?Qu¨¦ hay de nuevo?... pues m¨¢s bien poco

La quinta entrega del juego de rallies m¨¢s famoso de todos los tiempos est¨¢ a punto de llegar a PC. ?Era posible mejorar la anterior entrega?, es evidente que s¨ª, pero tan ardua ha debido ser la tarea que pocas novedades veremos en la edici¨®n de este a?o. Todo muy bonito, pero igual a lo ya visto.

En el mundo de los rallies pocas sagas pueden presumir de llegar tan lejos como la protagonizada por el piloto escoc¨¦s Colin McRae. El primer juego demostr¨® lo divertido que pod¨ªa ser pilotar uno de estos impresionantes veh¨ªculos a toda pastilla por serpenteantes caminos de tierra.

Desde entonces han salido a la venta tres entregas m¨¢s, y la anterior, con la coletilla 04 dej¨® el list¨®n muy alto, quiz¨¢s demasiado. Tan alto fue el nivel, que parece que en Codemasters ya no saben c¨®mo superarse a s¨ª mismos, y por culpa de eso tenemos una quinta entrega que se parece demasiado a su predecesora.

Por supuesto hay novedades. Pocas, pero las hay, e incluso alguna importante, como el nuevo modo de juego llamado 'Carrera', del cual hablaremos m¨¢s a fondo en el correspondiente apartado. Los circuitos son todos nuevos, y hay bastantes, e incluso tambi¨¦n hay algunos efectos gr¨¢ficos nuevos, pero todo lo dem¨¢s?

Es duro reconocerlo, pero al ponerse a jugar a Colin McRae 2005 da la impresi¨®n de estar ante la edici¨®n del a?o pasado. Todo luce igual, desde las opciones, hasta los coches, pasando por los escenarios, los efectos de luz, de sonido. Conviene aclarar que todo eso era bueno en su momento y l¨®gicamente lo sigue siendo, pero hace falta algo m¨¢s para sacar un 'nuevo' juego a la venta.

Gr¨¢ficos y Sonido

El apartado visual es una aut¨¦ntica delicia, siempre y cuando tengamos el equipo necesario para poder poner todos los detalles a tope, y eso tiene un precio. Si lo podemos pagar, podremos disfrutar de un aut¨¦ntico espect¨¢culo a nivel visual, tanto en los veh¨ªculos como en los escenarios.

Los coches tienen un acabado fant¨¢stico, realmente soberbio. Son replicas totalmente exactas de sus hom¨®nimos de metal y acero, hasta el ¨²ltimo detalle, pliegue, curva o pegatina. Adem¨¢s, se rompen de una manera totalmente realista seg¨²n la zona por la que los golpeemos, ya que primero se abollan, luego se rompen, y finalmente perder¨¢n las piezas si seguimos golpe¨¢ndolos en esa zona.

Una de las novedades gr¨¢ficas es que ahora podemos rascar la pintura. Cuando le damos un golpe al coche, si no es muy fuerte no se abollar¨¢, sino que s¨®lo perder¨¢ la pintura. Si el golpe es m¨¢s fuerte, adem¨¢s de la abolladura, perder¨¢ la pintura de esa zona, y a medida que la estructura se vaya rompiendo, todas las zonas ir¨¢n perdiendo la capa de pintura. Y adem¨¢s de una forma muy realista.

Hablando de novedades, no podemos olvidar los nuevos efectos de reflejos que se han incluido sobre la carrocer¨ªa de los coches. Ahora es posible ver reflejos aut¨¦nticos seg¨²n la zona por la que pasamos. Si por ejemplo atravesamos un bosque, podremos ver como la luz incide de manera diferente en la carrocer¨ªa seg¨²n le da la luz o la sombra. Otra novedad es el efecto 'Blur' que aparecer¨¢ cuando tengamos un accidente, ideal para representar gr¨¢ficamente el estado del piloto tras el choque.

Si pasamos a hablar de los escenarios, estos son quiz¨¢s la parte que menos mejoras ha sufrido. Los ¨¢rboles se mueven con el viento, y caen hojas cuando chocamos con ellos. El agua se ha mejorado un poco y ya no parece tan irreal. El p¨²blico tambi¨¦n se ha mejorado un poco y ahora es m¨¢s animado, pero contin¨²a siendo en 2D.

El resto sigue siendo igual, lo que en el fondo no quita que sea magn¨ªfico. Las texturas son impresionantes, sobre todo la del suelo. La hierba sigue siendo genial, especialmente cuando apreciamos como se mueve, aunque contin¨²a apareciendo demasiado cerca de nuestra vista. Los efectos climatol¨®gicos son impresionantes, pero iguales que en la anterior entrega.

Cabe destacar que la lluvia se ha incrementado en los escenarios de tormenta. Ahora cuando diluvie no se ver¨¢ absolutamente nada, y habr¨¢ que conducir pr¨¢cticamente por intuici¨®n (y por los comentarios del copiloto). La vista interior sigue siendo la m¨¢s espectacular en este sentido, con unas gotas de lluvia que quedan perfectas sobre el parabrisas, pero que estorban un poco, especialmente cuando estamos en una tormenta.

Las c¨¢maras disponibles son cinco, las ya conocidas por los aficionados. Dos exteriores m¨¢s o menos cerca del coche, y tres interiores: sin ver el veh¨ªculo, viendo s¨®lo el cap¨®, o desde dentro del coche viendo el volante. ?sta ¨²ltima es sin duda la m¨¢s real del juego, y aunque todas son jugables, es quiz¨¢s la m¨¢s recomendada.

Sin embargo, hay que comentar un detalle acerca de las diferentes c¨¢maras, y es que no todas ofrecen la misma suavidad. En realidad, la c¨¢mara interior en la que no se ve el coche es la que ofrece mayor fluidez a la hora de jugar. Cualquiera de las otras, especialmente las vistas exteriores, hacen que el framerate decaiga ligeramente, lo que reduce la fluidez. No es que afecte mucho, pero hace sospechar que el juego no est¨¢ todo lo optimizado que podr¨ªa.

De hecho, y a menos que tengamos un PC realmente potente, la elecci¨®n de la c¨¢mara puede llegar a influir en la decisi¨®n de c¨®mo configurar las opciones gr¨¢ficas. Es decir, si vamos a jugar con dicha vista, podremos aumentar los detalles gr¨¢ficos. Si vamos a jugar con otras vistas, como la exterior, deberemos rebajar los mencionados detalles hasta dar con un punto justo entre fluidez y acabado gr¨¢fico.

En t¨¦rminos sonoros, hay poco que decir, pero muy importante. Pr¨¢cticamente todo sigue igual que en Colin McRae 04, y eso incluye desde el ruido de los motores hasta los comentarios. Todo suena muy bien, pero da la impresi¨®n de que ya nos lo sabemos, al menos quienes jugamos con la edici¨®n anterior.

Empezando por el sonido de los coches, es espectacular. Todos los coches tienen su propio sonido de motor, de cambio de marchas, y de aceleraci¨®n. Y suena diferente si jugamos con la vista interior o exterior. Si adem¨¢s disponemos de un equipo con sonido envolvente, la sensaci¨®n es como estar realmente dentro de cada veh¨ªculo.

El copiloto est¨¢ realmente acertado casi siempre, aunque el doblaje sea el mismo del a?o pasado con algunas novedades, como que ahora nos canta tambi¨¦n cuando estamos a punto de pasar por un punto de control. El resto, desde las curvas hasta las incidencias del terreno contin¨²an exactamente igual. En el lado negativo, podr¨ªa estar que a veces canta las curvas demasiado r¨¢pido y demasiado pronto, con lo que un jugador no acostumbrado no recordar¨¢ el orden en que vienen, pero para eso est¨¢n las flechas visuales que como siempre se pueden activar o desactivar.

Tambi¨¦n cabe destacar el sonido del p¨²blico. Gritos y aplausos sonar¨¢n cada vez que pasemos cerca de la gente, y con sonido envolvente los oiremos por delante antes de llegar a ellos y por detr¨¢s al alejarnos. Todo de una manera muy convincente. Por ¨²ltimo, destacar tambi¨¦n los sonidos de los choques, que son tan realistas como los motores, y realmente hacen que los accidentes duelan casi de verdad.

Jugabilidad

Colin McRae siempre ha sido un prodigio de jugabilidad, siendo su punto fuerte ante otros juegos que s¨ª contaban con licencias oficiales del mundial de rallies. La verdad es que en t¨¦rminos de jugabilidad, hay realmente muy pocas novedades, todav¨ªa menos que en el apartado gr¨¢fico. En realidad, s¨®lo hay una novedad: el modo carrera.

El modo carrera consiste en poner al jugador en la piel de un piloto que surgido de la nada debe abrirse camino hasta la cima, consiguiendo ganar los diferentes torneos y competiciones de rally, hasta finalmente ganar el codiciado mundial de rallies. ?sta por supuesto es la ¨²ltima prueba, y equivale pr¨¢cticamente al modo principal de juego que ha acompa?ado a toda la saga desde sus or¨ªgenes.

En realidad, esto no es m¨¢s que una disculpa para que el jugador vaya superando una serie de torneos, ganando coches y puntos. Cada torneo tiene una serie de puntos necesarios para participar, y a su vez otorga puntos cuando el jugador lo finaliza. Esos puntos sirven para acceder a otros torneos, hasta llegar al mundial de rallies.

El resto sigue todo igual, aunque eso no es excusa para no hablar de ello. Al comenzar a jugar se nos presenta un bonito y funcional men¨² en el que podremos escoger lo que hacer, desde partida r¨¢pida, hasta el juego online, pasando por el modo campeonato (el cl¨¢sico modo de toda la vida) o el modo carrera.

Ya sea en uno o en otro, al comenzar a jugar se nos presenta la cl¨¢sica pantalla de selecci¨®n de dificultad, que var¨ªa seg¨²n la facilidad del coche para recibir da?os y romperse. Luego escogemos el veh¨ªculo en cuesti¨®n de entre los disponibles (recordad que hay un mont¨®n de coches secretos) y finalmente es hora de empezar.

Antes de correr, tambi¨¦n hay que configurar el veh¨ªculo. Las opciones son las de siempre: neum¨¢ticos, suspensi¨®n, direcci¨®n, barra antivuelco, motor? y todos ellos con las cl¨¢sicas cinco opciones. Despu¨¦s de ver los circuitos y sus condiciones, es hora de salir a la pista.

A la hora de correr, la primera elecci¨®n es la c¨¢mara. La interior sin veh¨ªculo nos ofrece m¨¢s suavidad, la interior tras el volante ofrece m¨¢s realismo, y la exterior quiz¨¢s ofrece un poco m¨¢s precisi¨®n al poder ver los laterales del coche, adem¨¢s de ser la m¨¢s espectacular gracias a lo bien acabados que est¨¢n estos. ?Cu¨¢l escoger?... la pregunta es complicada, m¨¢xime cuando todas ellas son jugables, y mucho. Lo mejor es que cada uno las pruebe todas y decida por s¨ª mismo.

Independientemente de la c¨¢mara, es la hora de correr, y de demostrar porqu¨¦ este juego engancha. Quiz¨¢s la clave est¨¢ en lo ajustado del control, del coche, o la casi perfecta calibraci¨®n entre velocidad y giro. El caso es que nuestro veh¨ªculo responde perfectamente a nuestras ¨®rdenes, y cada cambio que hagamos en los men¨²s tendr¨¢ su repercusi¨®n en la partida.

Una de las dos novedades que podemos notar a la hora de conducir es que ahora los derrapes son m¨¢s dif¨ªciles de controlar. S¨®lo un poco m¨¢s, que nadie se asuste. Antes quiz¨¢s se pod¨ªa estirar o acortar un derrape seg¨²n nos hiciera falta, pero ahora eso es m¨¢s complicado, ya que el coche tiende a tener m¨¢s o menos inercia de la que nosotros queramos en cada caso. Esto viene a resultar en que el juego se vuelve un poco m¨¢s complicado.

La otra novedad, es sencillamente la dificultad que se ha a?adido a las pistas con piedras, como por ejemplo a las que se pueden encontrar en Grecia. Antes, correr all¨ª era muy parecido a hacerlo en pistas de tierra, pero ahora el coche reacciona de otro modo, botando de forma muy irregular, y dificultando bastante la conducci¨®n. En estos escenarios ahora tambi¨¦n aparecer¨¢n peque?as piedras en medio del camino que podr¨¢n ir estropeando el coche si pasamos sobre ellas.

Finalmente, para aumentar la jugabilidad es necesario un buen perif¨¦rico. Lo ideal para estos casos es un volante, cuanto m¨¢s completo mejor. Con eso, la vista interior, y sonido envolvente, la experiencia de juego se vuelve impagable. En caso de no disponer de un volante, un mando de control anal¨®gico puede ser una soluci¨®n, ya que por lo menos as¨ª podremos controlar el giro y la aceleraci¨®n en su justa medida, cosa importante para tomar las curvas correctamente. Lo que en ning¨²n caso es recomendable es jugar con las teclas, ya que es totalmente impreciso, y no permite disfrutar por entero de las partidas.

El modo online

El modo online merece menci¨®n aparte, y a pesar de que no es una gran maravilla, siempre es agradable que se incluya. En este modo, tras conectarse a GameSpy, tenemos dos opciones, o buscar una partida, o crearla nosotros. La b¨²squeda puede ser r¨¢pida, en cuyo caso buscar¨¢ todas las partidas que haya, o restringir la b¨²squeda por par¨¢metros. Hasta ocho jugadores pueden competir a la vez.

Una vez seleccionada la partida, que podr¨¢ ser una etapa, o bien un rally completo, nos ponemos a jugar. La partida va muy bien, muy suave y sin parones con una conexi¨®n de cable de 300/150 kb/s. Los rivales s¨®lo son sombras de colores semitransparentes con los que no podemos chocar, y esto es as¨ª a la fuerza. En caso de que un jugador tenga un ping demasiado alto (a menos que sea el anfitri¨®n, claro est¨¢), no afectar¨¢ a los dem¨¢s jugadores, ya que la partida se desarrolla como si fuera offline, mientras continuamente se intercambia la posici¨®n de los jugadores en el circuito. Como unos no pueden influir sobre otros, el tr¨¢fico de informaci¨®n es muy bajo, y no hay problemas.

Una vez que la partida ha terminado se vuelve al men¨² y se comienza de nuevo. Se puede seleccionar un circuito tramo, el mismo otra vez, o si estamos corriendo un rally, el propio juego se encarga de situarnos en el siguiente, aunque no hay ning¨²n tipo de puntuaci¨®n o tiempo acumulable en este ¨²ltimo caso.

Para terminar, es una pena que no se hayan incluido ning¨²n tipo de opciones de chateo, ni por voz, ni mediante teclado, lo que hace muy impersonales las carreras. ?nicamente habr¨¢ algunos mensajes autom¨¢ticos durante la partida para anunciar cuando alguien va en cabeza o choca.

Estrategia y trucos

La mejor estrategia, como siempre, es asegurarse de seleccionar las opciones adecuadas antes de cada carrera. Salir a correr sobre mojado con ruedas de seco har¨¢ que el coche se nos vaya en cada curva. O salir a correr con la altura muy baja en un rally con baches har¨¢ que el coche se da?e demasiado en los saltos. Es muy importante configurar bien el coche.

Los trucos en este t¨ªtulo, como en todos los de Codemasters, son evidentes. Desde desbloquear todas las categor¨ªas, hasta conseguir efectos curiosos durante la partida. Desbloquearlos es cuesti¨®n de tiempo y de jugar mucho, pero si no quieres esperar, s¨®lo tienes que pasarte por la p¨¢gina oficial de los c¨®digos para descargarlos y desbloquearlos ya mismo.

Compar¨¢ndolo con?

La primera comparaci¨®n l¨®gica es su predecesor. Colin McRae 2005 es pr¨¢cticamente id¨¦ntico a Colin McRae 04, salvo alguna novedad gr¨¢fica, alg¨²n nuevo elemento jugable y el modo carrera, que alarga considerablemente el juego, pero que tampoco es el invento del a?o (de hecho ya se ha visto en otros juegos similares). Y lo cierto es que teniendo en cuenta el precio de los juegos hoy en d¨ªa, estos dos se parecen demasiado como para no notarlo.

La segunda comparaci¨®n necesaria es su gran rival ahora mismo: Richard Burns Rally. Este juego, a diferencia de Colin McRae Rally que es un juego puramente arcade, es un simulador. En un simulador, pr¨¢cticamente todos los elementos que nos podamos imaginar afectan, lo que dificulta enormemente el juego, haci¨¦ndolo m¨¢s realista. Que Colin McRae sea un juego m¨¢s bien arcade (con alg¨²n elemento de simulaci¨®n, por supuesto) no es algo malo, ya que habr¨¢ quien no quiera complicarse; aunque el juego de Richard Burns ofrece m¨¢s posibilidades en casi todos los sentidos.

La tercera comparaci¨®n ser¨ªa la edici¨®n de este a?o de World Rally Championship, el ¨²nico juego que cuenta con la licencia oficial del mundial de rallies, y que es exclusivo de PlayStation 2. Como de momento todav¨ªa no ha salido, no se puede comparar, pero un a?o m¨¢s es una pena que otros juegos de rallies no puedan disfrutar de nombres y circuitos reales.

Lo que est¨¢ bien

Lo que no est¨¢ tan bien