Crazy Taxi, Primeras Impresiones (GameCube)
Hay una misi¨®n, llevar a un pasajero al Pizza Hut m¨¢s cercano en el menor tiempo imposible. Hay un medio, un fabuloso taxi. Hay un problema, un tremendo atasco. El pasajero se desespera, hay que actuar r¨¢pido. Soluci¨®n: Subir a un parking y saltar desde lo m¨¢s alto con el coche ?locura?, no aqu¨ª
Hay una misi¨®n, llevar a un pasajero al Pizza Hut m¨¢s cercano en el menor tiempo imposible. Hay un medio, un fabuloso taxi. Hay un problema, un tremendo atasco. El pasajero se desespera, hay que actuar r¨¢pido. Soluci¨®n: Subir a un parking y saltar desde lo m¨¢s alto con el coche ?locura?, no aqu¨ª.
La plantilla de personajes |
En plena crisis del sector de las recreativas, cuando las consolas hab¨ªan dejado en pr¨¢cticamente nada las diferencias t¨¦cnicas con las recreativas, y la ¨²nica salida para este mercado parec¨ªa hacer cada vez cabinas m¨¢s grandes, complejas y caras, apareci¨® Crazy Taxi para demostrar el camino a seguir por las dem¨¢s. Como casi siempre, Sega sobresal¨ªa en el mercado en donde hab¨ªa realizado tantos y tan buenos juegos, esta vez con un fren¨¦tico juego de conducci¨®n en donde val¨ªa todo y que no solo luc¨ªa un gran aspecto t¨¦cnico, sino que era tremendamente divertido, y no necesitaba de una mega cabina de una tonelada para hacerlo apetecible. ?Su nombre? Crazy Taxi.
A toda velocidad |
Por supuesto, el t¨ªtulo tuvo una conversi¨®n para Dreamcast, realizada con mucho acierto, pero que de poco sirvi¨® para levantar una consola que ya se tambaleaba hac¨ªa su destino. Afortunadamente, con el cambio de pol¨ªtica por parte de Sega, se abri¨® la posibilidad de que Acclaim se hiciera con los derechos de algunos juegos para llevarlos a otras plataformas, entre ellos Crazy Taxi, que previamente tuvo su versi¨®n para PS2 y ahora se presenta para GameCube.
Pocos cambios
Teniendo en cuenta que se trata de uno de los t¨ªtulos m¨¢s divertidos y locos de estos ¨²ltimos a?os, la verdad es que lo primero que siente uno al jugar a esta versi¨®n de GameCube es una peque?a decepci¨®n, y esto es porque no ha cambiado absolutamente en nada con respecto al juego de Dreamcast, lo que no tiene mucha explicaci¨®n dada la diferencia de tiempo y prestaciones entre ambas consolas.
Las chicas s?Esaben conducir |
La vida de un taxista
Para quienes no conozcan la tem¨¢tica de este t¨ªtulo, se trata de ir con un taxi por una ciudad recogiendo clientes y llev¨¢ndolos a su destino en un m¨ªnimo de tiempo. Cuanto menos se tarde, m¨¢s bonificaciones se recibir¨¢, sucediendo lo contrario si se llega mal de tiempo (incluso el cliente saltar¨¢ literalmente del taxi si se agota su contador). Tambi¨¦n son importantes las propinas, que se obtienen a base de hacer todo tipo de maniobras peligrosas para impresionar al pasajero. Esquivar coches de frente, dar saltos muy largos, o zigzaguear entre el tr¨¢fico, son algunas de las acciones que recibir¨¢n premio, siempre y cuando se hagan bien y no se choque con otros veh¨ªculos, caso en el que el pasajero rega?ar¨¢ enfadado al jugador. Cuantos m¨¢s r¨¢pido se vaya, m¨¢s gente se podr¨¢ recoger, lo que implica ganar m¨¢s dinero y aspirar a bonificadores de tiempo si se hacen las cosas especialmente bien.?
Hacia el helipuerto |
Obviamente, el juego no es ning¨²n simulador de taxis, pues todo se desarrolla de un modo completamente desenfadado. Con un mundo colorista e irreal, en donde se puede atajar por una v¨ªa de tren (con tren incluido), irrumpir en el metro, ir por debajo del agua, o circular por las azoteas de los edificios. Hay completa libertad para conducir por todo el escenario y buscar rutas alternativas, todo con un denominador com¨²n: velocidad.
Buen pero desfasado aspecto gr¨¢fico
En ese ¨²ltimo aspecto est¨¢ muy conseguida esta conversi¨®n, ya que aunque los gr¨¢ficos son iguales, se han eliminado ciertas relentizaciones que se produc¨ªan en la versi¨®n de Dreamcast y PS2, discurriendo todo a unos suaves 60 Hz que dejan a la vista disfrutar de los antiguos pero s¨®lidos y trabajados gr¨¢ficos. Pero, lo que es innegable es que si se hubiesen inclu¨ªdo m¨¢s efectos, m¨¢s pol¨ªgonos o texturas de mayor calidad, hubiera ganado muchos enteros, pues aunque los gr¨¢ficos no deber¨ªan ser lo m¨¢s importante a la hora de buscar diversi¨®n en un videojuego, es innegable que un juego con gr¨¢ficos atractivos llama mucho la atenci¨®n al potencial comprador. Con esto no se quiere decir que Crazy Taxi tenga unos malos gr¨¢ficos, ni mucho menos, pero s¨ª algo desfasados, viendo las cosas que salen de otras plataformas, o de la propia GameCube (solo hay que echar un vistazo a las im¨¢genes de Resident Evil para darse cuenta de esto).
Crazy Taxi (GC) |
En picado |
Los modos de juego se mantienen exactamente iguales que en Dreamcast, por lo que existen tres opciones de juego: Arcade Mode, Original Mode y Crazy Box. El primero es un calco de la recreativa original, con el mismo escenario. Original Mode es un nuevo escenario inclu¨ªdo en la versi¨®n de Dreamcast para alargar el juego, siendo m¨¢s grande y m¨¢s compleja. Por ¨²ltimo, el modo Crazy Box, en donde aparecen una serie de minijuegos destinados a alargar la vida del juego, aunque un capacidad de divertir depende en buena parte de la capacidad del jugador en picarse con sus propias marcas, pues no hay modo de multijugador (aunque siempre se puede recurrir al viejo " a ver quien consigue mejor tiempo").
Poca durabilidad
Los dos escenarios son grandes, pero limitados en cierta forma. Si bien es verdad que la libertad y la cantidad de secretos y rutas alternativas que ofrecen las dos ciudades encierran muchas horas de diversi¨®n, tambi¨¦n es verdad que es bastante limitado. A fin de cuentas, esto sigue siendo un arcade en forma y esencia, por lo que tiene un ciclo de vida bastante corto, con un fin que coincide en el momento en el que ya se conocen todas las rutas y se consiguen tiempos perfectos, cosa en la que puede tardar un par de semanas, tremendamente divertidas eso s¨ª. Obviamente, esto se aplica a quien no haya disfrutado de la versi¨®n Dreamcast.
Una de las franquicias que aparecen |
Controlando la situaci¨®n
Una cosa a destacar es el suave control que se ha sabido imprimir a esta versi¨®n. Quiz¨¢s es por el mando, o por una propia mejora en el juego, pero el caso es que los cuatro taxis que se pueden manejar responden perfectamente al pad, lo que resulta algo de agradecer pues muchas ocasiones habr¨¢ que reaccionar r¨¢pido y bien para evitar chocar y perder preciosos segundos (por no hablar de lo frustrante que ser¨ªa ver fracasar una maniobra arriesgada por un control inapropiado).
Ahora le toca el turno a Pizza Hut |
Una banda sonora de lujo
En cuanto a la banda sonora, est¨¢ realmente bien, con temas de Offspring y Bad Religion que vienen ni que pintados a la mec¨¢nica. Bajar a toda pastilla una enorme cuesta, esquivando coches, saltando en las rampas y todo a ritmo de un ca?ero tema de Offspring retumbando en los o¨ªdos es un placer digno de ser disfrutado por todo amante de las consolas. Lamentablemente, al igual que sucede con el resto del juego, no hay mucha variedad en los temas, lo que a la larga provoca cansancio despu¨¦s de oirlos decenas de veces.
Terror en el parque |
Lo que depara el futuro
Terminando, hay que recalcar que su mayor virtud y su mayor defecto es lo poco que ha cambiado con respecto a su versi¨®n original. Es muy posible que en el acuerdo alcanzado por Acclaim y Sega se especificara que no se pod¨ªa cambiar el juego, pero lo cierto es que es una oportunidad perdida para adaptar un cl¨¢sico a nuevos tiempos, si bien el resultado no se puede decir que sea malo. A pesar de su antig¨¹edad, conserva los elementos que lo convierten en un grande y dan a conocer a un mayor abanico de publico una de las mejores creaciones de Sega, que cuenta con una secuela y un proyecto de tercera parte con el nombre de Crazy Taxi 3: High Roller, que se esperar¨¢ impaciente.
Como en una pel¨²?ula |
- Acci¨®n
- Conducci¨®n