m¨¢s madera!

Dos a?os despu¨¦s de que Rainbow Studios editara ATV Offroad, llega la segunda parte de manos del mismo equipo de programaci¨®n. No se han introducido profundos cambios y el juego mantiene el trepidante desarrollo, mezcla entre simulaci¨®n y arcade, y un control casi inmediato de la precuela.

ATV Offroad Fury 2 pone a nuestra disposici¨®n 20 quads todoterreno a elegir, los cu¨¢les se han implementado a partir de modelos reales. La extensa variedad de veh¨ªculos se complementa con un total de 40 circuitos diferentes, repartidos entre las distintas modalidades de juego que nos ofrece Rainbow Studios. Pronto nos damos cuenta el cuidado que se ha puesto para satisfacer a los freakies de este arriesgado deporte: podremos personalizar nuestro piloto al m¨¢ximo, desde la indumentaria hasta la marca de las gafas protectoras. Al igual que ocurrir¨¢ con las motos y los circuitos, una gran cantidad de material se mantendr¨¢ oculto hasta que lo desbloqueemos. Esta t¨¢ctica de acumular puntos ganando carreras con el fin de obtener secretos no es ni mucho menos nueva, pero sigue funcionando como el primer d¨ªa para mantener el inter¨¦s en el juego.

Una vez metidos en faena, podemos comprobar que el quad responde a las mil maravillas al pad de nuestra consola. El control es simple y directo y posee una curva de aprendizaje muy corta, bas¨¢ndose en la carga de la suspensi¨®n a la hora de saltar. Como quiera que los circuitos de esta ¨ªndole poseen gran cantidad de rampas, es esencial saber tomarlas a la perfecci¨®n para maximizar el salto y no perder velocidad y estabilidad. Por otra parte, tendremos a nuestra disposici¨®n una mayor cantidad de acrobacias para realizar cuando estemos en pleno vuelo. No ser¨¢ nada dif¨ªcil llevarlas a cabo, pero s¨ª habr¨¢ que calcular el momento de efectuarlas si no queremos acabar, literalmente, mordiendo el polvo.

Por desgracia, Rainbow Studios se ha tomado demasiado al pie de la letra la m¨¢xima de 'Si algo funciona, para qu¨¦ cambiarlo'. Quiero decir con esto que ATV Offroad Fury 2 sigue siendo un buen juego para vivir sin complicaciones la experiencia que proporciona el pilotar un quad a trav¨¦s de peligrosos circuitos, pero la mejora gr¨¢fica (l¨®gica por otra parte) y las nuevas opciones no parecen argumentos de peso para adquirir esta segunda parte si tenemos la primera. M¨¢xime si tenemos en cuenta que el modo online se ha quedado por el camino, algo que habr¨ªa abierto muchas posibilidades al ya de por s¨ª divertido multijugador.

El dise?o de los circuitos se mantiene a un correcto nivel. Se han mejorado las texturas en general, pero siguen siendo demasiado planas (ni rastro de bump mapping) y la iluminaci¨®n din¨¢mica se reduce a la recreaci¨®n de sombras en tiempo real, algo que ya exist¨ªa en la primera parte. Para la ocasi¨®n se ha intentado darle algo m¨¢s de viveza al escenario, con detalles como una locomotora cruzando la v¨ªa o la aparici¨®n espor¨¢dica de fauna propia del entorno. De todas formas, siguen existiendo muchos circuitos con aspecto desangelado y solitario.

Los circuitos que se celebran en pista son los mejor parados y cuentan con el mayor n¨²mero de detalles, mejorando la representaci¨®n del estadio respecto a la primera parte. En la gran mayor¨ªa de terrenos por los que circularemos, nuestro quad levantar¨¢ polvo y tierra a nuestro paso. Este efecto se ha implementado con bastante mediocridad, quedando muy lejos del que muestran t¨ªtulos como Colin McRae 04 o el mismo GT3. Lo que s¨ª podremos ver es la tierra y el fango adheridos a nuestra moto y al propio piloto conforme avanzamos en la carrera.

Por ¨²ltimo, hay que decir que la c¨¢mara sigue estando por defecto a una posici¨®n bastante alejada de nuestra vista. Por suerte disponemos de multitud de vistas distintas para disfrutar plenamente de la acci¨®n, e incluso recrearnos en ella gracias al stick anal¨®gico derecho, con el que podremos rotar la vista si tenemos la suficiente destreza. ?Por cierto!, probad la vista en primera persona. Es francamente espectacular, pero os aviso que requerir¨¢ de mucha pr¨¢ctica.

La clave en el control del quad ser¨¢ dominar la carga de suspensi¨®n en los saltos, puesto que no podemos permitirnos el lujo de perder velocidad en cada rampa del circuito. Mediante el stick anal¨®gico podremos desplazar el cuerpo del piloto hacia atr¨¢s a la hora de encarar la rampa para tomar el mayor impulso posible, y tumbar el peso hacia delante mientras estemos en el aire, para ganar trayectoria y aterrizar de la mejor forma posible. Si logramos dominar este apartado, podremos superar a los otros pilotos e incluso pasarles por encima durante el salto.

A la hora de elegir una moto u otra tenemos tres caracter¨ªsticas esenciales que diferenciar: Motor (Acelaeraci¨®n-Velocidad punta) , Tracci¨®n (m¨¢s o menos suelta) y Suspensi¨®n (Ligera-Dura). Podremos modificar los reglajes dentro de unos l¨ªmites, pero la moto no podr¨¢ mejorarse a?adiendo piezas ni nada parecido.  Los modos de juego que tendremos a nuestra disposici¨®n son los siguientes: Entrenamiento, incluido un peque?o tutorial para el manejo de la moto; Carrera, para practicar en cualquier circuito del juego; Campeonato, donde para avanzar habr¨¢ que quedar en una determinada posici¨®n; Freestyle, en el que podremos hacer todo tipo de acrobacias; Waypoint, donde podremos modificar rutas sobre circuitos ya creados.

El aliciente de ganar puntos para conseguir completar el 100% del juego y la diversidad de competiciones aseguran entretenimiento para bastante tiempo. Es una l¨¢stima que no se hayan esforzado en implementar los 60 Hz y asegurar la total fluidez del juego, algo que le resta bastantes puntos.

l  o    m  e  j  o  r

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