Revive la magia de la saga

Robotech es una saga de culto en U.S.A, pero ha sido mucho tiempo desde que saliera un t¨ªtulo basado en la serie, por lo que las expectativas e ilusiones han sido altas sobre este t¨ªtulo. Descubre hasta donde llega la realidad.

Robotech es sin duda una de las sagas anime con m¨¢s renombre en Occidente. Bueno, m¨¢s bien habr¨ªa que decir en USA, que es donde se puede encontrar la mayor parte de los fans occidentales a esta serie, ya que una de las principales series que abri¨® el Manga/Anime dentro de Estados Unidos. Es por ello por lo que la nostalgia juega un papel fundamental en la visi¨®n que muchos colegas estadounidenses han puesto en los an¨¢lisis del juego (por eso se pueden ver muchos textos comenzando "me acuerdo cuando era joven y llegaba corriendo de la escuela para ver mi serie preferida...".

?Significa esto que el juego est¨¢ inflado?. No, no necesariamente, el juego est¨¢ realmente bien hecho, pero es como esperar que aqu¨ª en Espa?a se juzgue un t¨ªtulo de Dragon Ball igual que lo juzgan en USA, como claramente se ha podido ver en los batacazos que se est¨¢ llevando Budokai all¨¢. Perdido el factor nostalgia, los defectos de Robotech: Battlecry son m¨¢s evidentes, aunque no hay que dejarse enga?ar, como shooter espacial es un t¨ªtulo muy a tener en cuenta (especialmente viendo los pocos que hay ahora mismo).

La historia sit¨²a al jugador a los mandos de de Jack Arter, disc¨ªpulo de Roy Fokker y cuenta su historia a trav¨¦s de la saga Macross. Para aquellos que ya la hayan disfrutado, decir que a¨²n as¨ª el juego merece la pena, porque a?ade muchos toques de cosecha propia y cambios con respecto al gui¨®n original, aparte de llenar algunos huecos. Pero la historia no est¨¢ tan cargada como en el anime ni de lejos de todas fromas, lo que prima es la acci¨®n, y la historia hace de comparsa de esta, animando al jugador a seguir adelante, omitiendo la mayor parte de lo que concierne a relaciones interpersonales entre los protagonistas y dejando solo lo m¨¢s general.

Por si alguien no conoce el argumento de Robotech, valga decir que es una serie de Mechas, con cierto tiempo que tiene como protagonista la supervivencia de la humanidad frente a una raza extraterreste llamada Zentraedi, usando para ello unas m¨¢quinas de guerra basada en tecnolog¨ªa de los propios Zentraedi, llamados Veritech. Estas m¨¢quinas tienen la habilidad de transformarse en tres tipos diferentes de veh¨ªculos, cada uno habituado a una diferente situaci¨®n de combate. Como pasa casi siempre en el anime, esto es mucho m¨¢s de lo que aparenta y hay temas m¨¢s complejos dentro de la aparente simplicidad del argumento. Solo decir que la del juego es una buena historia, tanto para los conocedores del mundo de Robotech como para cualquier otro.

Los Veritech tienen un gran aspecto, especialmente el tuyo, sobre que el que la c¨¢mara enfoca. Las transiciones entre las tres transformaciones son realmente suaves y muy logradas, adem¨¢s de que los efectos de luces sobre el personaje est¨¢n tambi¨¦n bien recreados se echa en falta ago m¨¢s de incidendia de la luz sobre otros componentes del escenario, pero se entiende que ya se ha hecho un trabajo intenso como para pedir virguer¨ªas encima.

Impresiona bastante el numero de objetos que se mueven por pantalla y el sentido art¨ªstico que se han puesto en estos, tomados a partir de los originales y recreados con maestr¨ªa. Hay momentos en verdad ca¨®ticos, con decenas de enemigos a la vez, naves enormes movi¨¦ndose en el horizonte y la pantalla absolutamente saturada de disparos, m¨ªsiles, l¨¢sers y explosiones, todo con un frame rate que a veces se queja un poco, pero que cumple bastante bien en todos los sistemas.

Sin duda, uno de los efectos m¨¢s interesantes es el de los m¨ªsiles, que merecen menci¨®n aparte. No es que sea un efecto embriagador, pero hay algo misteriosamente bello en como esas hileras de humo parten del Veritech a la caza y captura del enemigo, dejando su mortal estela en su camino. Teniendo en cuenta que esto tambi¨¦n es algo que hace el enemigo, el ver la pantalla salpicado con este efecto esn su mayor¨ªa de las veces agradable.

Como punto negativo se podr¨ªa rese?ar alguna decisiones un tanto discutibles. Por ejemplo, en los entornos urbanos se hace complicado entender la existencia de barreras invisibles a modo de techo. Pedir un mundo ilimitado por fronteras invisibles parece poco razonable, pero ya va siendo hora de que se empiece a utilizar la nueva tecnolog¨ªa para algo m¨¢s que poner m¨¢s pol¨ªgonos y m¨¢s texturas. Sin querer llegar tan lejos como eso, este redactor se hubiera sentido contento si se hubiera podido sobrevolar todos los edificios, y no solo algunos m¨¢s bajos que otros. Tampoco quedan muy bien las fases a¨¦reas o espaciales, en donde una esfera invisible limita el campo de acci¨®n, pero eso es poco menos que inevitable (aunque hubiera quedado mejor algo menos evidente, como un mensaje desde la base de operaciones preguntando adonde demonios vas y obligandote a dar la vuelta).

De todos modos, ese detalle no desmerece para nada el gran trabajo alcanzado por Vicious Cycle a nivel visual. Mucho m¨¢s problem¨¢tico resultan los problemas de c¨¢maras que a veces ocurren, lo que hace que en algunos momentos puntuales se pierda una perspectiva c¨®moda de la acci¨®n, pudiendo desembocar en desastre. Es comprensible, pero no por ello deja de ser un defecto a tener en cuenta.

Para empezar, decir que las transformaciones no son para que quede bonito, sino que resultan absolutamente vitales para el desarrollo de las misiones y aprender a utilizarlas en su momento oportuno es algo que cuesta sangre, sudor y lagrimas. Cada uno de los modos tiene sus propias peculiaridades en cuanto a velocidad, maniobrabilidad y potencia de fuego, teniendo que alternar en todo momento para sacarle provecho. En este momento hay que resaltar que los controles son francamente buenos, aunque no es nada aconsejable utilizar el mando standard de Xbox, resulta tremendamente cansado, mejor utilizar el S-Controller.

Pero a¨²n controlando bien este factor, muchas misiones son de una complejidad muy alta, incluso en modo normal, Con decenas de enemigos acosandote a la vez, con factores muy justos de tiempo en algunas ocasiones y con tareas defensivas de objetivos que a veces se hacen realmente duras de cumplir. Es un juego muy largo (con m¨¢s de 40 misiones, una cifra impresionante), que uno disfrutar¨¢ si le gustan los juegos que ofrezcan un verdadero reto. A¨²n as¨ª, es criticable la extra?a curva de dificultad que sigue, pues uno se puede encontar resolvidendo una misi¨®n sencilla para luego toparse con una realmente dif¨ªcil de acometer. No es un juego para los amantes de las cosas ligeras.

La principal cr¨ªtica que se le puede dar a Battlecry en jugabilidad es que resulta un tanto mon¨®tono. Al ser tan largo es normal que esto suceda, pero es que se acent¨²a demasiado teniendo en cuenta que solo parece haber tres tipos de misiones: Destruir, Rescatar y Escoltar. De una u otra froma, esa es la base sobre la que discurre todo el juego, lo que hace que a uno le puede llegar a resultar muy cansado continuar. Hubiera estado muy bien que se le a?adiera algo m¨¢s de variedad al tema.

En cuanto al modo Multiplayer, mejor no nombrarlo. Est¨¢ oculto, pero una vez que se libera no ofrece nada interesante ya que la pantalla partida no funciona bien con lo ca¨®tico que resulta la acci¨®n, adem¨¢s de repercutir en el framerate, que se hace m¨¢s inestable.

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