La lucha digievoluciona.

Desde que los Digimon llegaron al mercado, todo tipo de productos y juegos han visto la luz. Ahora le toca el turno al pen¨²ltimo, en un precario intento de portar el g¨¦nero de la lucha a la port¨¢til de Nintendo.

Hablar hoy en d¨ªa del fen¨®meno que suponen los Digimon carece de sentido. Todo el mundo ha o¨ªdo hablar de ellos, y pr¨¢cticamente todo el mundo habr¨¢ visto por lo menos alg¨²n cap¨ªtulo de la serie de televisi¨®n. De igual modo, todos los adictos a los videojuegos ya saben que hay una cantidad nada despreciable de juegos basados en el tema.

Juegos de casi todo tipo de g¨¦neros y para casi todas las consolas. Algunos mejores y otros peores. En este caso en particular hay que reconocer, muy a nuestro pesar, que la calidad ha quedado bastante baja, siendo el nombre lo m¨¢s llamativo del juego.

Y es que es algo muy com¨²n ver como las licencias famosas son aprovechadas para hacer productos de baja calidad. En el caso de Digimon, ya hemos visto juegos de calidad, aunque no lo fueran todos, y por desgracia, ¨¦ste se quedar¨¢ en el olvido para todos aquellos que no sean muy fans de los conocidos monstruos digitales.

Para hablar del juego, primero hay que hacer alguna comparaci¨®n obligada, ya que la idea tampoco es demasiado original. Digimon Battle Spirits es un juego de lucha en 2D, pr¨¢cticamente id¨¦ntico a los ¨²ltimos juegos de Medabots tambi¨¦n vistos en Game Boy Advance. Ambos t¨ªtulos son totalmente clavados salvando a los personajes, las digievoluciones y los ataques, por lo que ni siquiera la originalidad es un punto a favor.

 g r ¨¢ f i c o s

El apartado gr¨¢fico es excesivamente pobre para los tiempos que corren, incluso para una port¨¢til. Los personajes son peque?os, poco definidos, y con una animaci¨®n muy escasa. Los efectos especiales son los justos para que no se lleguen a echar en falta, y se limitan a ser el resultado de los ataques.

Los dem¨¢s elementos de los escenarios, principalmente las plataformas, est¨¢n realizados sencillamente para no desentonar, pero al menos no resultan negativas para el apartado gr¨¢fico en general. Por ¨²ltimo, los fondos de los escenarios no est¨¢n tan mal como el resto, aunque no llegan a ser de calidad si se comparan con otros juegos.

El apartado sonoro sufre de las mismas carencias que el gr¨¢fico. Poco trabajo traducido en una calidad bastante mejorable. Melod¨ªas que acompa?an sin ninguna gracia, pero que al menos no molestan. La calidad del sonido tampoco es nada del otro mundo, aunque viendo la calidad general del juego, tampoco queda muy por debajo.

Los efectos de sonidos son los cl¨¢sicos para cualquier juego de lucha. Golpes, ataques, saltos y punto. No hay muchos, del mismo modo que tampoco hay muchas acciones que se puedan realizar en el juego. Los que hay cumplen, igual que en cualquier otro juego del mont¨®n, pues a fin de cuentas, esa es la impresi¨®n que da.

 j u g a b i l i d a d

El juego consiste en manejar a un Digimon a trav¨¦s de una pantalla cerrada con un pu?ado de plataformas. En esta pantalla hay otro Digimon al que habr¨¢ que derrotar a base de golpes, digievoluciones y ataques especiales. Cada vez que un Digimon es golpeado pierde un n¨²mero de gemas proporcional a la potencia del golpe. Al final del tiempo de combate, quien tiene m¨¢s gemas gana.

Para controlar a cada Digimon se utilizan A y B para atacar y saltar. Con L y R se pueden usar las habilidades individuales de cada Digimon, y con la cruceta se controla la direcci¨®n hacia la que se desplaza.

La mec¨¢nica del juego es demasiado simple. Atacar, atacar y atacar m¨¢s. Cuando se consigue digievolucionar, hay que intentar golpear al oponente aprovechando mientras dure, ya que al poco tiempo se vuelve al estado normal. Por el contrario, cuando es el Digimon rival el que digievoluciona, hay que huir lo m¨¢s r¨¢pido posible hasta que se le pase el estado.

 c o n c l u s i ¨® n

La conclusi¨®n a la que se llega tras haber jugado unas cuantas partidas es que a este juego le falta algo? mejor dicho, le falta mucho. Desde originalidad, hasta diversi¨®n, pasando por modos de juego, o unos gr¨¢ficos un poco m¨¢s trabajados. Quiz¨¢s no se le pueda acusar de fracasar de forma estrepitosa en todos y cada uno de sus apartados, pero lo que si se puede decir, es que ninguno ellos tiene lo suficiente como para llegar al aprobado.

Los muy fans de los Digimon quiz¨¢s lo consideren interesante por ver a sus h¨¦roes; pero el resto de los jugones deber¨ªan plantearse el buscar una alternativa m¨¢s completa. Cosa que no es muy complicada.

 l o   p e o r