Beam Breakers (PC)
En el t¨ªtulo de Fishtank pilotamos veh¨ªculos futuristas dotados de dispositivos antigravedad entre los rascacielos de la ciudad de Neo York. Si quieres saber m¨¢s no te pierdas su avance.
2.374 D.C. Neo York, USA Bienvenido a la nueva gran manzana. As¨ª reza el comienzo de la historia de este trepidante t¨ªtulo de conducci¨®n firmado por Similis y distribuido por Fishtank. En ¨¦l pilotamos veh¨ªculos futuristas dotados de dispositivos antigravedad entre los rascacielos de la ciudad de Neo York. A?o 2.374 D.C. ... La acci¨®n nos sit¨²a en una futurista ciudad de New York, llamada Neo York, en la que el tr¨¢fico rodado ha dado paso a una nueva y sofisticada forma de desplazarse por la urbe. Al igual que ocurr¨ªa en Blade Runner, El Quinto Elemento o Regreso Al Futuro 2, ahora los veh¨ªculos est¨¢n provistos de propulsores que les permiten impulsarse de forma vertical, existiendo varios niveles de tr¨¢fico a¨¦reo confinados entre los rascacielos y formando carriles virtuales delimitados por rayos. Atravesar dichos rayos constituye un grave delito, pues se puede poner en peligro la vida de muchos ciudadanos; aquellos que lo hacen son los llamados Beam Breakers. En la ciudad conviven cinco bandas criminales, cada una de ellas con su particular estilo y cultura, record¨¢ndonos en este aspecto a los Grand Theft Auto. Nuestro objetivo ser¨¢ hacer m¨¦ritos para pasar a formar parte de una de ellas y, como no, cumplir la tarea que nos sea encomendada en cada ocasi¨®n, que consistir¨¢ principalmente competir en carreras ilegales. Aunque tambi¨¦n podremos encontrar otras misiones como robar coches de polic¨ªa, destruir locales o repartir pizzas. Neo York, USA ... Si bien, tal y como se ha mencionado con anterioridad, la creaci¨®n de Similis nos recuerda en su est¨¦tica a esas pel¨ªculas cuyo punto en com¨²n es la aparici¨®n de coches con dispositivos antigravedad, y su argumento es similar a la del t¨ªtulo por excelencia en el que encarnamos a un criminal, el g¨¦nero en el que se engloba es bien distinto. Se trata, esencialmente, de un juego de conducci¨®n con m¨¢s componente arcade que de simulador, en el que se han incluido ciertos elementos como la antigravedad para conseguir destacarlo frente a los ya cl¨¢sicos Crazy Taxi o Carmageddon. Bienvenido a la nueva gran manzana. Haciendo uso de los m¨¢s de 30 veh¨ªculos presentes en el juego y las innumerables mejoras que se nos permitir¨¢ incorporarles, podremos disfrutar de un tutorial, 30 carreras en el modo competici¨®n, 57 misiones de campa?a, un modo survival del que todav¨ªa poco se sabe, un curioso modo de observaci¨®n en el que tendremos la oportunidad de circular por la ciudad libremente y, aunque el t¨ªtulo seg¨²n sus desarrolladores est¨¦ orientado a la experiencia de un solo jugador, existir¨¢ un modo multijugador en red. Uno de los veh¨ªculos que pilotaremos. Los afortunados poseedores de una tarjeta gr¨¢fica con soporte para T&L, podr¨¢n deleitarse con los fenomenales juegos de luces de los que se hace gala. La ciudad est¨¢ completamente modelada en 3D y posee una amplia variedad de entornos. Adem¨¢s, los desarrolladores han hecho uso de las nuevas posibilidades que ofrece GeForce 3, como son environmental bump-mapping o pixel lighting. La sensaci¨®n de inmersi¨®n que proporciona el juego se ver¨¢ tambi¨¦n aumentada gracias al soporte para audio 3D. Disfrutar plenamente del juego exige una GeForce 3, no obstante NVidia no pierde la ocasi¨®n de hacer Si el sistema de da?os nos da una muy buena sensaci¨®n al ver c¨®mo se resiente nuestro b¨®lido al recibir diversos impactos, la f¨ªsica alcanza unas cotas de credibilidad impresionantes. Podremos percibir efectos que van desde el realismo de cristales estallando al ser atravesados por nuestro veh¨ªculo hasta la inercia que hace que el coche no pueda seguir los cambios bruscos que realizamos en la direcci¨®n. Merece la pena prestar atenci¨®n al fenomenal acabado de los modelos. El control promete ser muy convincente. Destaca ante todo el sistema empleado para realizar desplazamientos verticales, ya que, lejos de ser como el de un avi¨®n, se limita a hacernos controlar la altura a la que queremos circular con los propulsores que hay bajo el veh¨ªculo, permiti¨¦ndonos de este modo desplazamientos verticales aun encontr¨¢ndonos detenidos. El juego soportar¨¢ retroalimentaci¨®n forzada y controladores anal¨®gicos, siendo estos altamente configurables gracias a las opciones que se nos facilitar¨¢n. Por lo dem¨¢s, el resto de los controles ser¨¢n bastante sencillos, cosa que reforzar¨¢ la componente arcade de este t¨ªtulo. Estar¨¢n compuestos principalmente, adem¨¢s de por los seis imprescindibles (arriba, abajo, derecha, izquierda, acelerar y frenar), por un turbo y por un activador de los ¨ªtems que vayamos consiguiendo en nuestro recorrido. Este coche nos traer¨¢ m¨¢s de un quebradero de cabeza. Dichos ¨ªtems tendr¨¢n diversas utilidades, como son recargar la barra de turbo (ni que decir tiene que, como buen turbo, se agotar¨¢ r¨¢pidamente), reparar los da?os sufridos por nuestro coche o librarnos de la polic¨ªa cuando nos est¨¦ pisando los talones. Este ¨²ltimo vuelve a recordarnos al que ya tuvimos la oportunidad de usar en los Grand Theft Auto, aunque a pesar de las similitudes es obligatorio aclarar una vez m¨¢s que este t¨ªtulo est¨¢ principalmente orientado a las carreras de coches. Aqu¨ª podemos observar los efectos de luces. La dificultad que podamos encontrar al jugarlo residir¨¢ esencialmente en tres elementos que lo dotan de una mayor adicci¨®n: el control, los checkpoints y el tr¨¢fico. El control vertical del veh¨ªculo es algo a lo que seguramente no estemos acostumbrados, pero que con un poco de pr¨¢ctica se puede llegar a dominar. El reducido tama?o de los checkpoints y la proximidad entre ellos en las misiones de carrera, adem¨¢s de exigirnos una mayor habilidad, evitar¨¢ que podamos circular libremente por el escenario como ocurr¨ªa en Carmageddon, aunque para eso siempre nos quedar¨¢n las misiones con otra tem¨¢tica. La iluminaci¨®n est¨¢ muy conseguida. Y, por ¨²ltimo el tr¨¢fico, la piedra angular sobre la que se apoya gran parte del juego, pues su elevada intensidad no s¨®lo nos impedir¨¢ circular con comodidad, sino que, gracias a los m¨¢s de 600 veh¨ªculos que podremos llegar a ver simult¨¢neamente en pantalla, dotar¨¢ a los entornos de una riqueza visual y de una sensaci¨®n de dinamismo impresionantes; no en vano, gran cantidad de los trabajados efectos de luces que se incorporan hacen buen uso de este elemento para exhibirse. Disfrutar plenamente del juego exige una GeForce 3, no obstante NVidia no pierde la ocasi¨®n de hacer Simis, la joven compa?¨ªa fundada en 1998 y creadora de la versi¨®n para Macintosh de The Settlers II, ofrece un juego perteneciente a un g¨¦nero cargado de buenos t¨ªtulos y en el que es dif¨ªcil innovar. Las comparaciones son odiosas, pero inevitables en esta ocasi¨®n. Sin embargo, Beam Breakers promete parecerse a muchos otros, pero se podr¨ªa decir que pocos se parecer¨¢n a ¨¦l. En esta vista de la ciudad vemos el gran volumen de tr¨¢fico con el que tendremos que lidiar. Dependiendo de la variedad de escenarios, misiones o ¨ªtems de la versi¨®n final, esta extra?a combinaci¨®n de distintos elementos que pudimos ver en t¨ªtulos ya m¨ªticos puede resultar en algo brillante, aunque todav¨ªa tendremos que esperar un poco para saber si nos encontramos ante uno de esos juegos redondos o por el contrario es un t¨ªtulo m¨¢s que pasar¨¢ por nuestro PC sin pena ni gloria, ya que su fecha de salida est¨¢ prevista para Mayo o Junio de la presente campa?a. Eso si, siempre que tengamos una potente tarjeta gr¨¢fica, ya que de lo contrario su espectacular aspecto gr¨¢fico se quedar¨ªa en algo mediocre.
- Conducci¨®n