Doshin the Giant
Todo un "God Game" para consola
De forma sorprendente, llega desde Jap¨®n un original t¨ªtulo en el que har¨¢s el papel de un gigante, pudiendo satisfacer los deseos de los habitantes de una lejana isla o destruirlos usando el gran poder que tienes, todo depender¨¢ de tu propia voluntad.
De forma sorprendente, llega desde Jap¨®n un original t¨ªtulo en el que har¨¢s el papel de un gigante, pudiendo satisfacer los deseos de unos habitantes de una lejana isla o destruirlos usando el gran poder que tienes, todo depender¨¢ de tu propia voluntad.
Los m¨¢s enterados, o los m¨¢s aficionados al mundo Nintendo, recordar¨¢n sin duda el DD64, el add-on para Nintendo 64 que iba a solucionar todos sus problemas de almacenamiento y hacer que la consola alcanzase todo su potencial. Desgraciadamente, su lanzamiento sufri¨® un gran retraso (al igual que todo lo referente en N64, en donde Nintendo estuvo poco acertada en dar calendarios) y para cuando sali¨® ya no pudo solucionar nada, y contaba con apoyos muy reducidos, lo que llev¨® al fracaso el proyecto, con solo unos cuantos juegos en su haber.
Entre esos juegos se pod¨ªan encontrar joyas como Animal Forest (en U.S.A Animal Crossing), o uno de los primer¨ªsimos proyectos de DD64, en donde se mostraba a un gigante amarillo con nulos rasgos y de dise?o simp¨¢tico y simple. Ese juego era Doshin The Giant (bueno, exactamente es Kyojin No Doshin), o "como hacer un God Game para consolas". El juego promet¨ªa bastante y la verdad es que la versi¨®n original no era para nada un mal t¨ªtulo, quiz¨¢s con algunas carencias t¨¦cnicas, pero con una idea muy clara de como adaptar un g¨¦nero propio de ordenadores a una consola.
Con la llegada de GC, Nintendo adopt¨® la pol¨ªtica de aprovechar el trabajo ya realizado en DD64 y adaptarlo al nuevo sistema, todo un acierto si se tiene en cuenta la originalidad que esos t¨ªtulos ten¨ªan y as¨ª fue como Doshin lleg¨® a las tiendas niponas, alcanzando un resultado discreto, pero no malo. De forma totalmente sorprendente, Nintendo decidi¨® posteriormente que tanto Doshin como Animal Forest hicieran la aventura Occidental, aunque cada uno por su lado, el primero a Europa y el segundo a U.S.A (aunque se espera encarecidamente que tambi¨¦n venga este a al viejo continente). Y as¨ª es como un mercado como el espa?ol, plagado de juegos cl¨®nicos y g¨¦neros chupados hasta la saciedad, ha acabado con uno de esos t¨ªtulos al que se puede acusar de "original".
El argumento de Doshin es extremadamente simple, y cuenta la historia de una isla tropical llamada Garuda en cuyas creencias est¨¢ la figura de un "gran hombre", que al amanecer saldr¨ªa de las aguas y llegar¨ªa all¨ª. Lo que hasta entonces era una leyenda popular, se hace realidad cuando un gigante amarillo y con cara de pan sale de las aguas en plan "Godzilla" para asombro de los aldeanos. Una vez sucedida la escena de introducci¨®n, la voz de Sadoru, un ancestro de la isla, ir¨¢ guiando al jugador a trav¨¦s de las posibilidades que hay de cara a manejar al gigante.
Aunque parezca que el concepto parece similar a Black & White, la verdad es que ambos juegos son de car¨¢cter bien distinto. Incluso este ¨²ltimo est¨¢ tomando ideas de Doshin para ser llevado a las consolas, ya que su actual concepci¨®n en PC es demasiado compleja. Aqu¨ª solo se controla al Gigante directamente con el pad, por lo que sus acciones, buenas o malas vendr¨¢n dadas exclusivamente por tu voluntad.
El concepto de "el bien y el mal" que hab¨ªa en Black & White se puede encontrar aqu¨ª, aunque de forma menos sutil. En el juego de Molyneux, las acciones de la criatura marcaban su personalidad y aspecto, mientras que en Doshin, todo est¨¢ bajo el control del jugador, que con un simple bot¨®n, puede pasar del afable Doshin, al maligno Jashin. Mientras uno tiene acciones destinadas a ayudar a la gente, el otro es un demonio rojo cuyas acciones est¨¢n orientadas a la destrucci¨®n (aunque esas mismas acciones se pueden usar para buenas causas).
A partir de ah¨ª, la mec¨¢nica del juego se basa en hacer lo que a uno le apetezca. Puedes ayudar a los nativos a desarrollarse, destruirlos, sentarse y ver el paisaje, construir nuevas islas, crear monta?as, lagos y r¨ªos, detener fen¨®menos naturales como volcanes o tornados, sacad fotos y toda una variedad de acciones. El juego se desarrolla a lo largo de 50 d¨ªas, cada uno de media hora de duraci¨®n, por lo que el juego ofrece unas invariables 25 horas de duraci¨®n, aunque dada la libertad que ofrece, una partida no tiene nada que ver con la otra (incluso cuando ya se tiene todo hecho, la est¨¦tica y la ambientaci¨®n del juego invitan a pasearse por ¨¦l, disfrutando del paisaje y de la calma que desprende).
Solo hay unas peque?as normas que hay que tener en cuenta. El gigante crece en medida del amor u odio que le dispensen los nativos, cosa que viene dada por las acciones. Si como Doshin se ayuda a la gente, esta dar¨¢ corazones, mientras que la transformaci¨®n en Jashin provocar¨¢ miedo en los aldeanos, y m¨¢s si te da por empezar a lanzar bolas de fuego y aplastar gente, lo que te proporcionar¨¢ calaveras. Completar un c¨ªrculo de lo uno o lo otro provoca el crecimiento de la criatura, que puede alcanzar alturas cicl¨®peas, con el aumento consiguiente de su fuerza y velocidad (aunque con el riesgo de que, al ser tan grande, se pise accidentalmente a los aldeanos con el comprensible enfado de estos).
Adem¨¢s, cada d¨ªa el gigante vuelve a su estado inicial, independientemente de lo que se haya hecho el d¨ªa anterior. Por ¨²ltimo, dentro del terreno donde se est¨¢, hay total libertad, pudiendo levantar la tierra en el mar para construir islas o hundir el terreno para hacer agua, pero no se puede salir de los l¨ªmites marcados (bueno, poder, se puede, pero de ti no lo har¨ªa a menos que quieras terminar la partida de manera dram¨¢tica).
Gr¨¢ficos
| Doshin The Giant |
El dise?o del juego est¨¢ bastante conseguido, y a pesar de la simpleza aparente que hay en Doshin y los habitantes, el juego tiene una est¨¦tica muy agradable, a lo que ayuda lo bien recreado que est¨¢ el entorno tropical. A pesar de no ser una maravilla gr¨¢fica, tiene cosas bastante sorprendentes y bien realizadas, como la deformaci¨®n 3D que se le puede aplicar a cualquier rinc¨®n de la isla. El trabajo con las texturas y objetos de la isla es muy competente y agradar¨¢ a todo el mundo, al igual que el agua, que presenta un aspecto bastante realista (aunque solo en apariencia, su comportamiento f¨ªsico est¨¢ lejos del que se puede ver en Mario Sunshine, pero tampoco es malo).
Tambi¨¦n los efectos merecen menci¨®n, pues los hay y variados, destacando las bolas de fuego de Jashin, o los tornados y volcanes que se producen de vez en cuando.
Como a?adidos a la versi¨®n de DD64 se le han puesto un par de bonitos detalles, como los p¨¢jaros que vuelan por toda la isla (y a los que incluso se puede ver lanzarse en picado al agua para coger peces), o los peces, que no es que est¨¦n muy conseguidos, pero quedan bien. Adem¨¢s se ha conseguido un framerate bastante m¨¢s estable, hasta el punto de que es casi perfecto, aunque para ello se haya usado un "escalado" que transforma a los aldeanos en pixeles cuando se aleja la c¨¢mara, un peque?o truco que resulta apenas perceptible y que en cambio ayuda mucho a la fluidez del t¨ªtulo.
Tambi¨¦n tiene algunos defectos, pero que son bastante pasables, como un ligero popping en algunas ocasiones, pero nada remarcable.
Sonido
Doshin The Giant no destaca especialmente por su m¨²sica. Esta solo suena cuando se pisa algunas de las aldeas, en donde un ritmo con muchas percusiones y sabor hawaiano recibir¨¢ a su gigantesco visitante. El efecto de distancia a medida que el gigante se acerca o se aleja est¨¢ bastante bien, y destaca el efecto que se produce cuando la c¨¢mara se mete por debajo de agua, en donde se oir¨¢ como si realmente se estuviera ah¨ª.
En cuanto a los efectos, no hay excesivos y los que hay est¨¢n bien. A destacar la traducci¨®n y doblaje, no por su calidad (que no est¨¢ mal, y aunque la voz del narrador suene un poco rara, se adapta a la perfecci¨®n al ritmo tranquilo que impera en Doshin), sino por el hecho de que un juego como este, que viene aqu¨ª como una cosa casi experimental, sea doblado y traducido, cuando otros juegos con m¨¢s renombre ni siquiera son capaces de presentar una traducci¨®n de texto.
Jugabilidad
Doshin The Giant es un juego bastante calmado en general, excepto en los momentos que se produce alguna cat¨¢strofe, en donde habr¨¢ que ser r¨¢pido para poder ayudar. Es un t¨ªtulo para echarle horas y paciencia, pero muy agradecido porque sus detalles hacen que se sigan teniendo ganas de jugar siempre.
A eso ayuda lo bien montado que est¨¢ todo el aspecto de la jugabilidad, el control es fant¨¢stico, tanto para Doshin como para Jashin, muy claro y sencillo, lo que ayuda a que en enseguida el jugador se pueda poner a experimentar cosas con el personaje.
Los aldeanos reclaman la atenci¨®n del gigante mediante unos iconos tambi¨¦n muy claros y concisos, que no dan lugar a dudas sobre lo que quieren. Satisfacer sus demandas es la manera de conseguir corazones, aunque si no trabajan, puede que lleguen a ser tan vagos que ni te construyan monumentos, buen momento para cambiar a Jashin y dar una lecci¨®n a tan desagradecidas gentes.
La capacidad para experimentar cosas es uno de los fuertes de este t¨ªtulo, lo que llevar¨¢ a descubrir todo tipo de cosas interesantes, como que se pueden coger aldeanos de diferentes pueblos y "cruzarlos" para conseguir nuevos pueblos. Los pueblos iniciales son 4, y cada uno tiene su personalidad, sus monumentos... Los monumentos son una parte importante del juego y var¨ªan dependiendo de los pueblos (o el cruce de estos), o del cari?o o miedo que te tengan los aldeanos.
El sistema de c¨¢maras es tambi¨¦n muy bueno, permitiendo alejar, alejar y girar la c¨¢mara sin problemas, pudiendo abarcar mucho territorio de una forma intuitiva y sin ninguna dificultad.
Como punto negativo se podr¨ªa decir que Doshin es muy lento, que lo es. Pero esto se soluciona, por un lado creciendo, lo que permitir¨¢ dar pasos m¨¢s largos, y por otro lado, transform¨¢ndose en Jashin, cuyo salto abarca una gran distancia y permite plantarse en cualquier sitio en dos o tres botes. Tambi¨¦n se podr¨ªa comentar algunos fallos de I.A de los aldeanos, especialmente a la hora de nivelar los terrenos, pero dado el car¨¢cter abierto que impera en Doshin, esto no es ning¨²n problema, ya que se puede pasar de ellos e ir a otras cosas (o incluso destruir sus tierras en ese lugar para obligarles a coger otro sitio m¨¢s llano). Algunas veces llegan a pedir que se baje el terreno cerca de sus propias casas, lo que las destruyen (y luego los muy pu?eteros se enfadan por haber hecho lo que ellos ped¨ªan), claro que si no se quiere eso, solo hay que coger la casa y llev¨¢rsela a otra parte.
Bueno
Cumple con las expectativas de lo que es un buen juego, tiene calidad y no presenta fallos graves, aunque le faltan elementos que podr¨ªan haberlo llevado a cotas m¨¢s altas. C¨®mpralo sin miedo.