enemigas. El motor es muy suave y se mueve con mucha fluidez. Pero tambi¨¦n debemos aclarar que apenas hay motivo para que no lo haga ya que son gr¨¢ficos muy simples. Resumiendo, gr¨¢ficos simples pero a la vez muy coloridos y con un look a juego japon¨¦s realmente brillante.

Las batallas son otra historia. Antes de pelear, seria bueno analizar al enemigo enviando una tropa a explorar su reino. Una vez sabemos sus atributos y su poder de ataque y defensa es cuando deberemos elegir nuestro grupo de ataque que mejor se adapten a ese combate y a esas circunstancias en concreto. Una vez la batalla empieza, nuestro trabajo acaba. Y decimos esto porque no podremos controlar a nadie en las batallas, son autom¨¢ticas y se resolver¨¢n a favor del ejercito m¨¢s poderoso.  Solo nos limitaremos a observar que pasa. Cuando perdamos varias batallas aprenderemos lo importante que es practicar con enemigos d¨¦biles  para obtener dinero y experiencia y poder comprar armas y luchadores m¨¢s poderosos.

c o n c l u s i o n e s

Estamos ante un gran juego. Gracias al buen hacer (sin prisa) de sus programadores, podemos decir que el juego rebosa virtudes por todos los lados. Cada detalle por m¨ªnimo que sea est¨¢ cuidado al m¨¢ximo. Pero el problema viene por otro lado. El problema es el g¨¦nero al que pertenece. Y decimos problema porque a no todo el mundo le gusta este g¨¦nero. Para comprobar que sensaci¨®n causa el juego a primera vista, he dejado jugar unos 10 minutos a 5 amigos  pregunt¨¢ndoles que les parec¨ªa y que grado de diversi¨®n encontraban en ¨¦l. Tristemente todos coincidieron que era aburrido.

Eso de moverse por men¨²s continuamente y pasando tanto  tiempo configurando par¨¢metros de nuestro reino y de nuestros guerreros no terminaba de cuajar en ellos. Algo parecido pasa con el p¨²blico en general. Aqu¨ª no estamos tan acostumbrados a seg¨²n que tem¨¢ticas de juego como quiz¨¢s en Jap¨®n. Con lo cual muchos jugadores jugar¨¢n con ¨¦l unos 10 minutos para acto seguido aparcarlo para siempre en su estanter¨ªa maldiciendo el d¨ªa en que se lo compraron. Si eres del tipo de jugador que odia los juegos pausados y calmados y que solo es saciado con acci¨®n y mucho movimiento huye de ¨¦l. Busca algo mas movidito porque poca acci¨®n ver¨¢s aqu¨ª. S¨®lo recomiendo el juego a los amantes del rol y de la estrategia, pese a no ser totalmente rol ni estrategia. Toma elementos prestados de varios g¨¦neros y nos da lo mejor de cada uno de ellos. Y lo mejor de ello es que cuando realmente te sientas preparado, podr¨¢s jugar on-line contra el reino que ose pelearse contigo a trav¨¦s del N-Gage Arena. ? Alguien da mas?

l o   m e j o r

l o   p e o r

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