Una evoluci¨®n incompleta...

En 1997 ve¨ªa la luz una aventura de Cryo que respond¨ªa al nombre de Atlantis: The Lost Tales, en una ¨¦poca en la que las aventuras gr¨¢ficas viv¨ªan una peque?a ¨¦poca de apogeo (no hace falta decir que esto va por rachas). Como tal, se lanzaban numerosos t¨ªtulos en este g¨¦nero, siendo Cryo la principal impulsora. Sin embargo, la calidad de los mismos era, generalmente, bastante discreta, lejos de los grandes cl¨¢sicos.

Pero aquel Atlantis: The Lost Tales atesoraba una calidad m¨¢s que suficiente para hacerse un hueco en el mercado y en el coraz¨®n de m¨¢s de un aficionado al g¨¦nero. Partiendo de la nada, presentaba un argumento interesante, que enganchaba al jugador cada vez m¨¢s a lo largo de la partida, junto a un buen apartado gr¨¢fico y una banda sonora excepcional.

El ¨¦xito obtenido por el juego (que adem¨¢s de en PC lleg¨® a ver la luz en una buena versi¨®n para Saturn y una m¨¢s que mejorable conversi¨®n a PlayStation tiempo despu¨¦s) provoc¨® que, con el paso del tiempo, y como era inevitable, llegasen las secuelas.

A pesar de que al final de la primera entrega la Atl¨¢ntida quedaba destruida (ese era el argumento principal de la aventura, los ¨²ltimos d¨ªas de la civilizaci¨®n perdida), en Atlantis 2, tambi¨¦n conocido como Beyond Atlantis, la acci¨®n recae sobre un descendiente de los atlantes supervivientes de la primera entrega. Se trataba, desgraciadamente, de un t¨ªtulo que no hac¨ªa honor a la primera entrega, al no presentar casi mejoras t¨¦cnicas y ser simple, aburrido e innecesario.

Todo cambiar¨ªa en 2001 con la llegada de Atlantis 3, un t¨ªtulo envolvente, interesante y bien realizado que volv¨ªa a moverse por los senderos de calidad que se le exigen a un buen juego de aventura. En esta ocasi¨®n, la acci¨®n gira en torno a una arque¨®loga que estudia ruinas egipcias. Aunque sus investigaciones ir¨¢n m¨¢s all¨¢, contra su voluntad, descubriendo mucho m¨¢s de lo que esperaba al descubrir un portal en el lugar de la excavaci¨®n.

Ahora, Dreamcatcher Interactive lanza lo que pretende sea un paso adelante en la saga. M¨¢s que una secuela, su intenci¨®n es que se trate de la primera entrega de una nueva saga que parta de cero en el mito de la Atl¨¢ntida. Sin embargo, Atlantis Evolution no parece que vaya a ser el juego de aventura definitivo, precisamente.

Esto no le he visto nunca...

Curtis Hewitt es un americano que viajaba tranquilamente en un barco el cual, desgraciadamente, se ve atrapado en una tormenta importante en alta mar que causa su naufragio.

Tras lograr salvar su vida a bordo de una barca, Curtis se ve a la deriva hasta que se ve transportado a un lugar desconocido... la isla de Atl¨¢ntida. Abducido por una especie de nave, ser¨¢ transportado al centro de la Atl¨¢ntida, donde se dispone a ser juzgado... aunque, como no pod¨ªa ser menos, logra escapar, descubriendo toda una nueva civilizaci¨®n desconocida que se encuentra oprimida por sus dioses.

Este argumento simplista, que en principio promete esconder muchos secretos y sorpresas, se acaba volviendo eso mismo... simple y bastante aburrido. Todos los grandes momentos esperados se quedan en alguna ligera impresi¨®n que otra, sin mayores alardes ni nada que marque realmente al jugador como para recordar el t¨ªtulo especialmente.

Tal vez, dicho as¨ª, suene peor de lo que verdaderamente es, ya que la historia entretiene y se deja ir llevando, enganchando por momentos y aburriendo en otros. Es decir, cumple con su papel para llevar adelante una trama algo trillada, pero interesante, a pesar de que de un t¨ªtulo de estas caracter¨ªsticas (y sobre todo de esta saga) se esperaba bastante m¨¢s.

Un mundo desconocido

El mundo que visita Curtis es totalmente desconocido para ¨¦l... y para el jugador, ya que se trata de una Atl¨¢ntida totalmente distinta a la que anteriormente se hab¨ªa presentado.

Los personajes de la isla, carentes de personalidad, no hacen m¨¢s que trabajar y cumplir con todos los deberes morales que sus dioses, crueles y exigentes, les imponen. No son m¨¢s que meros esclavos en un mundo que es desconocido hasta para a ellos, que tan s¨®lo conocen la existencia de un 'mundo exterior' en el que todo es malo.

Destaca en esta Nueva Atl¨¢ntida el contraste entre lo avanzado de los aparatos de los que hacen uso los guardias y que lucen las naves e instalaciones importantes, y lo campestre y hasta cierto punto anticuado de las aldeas de habitantes, muestra de lo sometidos que est¨¢n. Una civilizaci¨®n muy lejana a la pr¨®spera ciudad que luc¨ªa tan bien y que promet¨ªa un gran futuro en la primera entrega, pero que presenta las l¨®gicas desconfianzas tras el final que tuvo que sufrir la original.

En general, toda esta ambientaci¨®n, en un principio desconcierta al jugador, aunque con el tiempo y las debidas explicaciones, se llega a comprender el entorno y el por qu¨¦ de que la vida sea as¨ª en esta ciudad. Est¨¢ bastante lograda y consigue causar esa sensaci¨®n de encontrarse en un mundo ajeno, muy distinto al conocido por todos.

Presentaci¨®n del juego

Es ciertamente desconcertante la puesta en escena de Atlantis Evolution. Y es que el men¨² principal... es extra?o y nada intuitivo. En vez de aparecer una etiqueta con cada una de las opciones, como suele ser habitual, en una pantalla totalmente azul, aparecen diversos s¨ªmbolos, con forma de figuras geom¨¦tricas (supuestamente atlantes). Al pasar el rat¨®n por encima de los s¨ªmbolos y esperando un rato, aparece la explicaci¨®n de qu¨¦ opci¨®n se trata, algo que no hace sino complicar un men¨² que en teor¨ªa deber¨ªa presentarse como sencillo y directo.

Adem¨¢s, las opciones a elegir son 'Jugador 1', 'Jugador 2', 'Jugador 3'... no son m¨¢s que las distintas partidas guardadas que se pueden tener a la vez, para acceder a la que se quiera. Sin embargo, en un primer momento, esto causa el desconcierto del usuario, que no sabe muy bien qu¨¦ hacer y experimenta. Esta misma idea se repite en todos los men¨²s del juego, como el de salir, guardar, etc.

La interfaz del juego es la ya conocido por los seguidores de la saga, que b¨¢sicamente es la de todas las aventuras gr¨¢ficas con algunos detalles caracter¨ªsticos.

As¨ª, el juego se presenta como una aventura en primera persona, donde el jugador puede girar 360? alrededor de s¨ª mismo, interactuando con el entorno o pudiendo avanzar en determinadas direcciones si el cursor as¨ª se lo indica. Escenarios est¨¢ticos con alg¨²n ligero cambio seg¨²n la acci¨®n realizada en los lugares de interacci¨®n determinados.

Los ¨ªtems se sit¨²an en la parte inferior de la pantalla, aunque s¨®lo cuando se les reclama, mientras tanto permanecen ocultos para no molestar en pantalla al desarrollo de la acci¨®n.

A la hora de conversar con los personajes (aparece sobre el personaje el icono de di¨¢logo), se despliega un peque?o men¨² al lado del cursor con peque?as im¨¢genes de todos los temas que se pueden tratar con dicho personaje. Es decir, si se quiere hablar de una estatua, habr¨¢ que pulsar la imagen de la estatua, o de una persona ya conocida, sobre la imagen de dicha persona, igual que para preguntar sobre un objeto.

Se trata de un sistema de juego muy simplificado y directo, quiz¨¢s demasiado simple, pero que ayuda a que el jugador se haga enseguida con el control del juego. Como principal pega, cabe destacar que en m¨¢s de una ocasi¨®n se hace bastante complicado encontrar objetos o caminos, ya que el radio de acci¨®n sobre el cursor es bastante limitado y hay que ir con mucho cuidado examinando los lugares.

Apartado t¨¦cnico

De nuevo, las reacciones que provoca el apartado gr¨¢fico en el jugador son bastante desoladoras. Los escenarios lucen bastante bien (aunque no son precisamente perfectos), pero son im¨¢genes est¨¢ticas que, en caso de interactuar con ellas, se produce un r¨¢pido cambio hacia una nueva imagen est¨¢tica.

Los modelados de los personajes son muy extra?os, con unas proporciones poco cre¨ªbles, ya que las manos parecen inhumanas. En las escenas de juego normal, los personajes secundarios con los que interactuar est¨¢n irregularmente representados. A veces presentan un movimiento cre¨ªble y dan la impresi¨®n de estar vivos, pero otras veces parecen un amasijo de p¨ªxels que cuesta unos segundos distinguir con nitidez.

Las escenas pregrabadas muestran un buen acabado, a pesar de lo llamativo del modelado y dise?o de los personajes, que se hacen dif¨ªciles de creer en pantalla en algunas ocasiones. A pesar de eso, las animaciones en esos momentos son fluidas, cumpliendo con soltura su papel de darle una continuidad a la acci¨®n de modo cinematogr¨¢fico.

En cuanto a los escenarios, decir tambi¨¦n que est¨¢n presentados de un modo irregular, ya que mientras en algunos lugares se encuentran paisajes llenos de detalles, con gran cantidad de elementos decorativos, en otras ocasiones son bastante desoladores, carentes de adornos y en algunas ocasiones con escasos elementos que presentan un aspecto demasiado plano.

El apartado sonoro del juego tampoco destaca especialmente, sobre todo si se tienen en cuenta las maravillosas melod¨ªas de anteriores entregas (la del primer Atlantis es una aut¨¦ntica maravilla sonora). Cierto es que no siempre se puede lograr la perfecci¨®n y m¨¢s cuando el list¨®n est¨¢ tan alto, pero tampoco caer en picado. Ninguna melod¨ªa destaca especialmente y pr¨¢cticamente pasa desapercibida la banda sonora del juego.

Como viene siendo habitual, el juego est¨¢ doblado y subtitulado al idioma espa?ol, con un cierto descuido. Es verdad que no soy muy partidario del doblaje espa?ol, pero s¨¦ reconocer cu¨¢ndo se hace bien un trabajo, y este no es el caso. Voces poco apropiadas para los personajes, que se suman a la poca (o nula) personalidad y carisma de la que hacen gala tanto el protagonista como los atlantes que se encontrar¨¢ en su camino. Realmente memorable el momento en el que Curtis hace burla de uno de los personajes con una imitaci¨®n realmente irrisoria de una de las pocas voces decentes del t¨ªtulo.

Los di¨¢logos tampoco son especialmente llamativos, ya que salvo alguna que otra conversaci¨®n inteligente, los personajes son de encefalograma bastante plano. En otro tipo de juego, esto puede ser m¨¢s irrelevante, pero en una aventura gr¨¢fica donde la base est¨¢ en esas conversaciones, se trata de algo muy importante.

'?Nunca hab¨ªa visto nada igual, ni siquiera en Nueva York!' es la frase que utiliza el protagonista cuando ve algo que no conoce, y es de las pocas llamativas. Por lo dem¨¢s, muchas conversaciones sobre dioses y la civilizaci¨®n de la Atl¨¢ntida, que en muchas ocasiones son realmente interesantes, pero que en otras tantas pecan de pesadas, innecesarias y aburridas.

En general, se trata de un apartado t¨¦cnico que cumple su papel, pero que no destaca sobremanera en ning¨²n apartado, mientras que s¨ª que se presenta como muy mejorable en otros muchos, como el caso del doblaje.

Estrategia y trucos

Como toda buena aventura, Atlantis: Evolution centra todo su potencial e inter¨¦s en puzzles que se suceden a lo largo de la historia. A diferencia de otras aventuras, se trata de puzzles bastante sencillos, que no presentan mayores complicaciones. Por ejemplo, algunos de los primeros retos son buscar una cuerda y un cubo para coger agua o seguir un camino en el orden correcto para poder escapar de una base.

Aparte de los acertijos, son tambi¨¦n muy importantes las conversaciones, ya que muchas veces se podr¨¢ seguir avanzando s¨®lo tras hablar de una determinada cosa con uno determinado personaje, como si de un RPG se tratase. Esto muchas veces acarrea tener que pasarse un buen rato conversando con un personaje, soportando conversaciones, como ya se ha dicho antes, a veces tediosas.

Compar¨¢ndolo con?

Para aquellos que busquen aventuras, se pueden encontrar ya disponibles t¨ªtulos bastante superiores como el reciente y genial Myst IV, que es un juego superior en todos los aspectos a este Atlantis Evolution.

Dentro de la misma saga, son altamente recomendables la primera y tercera entrega, que har¨¢n las delicias de los aficionados al g¨¦nero. Sin retroceder mucho en el tiempo (que nos llevar¨ªa a la edad de oro de las aventuras gr¨¢ficas con grandes t¨ªtulos memorables), Dr¨¢cula Resurrecci¨®n y su secuela tambi¨¦n son superiores a este Atlantis Evolution.

Escapar de cosas como Schizm o Road to India, que s¨ª que son inferiores al juego que nos ocupa.

Lo que est¨¢ bien

Lo que no est¨¢ tan bien

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