!Mira, Dami¨¢n, un jueg¨®n!

El baloncesto de m¨¢s alto nivel se adue?a de las Xbox en un t¨ªtulo muy esperado por todos los fans del deporte de la canasta. NBA Inside Drive 2003 ya est¨¢ aqu¨ª y llega dispuesto a volver a convertirse en el referente del b¨¢sket en la 128 bits de Microsoft.

Por fortuna, parece que los principales fabricantes de videojuegos se han dado cuenta que en nuestro pa¨ªs el baloncesto tambi¨¦n tiene tir¨®n, quiz¨¢ no tanto como el f¨²tbol, pero lo suficiente como para compensar el lanzamiento del mayor n¨²mero de t¨ªtulos del deporte de la canasta posible. Los amantes del baloncesto poseedores de una Xbox est¨¢n de enhorabuena. Esta temporada hasta dos juegos inspirados en la NBA han salido al mercado casi simultaneamente. Vale, a vuestros bolsillos no les har¨¢ demasiada gracia, pero peor ser¨ªa que no hubiera ning¨²n juego disponible ?Verdad?

El t¨ªtulo que nos ocupa, NBA Inside Drive 2003, es obra de la propia Microsoft. Uno de sus sellos, Microsoft Game Studios, ya nos ofreci¨® el a?o pasado la precuela de este juego y ciertamente dej¨® un buen sabor de boca entre todos los aficionados al g¨¦nero. Su car¨¢cter m¨¢s cercano a la simulaci¨®n que a un arcade convencional cal¨® hondo entre ellos e hizo que muchos vieran a NBA Inside Drive como una serie a tener muy en cuenta de cara al futuro.

Es por ello que el juego que nos ocupa ven¨ªa precedido por una expectaci¨®n mucho mayor que su predecesor. Las buenas maneras que NBA Inside Drive 2002 mostr¨® hicieron que muchos se preguntaran qu¨¦ pasar¨ªa si sus limitaciones, sobre todo las relacionadas con la ambientaci¨®n y el apartado gr¨¢fico, fueran superadas. ?Era pedir demasiado?

Sin ralentizaciones ni excesivos problemas de clipping, lo cierto es que en la edici¨®n del a?o pasado el apartado visual, aunque no era en absoluto uno de los mayores aciertos del juego de los de Microsoft Game Studios, s¨ª que se pod¨ªa decir, al igual que ahora, que cumpl¨ªa con su cometido. El problema radica en que los jugadores de consola siempre exigen, y con derecho, una progresi¨®n de los nuevos t¨ªtulos que vayan apareciendo, tanto a nivel jugable, cuando ¨¦sta se tercie, como a nivel t¨¦cnico, siempre.  Y la susodicha progresi¨®n t¨¦cnica aqu¨ª no se ha producido. Tir¨®n de orejas a los de Seattle.

La realidad muchas veces nos hace bajar de la nube y, como en este t¨ªtulo, nos encontramos con que mejorar el apartado visual no ha sido una de las prioridades del equipo de desarrollo de NBA Inside Drive 2003. En cualquier caso, los que ya estuvieran satisfechos con lo visto en la primera entrega, suponemos que no se sentir¨¢n decepcionados. O por lo menos no en exceso.

Como en la realidad, a primera fila de pista se encontrar¨¢n situados los banquillos de los equipos que se est¨¦n enfrentando. Sentados en las sillas podremos distinguir perfectamente los jugadores de los combinados que no est¨¦n participando en la acci¨®n en ese momento, aunque a diferencia de NBA Live 2003 los reservas no dejar¨¢n exteriorizar sus emociones cuando alg¨²n hecho trascendente ocurra durante los envites. Tampoco busqu¨¦is con la mirada a las Cheerleaders debajo de las canastas ni en la misma pista durante el descanso y los tiempos muertos. Un elemento importante de la fiesta del baloncesto que aqu¨ª no aparece por ning¨²n lado por haber considerado sus responsables que su presencia era innecesaria. Una l¨¢stima.

Dichas canastas suelen venir acompa?adas por su correspondiente repetici¨®n autom¨¢tica, la cu¨¢l nos mostrar¨¢ desde el punto de vista m¨¢s apropiado para la ocasi¨®n la ejecuci¨®n de la ¨²ltima jugada. Los primeros planos no conseguir¨¢n poner en evidencia el eficaz modelado de los deportistas, aunque s¨ª que nos toparmos frontalmente con la mediocridad con la que tanto el p¨²blico como los medios de comunicaci¨®n han sido representados.

En cuanto al dise?o de los baloncestistas, lo mejor sin duda son las texturas faciales mediante las cuales se han representado los rostros de las principales figuras de la NBA. El parecido f¨ªsico de los jugadores con respecto a sus hom¨®nimos reales es, cuanto menos, razonable. La altura de los deportistas tambi¨¦n est¨¢ ajustada para dejar latentes las diferencias de tama?o de unos y otros, pero en cambio aspectos menos obvios como el peso o la velocidad no han corrido la misma suerte y han sido implementados algo a la ligera.

Los modos de juego presentes son variados y permiten la celebraci¨®n de casi cualquier acontecimiento que sirva de excusa para lanzar unas canastas, aunque no hay ninguno original. Ve¨¢moslos todos:

Muchos estar¨¦is pensando en uno de los ¨²ltimos juegos que han aparecido para Xbox, como es el reciente NBA Live 2003. A nivel jugable, las diferencias son bastante obvias. El t¨ªtulo de Electronic Arts apuesta claramente por el espect¨¢culo, por el Showtime, con ataques muy vistosos y con un sistema defensivo casi inexistente en muchos sentidos y extremadamente desproporcionado en otros. Por ejemplo, en el juego de EA Sports nunca ha sido tan f¨¢cil realizar tapones, ni tan siquiera en los NBA Jam. Interceptar pases es tambi¨¦n harto sencillo, pero detener el avance de un inspirado jug¨®n es casi imposible.

En cambio, la producci¨®n de Microsoft Game Studios presenta un gameplay mucho m¨¢s simulador que impide, por ejemplo, que nos metamos de continuo hasta la cocina o que le amarguemos la noche a ese tirador de triples sobre el que mantenemos pegado a nuestro jugador m¨¢s adelantado. Hay detalles muy realistas, como que el base se quede esperando cuando haya un saque  para recibir el bal¨®n y conducirlo a la canasta contraria. Y cuando no disponga de la posesi¨®n de la pelota,  alzar¨¢ los brazos solicitando el esf¨¦rico si no hacemos caso al orden natural del juego.

En los partidos los logros de nuestros jugadores se ir¨¢n recogiendo mediante mensajes informativos en pantalla. As¨ª, cuando un deportista consiga anotar por primera vez 30 puntos, o recoger 10 rebotes, por ejemplo, una mensaje precedido por una divertida sinton¨ªa nos pondr¨¢ sobre aviso del ¨¦xito personal de nuestro jugador.  Las dobles figuras, MVPs y dem¨¢s reconocimientos tambi¨¦n se har¨¢n saber tanto por locuci¨®n como por nota visual.

Adem¨¢s, en la base de datos que trae de serie NBA Inside Drive 2003 se contemplan los r¨¦cords mundiales, por lo que si conseguimos superar alguno de ellos se nos informar¨¢ al momento. En cualquier caso, conseguir batir uno de los citados r¨¦cords ser¨¢ una empresa harto dif¨ªcil, aunque sumamente satisfactoria en el caso de que consigamos llevarla a buen puerto. Todos los logros se guardar¨¢n en memoria, y una vez finalizado el partido correspondiente podremos consultar los ¨¦xitos alcanzados.

Cuando un jugador est¨¦ en racha la base que aparece debajo de sus pies se tornar¨¢ parpadeante. ?sto ser¨¢ indicativo de que ese personaje ha conseguido convertir una serie determinada de lanzamientos y que, hasta que el equipo rival iguale o supere la racha o ¨¦l mismo empiece a errar sus tiros, su porcentaje de aciertos ser¨¢ superior al normal.

Hay tres niveles de dificultad: Rookie, Veteran y All-Star. Las diferencias entre ellos son abismales,  y mientras que en nivel principiante nos saldr¨¢ casi todo y perderemos muy pocas veces la posesi¨®n de la pelota por nuestros errores, en Veteran y All-Star clavar una serie de triples o humillar a la defensa rival no ser¨¢ en absoluto nada f¨¢cil, aunque tampoco imposible. La diferencia, como en todo, radicar¨¢ en las horas que llevemos de experiencia a nuestras espaldas y de lo claras que tengamos las ideas. A practicar toca.

NBA Inside Drive 2003 es un t¨ªtulo muy divertido de jugar. A diferencia de otros juegos deportivos, ofrece una experiencia monojugador capaz de enganchar al m¨¢s pintado gracias a sus m¨²ltiples posibilidades. Eso s¨ª, cuando varias personas participan en la acci¨®n -hasta cuatro pueden hacerlo- es cuando la obra de Microsoft Game Studios alcanza su m¨¢ximo esplendor. As¨ª que ya sab¨¦is, jugu¨¦is solos o en grupo, si sois amantes del baloncesto y ten¨¦is una Xbox no hay excusa para no echarse unas partidas a la edici¨®n de este a?o de NBA Inside Drive. Avisados est¨¢is.

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La alternativa a este NBA Inside Drive 2003 tiene nombre propio: NBA Live 2003. Ambos juegos tratan el mismo deporte, el baloncesto, ofrecen un apartado t¨¦cnico de excepci¨®n y tienen las plantillas actualizadas, pero ah¨ª se acaban las semejanzas. A la hora de jugar, que es lo que verdaderamente importa, las diferencias entre los ¨²ltimos cap¨ªtulos de ambas series se hacen evidentes, tanto, que a poco que teng¨¢is definidos vuestros gustos a la hora de jugar al baloncesto en una consola no os costar¨¢ demasiado decidiros por uno de los dos.

Por eso os recomendamos que antes de compraros uno u otro, prob¨¦is ambos y decid¨¢is qu¨¦ estilo os gusta m¨¢s. Si el fren¨¦tico y espectacular implementado por los de Electronic Arts en su NBA Live 2003 o el pseudo simulador de Microsoft Game Studios titulado NBA Inside Drive 2003. Con cualquiera de los dos acertar¨¦is, porque la calidad de los juegos est¨¢ fuera de toda duda.

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