Los integradores taiwaneses han puesto el grito en el cielo al desvelarse que la nueva gama de Intel tendr芍 un precio de salida de 229 d車lares para la versi車n con soporte para WiFi 802.11b y 244 para la que incluya soporte 802.11a. Esto har赤a que los ordenadores que lo incluyan fueran enfocados a un mercado corporativo y de altas prestaciones dejando atr芍s al mercado de consumo, que ha incrementado sus ventas hasta un 17%, con el consiguiente perjuicio que ello ocasionar赤a a las marcas.
Las m芍s que probables causas las podemos buscar en la brutal competencia de los fabricantes de dispositivos WiFi y en el inter谷s de la propia Intel en mejorar sus m芍rgenes. El fabricante californiano ha tenido que recurrir a fabricantes taiwaneses como D-Link, Gemtek e incluso Asus para poder lanzar el kit que complementa a su procesador para a?adir todas las funciones inal芍mbricas, dado que los principales fabricantes occidentales como Broadcom o Intersil se han posicionado frente a Intel en numerosas ocasiones, lo que ha provocado un aumento de los costes.
Adem芍s Intel busca mejorar sus m芍rgenes de venta haciendo que el nuevo procesador tenga un fuerte precio de salida en el mercado que lo posicione en la gama m芍s alta de producto para con el tiempo ir filtr芍ndolo a los equipos m芍s caros del segmento de consumo, con lo que tendr赤an durante bastante tiempo una buena fuente de ingresos. No obstante, ateni谷ndonos a las especificaciones del procesador descubrimos un enfoque principalmente profesional o dirigido a consumidores que busquen m芍s duraci車n en las bater赤as que altas prestaciones.