La vida en la granja

Se puede decir que la saga Harvest Moon es adem¨¢s de un cl¨¢sico, una valiente pionera en el mundo del videojuego. Naci¨® hace casi diez a?os, y por aquel entonces, la variedad de g¨¦neros no destacaba por ser especialmente amplia. Y ahora, cuando el r¨¢pido crecimiento de la industria ha obligado a muchos estudios a concentrar sus esfuerzos en los g¨¦neros m¨¢s populares, es admirable ver como este simulador de vida rural sigue en plena forma.

Tras su paso por las consolas port¨¢tiles emblema (Gameboy y Gameboy Color), y tras dejar adem¨¢s un buen n¨²mero de t¨ªtulos en varias consolas de sobremesa, tanto de Sony como de Nintendo, se estrena esta vez en Gameboy Advance. No es que traiga muchas novedades, pero s¨ª toda la esencia de esta peculiar saga, y es que parece que en la granja de Natsume no se pone el sol nunca.

Y es que en una granja hay tanto por hacer... y es esto precisamente lo que mejor refleja la principal caracter¨ªstica de Harvest Moon, el inmenso n¨²mero de tareas y acciones que puedes realizar. La misi¨®n es, por supuesto, hacer rentable esta granja. El dinero con el que se empieza basta para comprar unas semillas, que bien plantadas y cuidadas dar¨¢n pronto sus frutos, que vendi¨¦ndolos dar¨¢n suficientes beneficios para comprar m¨¢s semillas o... quiz¨¢s una gallina o una vaca. Y as¨ª, cuidando de la granja, quiz¨¢s en pocos a?os acabes consiguiendo lo que desde el principio a?orabas: una bonita casa en el pueblo, y una feliz familia.

Porque s¨ª, el protagonista (al que se le personaliza con un nombre y una fecha de nacimiento) puede casarse. Flirtear con las chicas del pueblo acabar¨¢ siendo tan complicado como gestionar la granja y sus inversiones, y es muy importante que no descuides ninguna de estas dos tareas. Al fin y al cabo... nadie quiere casarse con un holgaz¨¢n que se pasa todo el d¨ªa en el pueblo, ni con un obseso del trabajo que no sale de su granja.

En el caso de que dispongamos de dinero suficiente, puede que ya hayamos comprado un par de cabezas de ganado, o unas cuantas gallinas. Los animales no se cuidan solos, as¨ª que si queremos que produzcan leche o huevos, hay que poner especial atenci¨®n en alimentarlos bien y cuidar de que no enfermen.

?Pero y si resulta que es S¨¢bado y nos apetece un d¨ªa de descanso? Al fin y al cabo eres humano, y un sobreesfuerzo en tus tareas puede acabar con una visita a la cl¨ªnica y unos cuantos d¨ªas sin poder trabajar.... En ese caso no hay problema, Harvest Moon ofrece tambi¨¦n multitud de opciones para hacer un poco el vago. Un ba?o en las aguas termales, un pase¨ªto por la monta?a recogiendo de paso flores o materiales ¨²tiles para el trabajo, o mejor: un garbeo por el pueblo para ver si esa chica a la que le echaste el ojo acaba rindi¨¦ndose a tus pies... 

Quiz¨¢s la mejor oportunidad para mejorar tu relaci¨®n con las chicas del pueblo sea en las fiestas y celebraciones del pueblo. Hay tres o cuatro en cada estaci¨®n: desde concursos de cocina hasta carreras de caballos, y es entonces cuando toda la gente del pueblo deja por un d¨ªa sus tareas y se re¨²ne en la plaza para celebrar el evento a lo grande. Se puede participar en muchos de estos eventos, y cuando no, siempre son una buena oportunidad para mejorar esas relaciones vecinales.

Cada persona del pueblo es un amigo en potencia y conviene llevarse bien con todo el mundo. Al fin y al cabo, son tus vecinos los que te venden las semillas, el ganado, los que mejoran tus ¨²tiles de labranza, y los que ir¨¢n a tu boda el feliz d¨ªa que te cases.

Todas estas tareas que se pueden realizar, se traducen al final en un manejo muy sencillo. Los controles aprovechan al m¨¢ximo los botones disponibles en la consola, y toda una multitud de acciones, que normalmente requerir¨ªan acceder a un men¨² secundario, est¨¢n disponibles con tan s¨®lo presionar un par de botones. As¨ª que es de agradecer como - por ejemplo - se cambia de herramienta simplemente pulsando el gatillo R y el bot¨®n B. Es una opci¨®n que otros Harvest Moon no comparti¨¢n y que, todo sea dicho, lentificaba el ritmo de juego, que ya de por si no es precisamente fren¨¦tico.

En cuanto al sonido, en Natsume se han esforzado por samplear sonidos de animales reales, y aunque quiz¨¢s suenen un poco enlatados a trav¨¦s de los altavoces 8-bit mono de la GBA, la verdad es que ambientan perfectamente al t¨ªtulo. Igualmente las melod¨ªas, lo cual es de agradecer trat¨¢ndose de un t¨ªtulo como este, que normalmente proporcionar¨¢ tantas y tantas horas de juego.

Y para terminar... una sorpresa. Aun a expensas de que Harvest Moon : A Wonderful Life para Gamecube aparezca publicado por estos lares, Friends of Mineral Town ofrece conectividad con su futuro hermano mayor. Esta conectividad se traduce en nuevos personajes y lugares para visitar, que a su vez a?aden m¨¢s opciones al juego (la de comprar piezas de m¨²sica de los cl¨¢sicos Harvest Moon, por ejemplo).