Dance Dance Revolution Max 6th Mix (PlayStation 2)

Cuando todos cre¨ªamos que la nueva entrega de la serie Dance Dance Revolution iba a ser m¨¢s de lo mismo, van los se?ores de Konami y le dan un lavado de cara tan radical a la serie que no se ha salvado ni el apuntador. ?Ser¨¢ este el Mix definitivo que devolver¨¢ a la saga a lo m¨¢s alto?

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Al igual que muchos otros juegos del g¨¦nero, la mec¨¢nica de DDR se reduce a ir pulsando el bot¨®n correcto -las flechas direccionales para ser exactos- en el momento preciso. Hasta aqu¨ª todo parece normal, pero la originalidad llega cuando nos encontramos con que los botones est¨¢n en el suelo y tenemos que marcarnos un bailoteo para ir puls¨¢ndolos con los pies. Curioso, ?verdad? Pues este sencillo planteamiento le ha servido a este simulador de baile para que muchos lo consideren como el videojuego m¨¢s novedoso de todos los tiempos.

Pero el tiempo no perdona a nadie, y pasando ol¨ªmpicamente de eso de "renovarse o morir", la compa?¨ªa nipona ha preferido mantener la saga tan fiel a sus or¨ªgenes que podr¨ªamos considerar las ¨²ltimas entregas como meros discos de expansi¨®n, ya que desde el Third Mix apenas ha habido cambios en el sistema de juego. Y claro, con tan pocas novedades es normal que los jugadores empiecen a buscar nuevas fuentes de diversi¨®n en otros t¨ªtulos...

Por fortuna, en Konami se han dado cuenta de que las cosas no van bien y se han puesto manos a la obra con el nuevo Mix de la serie, que viene tan cargado de novedades que lo ¨²nico que seguir¨¢ igual que antes ser¨¢ el sistema de juego. O quiz¨¢s no...

Pero sin duda, la gran novedad de esta entrega viene de la mano de la complet¨ªsima pantalla de opciones a la que podremos acceder antes de cada canci¨®n. Gracias a ella tendremos a nuestra disposici¨®n un impresionante repertorio de opciones con el que podremos hacer pr¨¢cticamente de todo para modificar el sistema de juego a nuestro antojo.

Para empezar, se acab¨® eso de ir al ritmo de la m¨²sica, ya que no s¨®lo podremos aumentar hasta ocho veces la velocidad del juego, sino que tambi¨¦n podremos activar el Boost Mode, en el que las flechas se pondr¨¢n a dar acelerones y frenadas sin previo aviso. Como pod¨¦is ver, las ca¨ªdas est¨¢n aseguradas en esta entrega...

Tambi¨¦n podremos activar la que para muchos es la mejor novedad del juego: las Freeze Arrows. Si activamos esta opci¨®n, durante las canciones aparecer¨¢n unas flechas con una larga estela tras de si, y para hacer bien el paso deberemos quedarnos sobre esa direcci¨®n hasta que se acabe la estela -de ah¨ª lo de Freeze-. Pero ojo, que el hecho de que haya una o dos de estas flechas en pantalla no quiere decir que no tengamos que seguir pulsando otras direcciones...

Otro de los grandes cambios que experimentar¨¢ la saga con este DDRMAX es el nuevo m¨¦todo para medir la dificultad de las canciones. Ahora, en lugar tener cl¨¢sico Feet Meter contaremos con el nuevo Groove Gauge, gracias al cual podremos hacernos una idea bastante aproximada de lo que nos depara cada canci¨®n. En ¨¦l aparecer¨¢n cuatro par¨¢metros que indican otros tantos tipos de baile diferentes, que a saber son Stream -flechas a diestro y siniestro-, Chaos -pausas y cambios de ritmo-, Air -saltos a mansalva- y Freeze -pisadas laaaaaargas-. Existe tambi¨¦n un quinto par¨¢metro llamado Voltage que no se refiere a ning¨²n estilo, sino que hace un balance total de la dificultad de los temas.

Algunos otros cambios menores que no afectar¨¢n a la jugabilidad ser¨¢n la posibilidad de hacer que las flechas se desplacen hacia la parte inferior de la pantalla, la inclusi¨®n de una ruleta con la que elegir las canciones a voleo, la disposici¨®n de ¨¦stas por orden alfab¨¦tico o el renombramiento de los tres modos de dificultad, que ahora se llaman Light, Standard y Heavy.

Como veis, los chicos de Konami no han escatimado en esfuerzos para que esta nueva entrega resulte lo m¨¢s novedosa posible. Pero a¨²n con todas estas mejoras, ?qu¨¦ ser¨ªa de un juego musical si no tuviese una buena banda sonora?

Pero para que olvidemos esta peque?a tragedia, la compa?¨ªa nipona ha echado mano de estrellas del pop japon¨¦s de la talla de Hitomi e incluso de las mism¨ªsimas Judy & Mary, que han contribuido a la causa con su famoso Sobakasu -el conocido opening de la serie Rurouni Kenshin-. El resto de la banda sonora estar¨¢ formado por canciones de grupos no tan famosos, aunque no por ello sus temas son peores. Tambi¨¦n habr¨¢ un pu?ado de temas originales de Konami, que sin duda aportar¨¢n m¨¢s variedad al juego con curiosos estilos como los de Groove y Exotic Ethnic.

Los amantes de los buenos retos pueden estar tranquilos, ya que el juego incluir¨¢ un par de temas secretos en los que tendremos que demostrar que somos unos expertos en la pista de baile, ya que no s¨®lo tendremos que hacer frente a un ritmo fren¨¦tico, sino que tendremos que jugar con las flechas desplaz¨¢ndose hacia abajo, con una velocidad m¨¢s r¨¢pida de lo normal y con una barra de Groove que no s¨®lo se vac¨ªa. Vamos, casi nada...

Ah, y si pensabais que las novedades sonoras s¨®lo iban a consistir en nuevos grupos y canciones est¨¢is muy equivocados, porque despu¨¦s de siete entregas los se?ores de Konami han decidido jubilar al antiguo presentador -el t¨ªo que animaba la cosa durante las canciones- y han contratado uno nuevo que, por su forma de hablar, parece haber salido de alg¨²n grupo de rock brit¨¢nico. Lo dicho, que no se ha salvado ni el apuntador.