Nunca un viaje al pasado ha resultado tan agradable

Damas y caballeros: en pie. Uno de los pedestales m¨¢s cl¨¢sicos y m¨¢s divertidos que jam¨¢s han sido programados ha vuelto de la tumba para asombrar de nuevo a propios y a extra?os. Gracias Miyamoto, gracias Nintendo.

Hablar de Zelda es hablar de la historia de los videojuegos. Muchos a?os han pasado desde que Shigueru Miyamoto cre¨® el primer Zelda para la ya desaparecida NES. Entonces el juego ya tuvo su ¨¦xito, pero la culminaci¨®n de la saga lleg¨® con el cerebro de la bestia: la Super Nintendo.

La potente m¨¢quina de 16 bits permiti¨® hacer una aut¨¦ntica maravilla l¨²dica con tintes de rol. El juego fue Zelda: A Link to the Past, y gracias a sus impresionantes gr¨¢ficos y a sus perfectas composiciones consigui¨® colocarse en lo m¨¢s alto de las listas de ventas.

Los a?os han pasado, el tiempo se ha ido, y Zelda ha pasado de ser la revoluci¨®n del momento, a subir al olimpo de los videojuegos, como un cl¨¢sico entre cl¨¢sicos. Casi nadie puede hablar mal de aquel juego que cautiv¨® a todo aquel que tuvo la suerte de probarlo.

Y ahora, esta obra maestra se digna en bajar del olimpo para reencarnarse de nuevo en un cartucho de Game Boy Advance. Nunca ser¨¢n suficientes las gracias que hay que darle a Nintendo por haber inventado semejantes maravillas de la diversi¨®n, y es que combinadas hacen el mejor Zelda port¨¢til que haya existido nunca.

Tal acontecimiento suceder¨¢ el pr¨®ximo d¨ªa 28 de marzo, pero de momento en la redacci¨®n ya disponemos de un cartucho de la versi¨®n europea del juego, y por el momento podemos adelantar que tal juego SI estar¨¢ en castellano. Y no con una simple traducci¨®n, sino con una traducci¨®n excelente, con las frases hechas bien pasadas al castellano, y sin ninguna falta de ortograf¨ªa.

Y sin embargo, antes de entrar en el an¨¢lisis en s¨ª, hay que hablar del que puede ser el ¨²nico punto negativo del juego. Su clasicismo, su antig¨¹edad, a la vez que lo convierten en un juego ¨¦pico, tambi¨¦n pueden jugar en su contra. A fin de cuentas, es el mismo juego, con la misma historia, y quiz¨¢s eso no le guste a todo el mundo.

Los gr¨¢ficos de este juego sorprendieron en la ¨¦poca de los 16 bits por muchos motivos. Sorprendieron por su colorido, por su definici¨®n, por lo f¨¢cil que era interactuar con ellos. En su momento eran de lo mejor que hab¨ªa, pero ahora tienen unos cuantos a?os a sus espaldas y hay que juzgarlos en su justa medida.

Pues bien, inlcuso en su justa medida hay que reconocer que todav¨ªa son unos gr¨¢ficos impresionantes. Puede que para una Game Cube est¨¦n un poco desfasados, pero si tenemos en cuenta que hablamos de una Game Boy Advance, una m¨¢quina port¨¢til, estos gr¨¢ficos son de lo mejorcito que se ha conseguido, por encima de Golden Sun o Advance Wars.

Sin embargo, este juego tiene un punto en contra con los otros mencionados. Este Zelda ya ha sido dise?ado hace mucho, y ya ha sido visto en todo su esplendor. Por ello, la novedad no ser¨¢ tanta si ya se ha jugado en su ¨¦poca de Super Nintendo.

Al margen de que ya se viera en su d¨ªa, este juego mejora los gr¨¢ficos de su versi¨®n original. ?C¨®mo es posible?, pues as¨ª es. El colorido es mejor, la nitidez es impresionante. Es lo mismo, pero da la sensaci¨®n de que todo se ve m¨¢s claro. Aqu¨ª Nintendo se ha lucido con una conversi¨®n que, supera al cl¨¢sico original de Super Nintendo, al contrario que otras, que simplemente igualan la versi¨®n original.

Tras las primeras aclaraciones, pasemos a ver como son los gr¨¢ficos en s¨ª, aunque quien haya jugado a la versi¨®n de 16 bits ya sabr¨¢ lo que va a encontrar. El juego se disfruta desde una perspectiva cenital, es decir, sobre del protagonista. Link, puede moverse hacia cualquier direcci¨®n, e interactuar con casi todo lo que se encuentre en su camino.

Y todas las animaciones est¨¢n realizadas de manera soberbia, sobre todo las de Link. Desde el simple movimiento de caminar, hasta el uso de la espada est¨¢ muy recreado, con una animaci¨®n fuera de toda duda. Los enemigos tampoco se quedan atr¨¢s, sobre todo los jefes finales, que adem¨¢s de presumir de un gran tama?o, est¨¢n igualmente bien animados.

La mayor¨ªa de los decorados son tan impresionantes como el resto. Todos tienen un colorido que puede dejar pasmado al m¨¢s exigente. Y la mayor¨ªa de ellos tienen movimiento, lo que les da un aspecto muy vivo. Desde antorchas ardiendo, hasta la lluvia que cae cuando se empieza la partida; pasando por las hojas de los ¨¢rboles o el agua movi¨¦ndose. Sencillamente impresionante.

Para hablar del sonido, hay que empezar haci¨¦ndolo por el apartado musical. ?Y que melod¨ªas!, las mejores que se recuerdan, a la altura de los temas m¨¢s cl¨¢sicos de la historia del videojuego. Todas son melod¨ªas ambientadas en un universo de rol 100%, que ayudan aun m¨¢s a meterse dentro del juego.

Se puede decir que tienen una calidad sonora muy buena para lo que Game Boy Advance puede hacer en cuanto a m¨²sica, pero es que su composici¨®n es magistral, y todos los que ya las oyeran en su d¨ªa, quedar¨¢n embelesados al recordar aquellos tiempos. Sin embargo ser¨¢n los nuevos los que m¨¢s partido les saquen, disfrutando por primera vez de algunos de los temas m¨¢s deliciosos que hayan sonado en consola.

Los efectos de sonido, tambi¨¦n son muy buenos, pero hay que reconocer que no resultan tan impresionantes como las m¨²sicas. Los hay muy variados, desde el sonido de la lluvia, hasta los movimientos de Link, pasando por monstruos, explosiones, magias? la verdad es que hay de todo un poco, aunque suena un poco desfasado para hoy en d¨ªa.

Y por fin llegamos al mejor apartado de este Zelda. La diversi¨®n que se puede conseguir jugando a este brillante t¨ªtulo de rol no puede ser narrada con palabras; hay que jugarlo para entenderlo. Pero aun as¨ª vamos a intentar hacer un esfuerzo para que todos aquellos que nunca lo hayan probado tengan una idea.

Zelda es un juego de rol, concretamente un Action RPG. Esto quiere decir que durante toda la aventura solo se maneja a un personaje protagonista, en este caso Link. A pesar de que el juego es de rol, tambi¨¦n es de acci¨®n en tiempo real. A Link se le controla casi todo el rato como si se estuviera jugando a un juego de acci¨®n, pero con una historia y unos par¨¢metros de un juego de rol.

Los controles de Link son muy sencillos, para que resulte f¨¢cil de jugar. Con la cruceta se mueve a Link por la pantalla, hacia arriba, abajo, derecha, izquierda y por supuesto en diagonal. Luego con A se utilizan los objetos que se vayan encontrando y con B se usa el arma principal, que por lo general ser¨¢ una espada. Si se deja B pulsado un rato se carga el ataque especial, muy pr¨¢ctico cuando hay muchos enemigos cerca.

Con R se pueden coger cosas. Se pueden coger los setos si bloquean el paso o se pueden coger las vasijas para lanzarlas contra los enemigos. Tambi¨¦n se pueden coger estatuas para arrastrarlas y cambiarlas de sitio. Por ¨²ltimo, se pueden coger algunas palancas para activarlas y abrir puertas o similares.

Con L se puede acceder al pr¨¢ctico mapa que nos ayudar¨¢ a orientarnos. Al aire libre el mapa mostrar¨¢ el mundo y la posici¨®n de Link, pero cuando se est¨¢ en una mazmorra es cuando se vuelve m¨¢s ¨²til, ya que se?alar¨¢ las zonas visitadas, y nos ayudar¨¢ a no perdernos.

En Zelda se pueden encontrar dos tipos de juego que se van entremezclando todo el tiempo. Por un lado est¨¢ la aventura que Link ir¨¢ viviendo y que da sentido al juego. Cuando se narre algo, o sencillamente se acceda a una secuencia con texto, la acci¨®n se detendr¨¢, se abrir¨¢ un cuadro en la pantalla y se podr¨¢ leer tranquilamente lo que se vaya narrando.

Puede que la historia no sea el colmo de la originalidad, pues a fin de cuentas narra la t¨ªpica historia de la t¨ªpica princesa que es secuestrada por las t¨ªpicas fuerzas del mal. Pero claro, si s¨®lo tuviera elementos t¨ªpicos no ser¨ªa una historia tan grandiosa como es, y es que a medida que se va desvelando la trama, los detalles que van sucediendo es lo que la convierten en un aut¨¦ntico cuento de hadas.

La otra parte del juego es, como ya todo el mundo habr¨¢ imaginado, la de acci¨®n. El camino de Link para resolver la aventura no va a ser f¨¢cil, y va a estar plagado de enemigos. Algunos ser¨¢n los cl¨¢sicos lacayos que s¨®lo aparecen para estorbar y para morir, pero algunos de los enemigos finales ser¨¢n realmente complicados de eliminar.

Para combatir no s¨®lo habr¨¢ que ser h¨¢bil, tambi¨¦n habr¨¢ que usar las neuronas para descubrir sistemas de ataque y de defensa contra cada uno de los enemigos que haya que encarar. Por ejemplo, ser¨¢ muy ¨²til aprender a usar el escudo que Link lleva consigo para detener flechas u otros ataques similares.

Tambi¨¦n es imprescindible saber usar correctamente todos los objetos que Link vaya descubriendo en su aventura. Desde el garfio hasta el bumerang, todos ser¨¢n imprescindibles para ir avanzando por el mundo, y algunos incluso servir¨¢n para enfrentase a los enemigos de una manera m¨¢s eficaz.

Este nuevo modo de juego tiene la virtud de dotar a un juego de rol de la opci¨®n multijugador, pero tiene el inconveniente de que no puede ser jugado por un solo jugador. Eso s¨ª, de tener alg¨²n amigo que tambi¨¦n tenga el cartucho las partidas se pueden hacer muy divertidas.

Todos sabemos la pol¨ªtica que ha seguido Nintendo desde que sac¨® al mercado esta peque?a maravilla llamada Game Boy Advance. ?sta ha sido reeditar todos sus cl¨¢sicos de Super Nintendo para su nueva port¨¢til de 32 bits y as¨ª obtener claros beneficios a costa de productos antiguos. Muchos lo hemos agradecido al poder revivir los antiguos t¨ªtulos de la infancia, pero la mayor¨ªa le ha reprochado a Nintendo la falta de originalidad a la hora de programar nuevos productos.

Pero si alguna vez alg¨²n juego ha sido merecedor de ser reeditado, incluso al mismo precio que tuvo en su d¨ªa, ese juego es este Zelda: A Link to the Past. Lo tiene todo: algo viejo, algo nuevo, algo cl¨¢sico, algo innovador, es para nost¨¢lgicos, es para las nuevas generaciones?

Zelda es el juego perfecto para ser jugado en cualquier sitio, por cualquier clase de p¨²blico y con cualquier excusa. Tan s¨®lo el hecho de que el juego sea una reedici¨®n en vez de ser completamente nuevo le resta unas d¨¦cimas a la nota, pues a fin de cuentas el juego The Four Swords no se puede comparar con el modo principal, aunque sea un excelente complemento.

 l o  p e o r