Mr Moskeeto
- PlataformaPS27
- G¨¦neroAventura, Acci¨®n
- DesarrolladorEidos Interactive
- Lanzamiento28/03/2002
- TextoEspa?ol
- VocesEspa?ol
Es un p¨¢jaro? Es un avi¨®n? No!! es un mosquito...
Llega a Europa uno de los t¨ªtulos japoneses m¨¢s originales y curiosos de los ¨²ltimos meses. "Mr. Moskeeto" nos presenta una aventura divertida y fresca en la que controlaremos a un insecto. Preparaos a poner de los nervios a una muy respetable familia con vuestra sed de sangre.
Mr Moskeeto presenta una aventura divertida y fresca en la que controlaremos a un insecto. Gracias a FRESH Games y a una iniciativa de EIDOS podremos contar con una serie de t¨ªtulos menores que ser¨ªa muy dif¨ªcil que llegasen a territorio PAL. Preparaos a poner de los nervios a una muy respetable familia con vuestra sed de sangre.
Con la llegada del verano en el pueblo, la familia Yamada se dispone a disfrutar de sus d¨ªas de asueto. Kenichi Yamada (el cabeza de familia), Kaneyo, su mujer y su hija, Rena, aprovechar¨¢n esos d¨ªas para descansar y realizar las cosas que m¨¢s les gustan. Parece una ¨¦poca tranquila y relajada, pero un nubarr¨®n muy negro en forma de mosquito se avecina.
Ese mosquito eres t¨², y tienes que proveerte de sangre para pasar el duro invierno, as¨ª que decides entrar en la casa de los Yamada y llenar tus dep¨®sitos de plasma sangu¨ªneo para que tu invierno transcurra pl¨¢cidamente. Sin embargo, la familia Yamada se ir¨¢ enfadando cada vez m¨¢s seg¨²n le vas succionando su sangre, y la cosa se puede poner muy fea. Lograr¨¢s juntar las provisiones necesarias para resistir la temporada fr¨ªa, o te arriesgar¨¢s como un machote a lograr el m¨¢ximo de dep¨®sitos, demostrando tu frialdad? T¨² decides.
Con este planteamiento, Mr. Moskeeto logra presentarnos una aventura casi arcade, pero con toques estrat¨¦gicos para lograr tus objetivos. La familia Yamada es muy curiosa, y durante el juego se podr¨¢n ver situaciones c¨®micas y curiosas entre sus miembros, a veces hasta hilarantes. El gui¨®n seguido para realizar estas escenas es brillante, y su realizaci¨®n muy original. Pero, ?qu¨¦ tal ha quedado el conjunto? Veamos...
En los enfrentamientos con los humanos tendremos que ir con pies de plomo. |
Los efectos de luz que gestiona el juego no est¨¢n mal, pero no son en tiempo real, aunque su funci¨®n queda bien cumplida. Durante el juego habr¨¢ zonas en las que podremos apagar las luces, y todo el entorno quedar¨¢ sumido en una oscuridad bien conseguida, pero que no afectar¨¢ m¨¢s a las zonas m¨¢s escondidas, como deber¨ªa ser, y el grado de oscuridad ser¨¢ el mismo en toda la estancia.
Un detalle muy bueno es el buen calibramiento de las dimensiones: t¨² eres un mosquito, y cualquier objeto de la casa es enorme si lo comparas con tu volumen (y ya no digamos la familia Yamada!): un interruptor, una figura decorativa, una minitorre, una mesita, un trofeo... ser¨¢n tremendamente grandes al acercarte a ellas, y durante estos momentos el juego no sufrir¨¢ en ning¨²n momento ralentizaciones, ni siquiera cuando nos acercamos mucho a las personas, que se han representado de forma especialmente cuidada.
Encontrar desprevenido a un humano es la mejor forma de conseguir pasar inadvertidos. |
La familia Yamada tiene una construcci¨®n poligonal decente, pero sus movimientos son algo r¨ªgidos y bruscos. La forma de andar es demasiado rob¨®tica, as¨ª como la sensaci¨®n de lentitud que desprenden al andar -pero no porque se produzcan slowdowns, ojo-. Hay algunos entornos m¨¢s trabajados que otros, pero en general dan sensaci¨®n de vac¨ªo. Otros efectos de part¨ªculas est¨¢n bien resueltos, por ejemplo las zonas donde se representa la existencia de insecticida y el movimiento de frenado o de media vuelta, y el mosquito tiene un volumen que se corresponde en proporci¨®n con el resto de la casa, aunque su construcci¨®n tambi¨¦n tiende un poco a ser algo b¨¢sica.
Las 12 zonas de la casa que se representan en el juego son variadas y las texturas, aunque algo simples, la verdad es que est¨¢n bien dise?adas, pero requerir¨ªan de algo m¨¢s de resoluci¨®n para poder salvar de mejor modo la sensaci¨®n de grandeza y de vac¨ªo que desprenden las estancias. Adem¨¢s, los men¨²s son extremadamente simples, hasta dar la sensaci¨®n de ser dise?ados con pocas ganas. Aunque son perfectamente claros y limpios para su navegaci¨®n, pronto les coger¨¦is man¨ªa y procurar¨¦is estar en ellos lo menos posible. Un detalle que se podr¨ªa haber cuidado m¨¢s simplemente con algo de ingenio y de trabajo.
Un humano confiado, la v¨ªctima ideal. |
El momento clave para pasar las fases ser¨¢ la acci¨®n de chupar la sangre. Las zonas interactivas -tanto del escenario como de las personas- se marcar¨¢n con un cuadro rojo. Las zonas interactivas de los objetos son zonas en las que puedes actuar para que los humanos tengan que moverse (apagar luces, encender minicadenas, etc) y as¨ª poder activar las zonas sensibles de los humanos. El cuadrado rojo en la familia Yamada mostrar¨¢ la zona en la que debes picar a la persona. Este momento es uno de los m¨¢s importantes: debes acercarte con cuidado y lanzar a mosquito para picar lo m¨¢s cerca posible de la zona (con el bot¨®n c¨ªrculo).
Peligro, ?que eso que lleva en la mano? |
Estos movimientos requieren algo de acci¨®n estrat¨¦gica. No hay que arriesgar m¨¢s de la cuenta, ya que como en la realidad, hay veces en que los miembros de la familia Yamada realizan un "fatalitie" (por llamarlo de alguna forma) y con un solo golpe ser¨¢n capaces de acabar contigo para siempre. Normalmente si te descubren entrar¨¢s en el "Modo batalla". El modo batalla consiste en que la persona te persigue por el escenario dando manotazos al aire por si te pilla. Es raro que en alguna ocasi¨®n no te pille si andas cerca -que tendr¨¢s que estar si quieres calmarla-, lo que rebajar¨¢ tu nivel de vida. Para hacer que la persona se calme necesitas darle un golpe como si fuese de aterrizaje (con c¨ªrculo) en una zona de su cuerpo que se marcar¨¢ con un punto rojo. Si est¨¢s acertado y lo logras, la persona volver¨¢ a tranquilizarse y seguir¨¢ con su quehacer para que t¨² puedas intentar de nuevo "hacerle una transfusi¨®n".
En este modo batalla tendr¨¢s un tiempo l¨ªmite para darle si quieres ver aumentadas las opciones de color para mosquito. Si lo logras en menos tiempo del permitido, al salir al men¨² principal podr¨¢s cambiar de color a mosquito para la siguiente fase. No es un detalle tremendamente importante, pero se hace divertido ser el m¨¢s r¨¢pido en "relajar" a la familia Yamada. Por el escenario tambi¨¦n podr¨¢s encontrar vidas extra y "porciones de vida" que si recoges en un n¨²mero de 50 aumentar¨¢n tu vida en una unidad. Esto tambi¨¦n hace que explores el nivel detalladamente, porque adem¨¢s como las porciones son casi de tu tama?o, desde lejos no las ver¨¢s, y necesitar¨¢s ir casi hasta estar enfrente de ellas para visualizarlas.
Todas las fases tienen el mismo objetivo, lo que repercute en la jugabilidad, y ¨¦sta se hace a la larga bastante repetitiva. Si hubiesen inclu¨ªdo m¨¢s misiones y objetivos distintos en muchas de ellas, ser¨ªa un juego con una gran adictividad, ya que utiliza una mec¨¢nica muy simple pero que "engancha" rapidamente. Realmente es su mayor problema, ya que aunque s¨®lo son 12 fases -y las ¨²ltimas son bastante dif¨ªciles, ya que los Yamada al final tienen armas m¨¢gicas!!!- a largo plazo resultan repetitivas.
En general es un juego fresco, original en su planteamiento y control, con una curva de dificultad bien ajustada pero que peca de repetitividad en su mec¨¢nica de juego. L¨¢stima de m¨¢s profundidad en sus fases.
Ummmmm no es whisky, pero la sangre calentita tiene su rollo. |
L¨¢stima de una mayor durabilidad y m¨¢s objetivos, por que con un mejor dise?o de jugabilidad y un apartado gr¨¢fico m¨¢s acorde con la 128 bits de SONY estar¨ªamos delante de un gran t¨ªtulo. Muy simp¨¢tico. No pas¨¦is sin probarlo, o me "mosquear¨¦" XDD
l o m e j o r
l o p e o r
Bueno
Cumple con las expectativas de lo que es un buen juego, tiene calidad y no presenta fallos graves, aunque le faltan elementos que podr¨ªan haberlo llevado a cotas m¨¢s altas. C¨®mpralo sin miedo.