Los chicos duros nunca mueren.

Tras gozar de una amplia y merecida ¨¦poca dorada hace muchos a?os, vuelven a estar de moda dos de los polic¨ªas m¨¢s duros y divertidos de todos los tiempos. Starsky y Hutch vuelven a ponerse de moda con este videojuego multiplataforma.

Es posible que la mayor¨ªa no sepan quienes fueron esos dos polic¨ªas llamados Starsky y Hutch, ya que su momento de gloria fue en los a?os 70, y s¨®lo los m¨¢s veteranos recordar¨¢n sus andanzas por la televisi¨®n. Sin embargo, y aunque pueda parecer incre¨ªble, en aquel entonces eran el nova m¨¢s de las series de acci¨®n, y ambos polic¨ªas eran los ¨ªdolos que los j¨®venes quer¨ªan imitar.

Ahora puede que el tiempo los haya tratado un poco mal, pero siguen ah¨ª, dando guerra, tal como lo demuestra la pel¨ªcula que se est¨¢ rodando y que sigue con la moda de reconvertir series antiguas a los tiempos modernos.

Pero al margen de una posible actualizaci¨®n del mito, llega este juego basado completamente en la serie original, con todos sus patrones, pros y contras. Evidentemente quien recuerde la serie original sentir¨¢ una nostalgia impagable al dsifrutar con este juego. Pero quien no conozca a estos dos polic¨ªas puede que la idea no llegue con demasiada gracia, e incluso ese olorcillo que el juego tiene a los a?os 70 se vuelva algo desagradable.

Dejando aun lado la serie en la que est¨¢ basada, habr¨¢ que analizar el juego en s¨ª. Y para empezar, hay que destacar que el aqu¨ª presente es un t¨ªtulo de conducci¨®n puramente arcade. Incluso se podr¨ªa definir como un cruce entre Crazy Taxi y Chase HQ, uno de los mitos del g¨¦nero de la conducci¨®n que pocas veces ha servido de inspiraci¨®n.

Del Crazy Taxi este juego coge el control puramente arcade, las ciudades amplias y de modelado simple, y el motor de saltos y colisiones que resuelve de manera sencilla las situaciones que el jugador vivir¨¢ mientras conduce.

Del Chase HQ coge la idea del juego, que es perseguir a un b¨®lido caus¨¢ndole da?os hasta detenerlo por completo. Para ello hay muchas acciones que se pueden realizar, desde la m¨¢s sencilla que es dispararle, hasta coger todo tipo de elementos que potencien el coche en el que van Starsky y Hutch.

Pero aqu¨ª est¨¢ la mayor virtud, y a la vez el mayor problema del juego. Este sistema de partida est¨¢ muy bien cuando lo que se quiere es conseguir una diversi¨®n m¨¢xima en un periodo de tiempo muy breve. Y efectivamente, nada m¨¢s empezar a jugar y disfrutar de las primeras fases todo es muy divertido, y uno se olvida por completo de los fallos que tiene. Sin embargo, al cabo de 4 ¨® 5 partidas, la idea se vuelve mon¨®tona y repetitiva, haciendo que esos fallos pasen a un primer plano, y acabando por restar enteros a la nota del t¨ªtulo.

El apartado gr¨¢fico de este t¨ªtulo es quiz¨¢s el m¨¢s pobre de todos. El motor gr¨¢fico que mueve el juego es extremadamente simple en todos los aspectos, siendo incluso m¨¢s simple que el primer Crazy Taxi, ya que en ¨¦ste al menos hab¨ªa ingentes cantidades de tr¨¢fico, mientras que en el juego de Starsky y Hutch las calles estar¨¢n tan vac¨ªas que en ciertos momentos no habr¨¢ ni un solo coche circulando por la calle.

Si entramos en detalles, empezaremos hablando de los coches. Estos son los mejor parados, pues est¨¢n realizados con bastante detalle (por lo menos el coche de Starsky y Hutch, y los coches enemigos, que son los que importan). Adem¨¢s, son ligeramente deformables, lo que le da un toque de realismo.

Eso s¨ª, los coches de los enemigos son m¨¢s duros que un tanque, y la cantidad de da?o que necesitan para ser detenidos es casi la equivalente a una bomba, y eso no es muy realista que digamos. De todos modos, el juego tampoco intenta ser realista, ya que todos los gr¨¢ficos imitan un estilo similar al Cell Shading, muy en la l¨ªnea de dibujos animados. De hecho, las  escenas entre fases s¨ª est¨¢n hechas mediante unos dibujos con un claro estilo Cell Shading.

En cuanto a los escenarios, son de lo m¨¢s simple que hay. Los edificios, las calles, los obst¨¢culos, la gente? todo en general tiende a ser plano y carente de detalles. Apenas si hay vida en las calles m¨¢s all¨¢ de unas pocas personas que se dedican a pasear de manera un tanto repetitiva. Los coches tan solo hay los justos para que la ciudad de Bay City no parezca por completo una tumba.

Cierto es que cuando se conduce es de agradecer que toda la carretera est¨¦ disponible, pero cuando las cosas son demasiado f¨¢ciles, la jugabilidad se resiente negativamente.

Por lo menos, y a favor del juego tambi¨¦n hay que decir que no hay ning¨²n fallo t¨¦cnico importante m¨¢s all¨¢ del popping que se genera cuando no hay edificios que nos bloqueen la vista, pero al menos est¨¢ ligeramente disimulado con un peque?o efecto de niebla que evita que resulte demasiado cantoso.

Las m¨²sicas del juego est¨¢n bien seleccionadas, pues representan de maravilla el esp¨ªritu del juego y de la serie. Adem¨¢s del tema principal que estar¨¢ presente, las fases se desarrollar¨¢n con una m¨²sica muy a juego. Tampoco es que sea una maravilla que se haga notar en todo momento, pero en general entona bien las fases.

Los efectos de sonido son una de cal y otra de arena. La mayor¨ªa son buenos, como las explosiones, golpes, sonido del motor y dem¨¢s; pero otros, como los disparos de pistola resultan bastante flojos. Las voces est¨¢n en ingl¨¦s, pero al menos con un doblaje bastante aceptable.

Y llega el momento de ver si el juego, al final, es divertido o no. Lo primero que hay que notar es que aqu¨ª se realiza una uni¨®n de g¨¦neros, combinando la conducci¨®n con los disparos. Ambos g¨¦neros con un claro exponente arcade.

La conducci¨®n se realiza de manera muy sencilla. Con un bot¨®n se acelera y con otro se frena. Con la palanca anal¨®gica se conduce y listo, no hay m¨¢s. Los disparos se realizan con otro bot¨®n m¨¢s, y el punto de mira se desplaza por los objetivos de manera autom¨¢tica, por lo que lo ¨²nico que hay que hacer a lo largo de la partida es pulsar sin parar el bot¨®n de disparo.

En el modo para dos jugadores, quien controle al segundo personaje puede apuntar de manera manual, mientras el primer jugador conduce. Tambi¨¦n puede optar por usar una pistola ¨®ptica para impactar en los enemigos, pero si bien cualquiera de las dos opciones s¨®lo vuelve m¨¢s dif¨ªcil el juego.

En realidad, con solo conducir un poco bien y disparar continuamente las fases se van pasando sin ning¨²n tipo de problema, sobre todo gracias al apuntado autom¨¢tico. Todas las fases tienen misiones diferentes, pero al final, el objetivo es el mismo: detener un veh¨ªculo a base de dispararle mucho. Y al decir mucho se quiere decir much¨ªsimo, pues los veh¨ªculos enemigos llevan unos blindajes impresionantes.

Para darle un poco m¨¢s de gracia al asunto, se han incluido ciertos elementos extra por la ciudad. Estos son iconos que a veces est¨¢n flotando y a veces est¨¢n a nivel de suelo. Los que flotan se pueden obtener dispar¨¢ndoles, y dar¨¢n habilidades extra temporales al veh¨ªculo de la pareja de polic¨ªas. Algunas ser¨¢n turbos, escudos, da?o doble, sirena de polic¨ªa?

Los que est¨¢n a nivel del suelo se consiguen pasando por encima, y su efectos suele ser activar una secuencia especial, o subir el nivel de audiencia. Al activar una secuencia especial, la c¨¢mara cambiar¨¢ y algo pasar¨¢ en pantalla, generalmente espectacular, animando la acci¨®n y subiendo tambi¨¦n la audiencia.

?Y que es eso de la audiencia?. Pues el sistema de juego hay que reconocer que s¨ª es algo original. Las fases est¨¢n distribuidas como si los cap¨ªtulos de la serie se tratasen, y los mundos que componen el juego, ser¨ªan las temporadas que la serie estuvo en antena. Para que la partida no termine, y la serie siga en antena, hay que mantener un nivel de audiencia, y para eso est¨¢n todas las cosas espectaculares que se pueden hacer durante el juego.

Recoger los iconos de aumento de audiencia, disparar a los enemigos, destrozar cajas, realizar saltos, activar secuencias especiales? todos ellos suben la audiencia. Pero tambi¨¦n hay cosas que la bajan. Si Starsky y Hutch no hacen nada la audiencia bajar¨¢, pero si chocan con veh¨ªculos inocentes, o si reciben disparos de los enemigos? esas cosas har¨¢n que baje la audiencia, que si llega a 0, har¨¢ que termine la partida.

Al final ¨¦ste es un juego muy arcade, que como se dec¨ªa antes, divierte mucho en las primeras partidas, pero termina por resultar tedioso a la larga. La simpleza de los gr¨¢ficos, unido a lo repetitivo de las fases le hacen bajar muchos enteros. Como cosas buenas tiene el planteamiento de la idea y lo sencillo de su control, elementos que no se han aprovechado correctamente para hacerlo m¨¢s divertido.

Otro punto a tener en cuenta es lo que a cada uno le guste el ambiente a a?os setenta que tiene la serie. Quien la conozca personalmente encontrar¨¢ ah¨ª un punto m¨¢s del que sacar partido, pero quien no sepa quienes son los carism¨¢ticos Starsky y Hutch puede que no le saque toda la gracia al asunto.