007: Agent under fire (GameCube)
Armado con el motor gr¨¢fico de Quake III, James Bond tiene una misi¨®n de alto riesgo: gustar a los usuarios de GameCube. Aunque cuente con la ayuda de Q y M, el agente especial m¨¢s arrogante del planeta no lo tendr¨¢ nada f¨¢cil...
James Bond es el peor agente secreto del mundo. El MI6 le pide que se traslade a una mina a pararle los pies a Renard (The World Is Not Enough) y hace saltar por los aires todas las instalaciones con la tranquilidad de quien acaba de escupir un chicle al suelo; Sigilo en estado puro...
El ¨²ltimo largometraje de James Bond (y van 21) se visualiz¨® en las salas de cine de Espa?a a finales de 1999. Lo cierto es que las demoras entre videojuego y pel¨ªcula suelen ser muy frecuentes, aunque nunca debieran tardar demasiado por aquello de mantener vivo el recuerdo. Por ejemplo, Goldeneye para N64 sali¨® alrededor de 2 a?os -una barbaridad- despu¨¦s de la versi¨®n cinematogr¨¢fica, encontr¨¢ndose repentinamente con la que ser¨ªa la nueva entrega de la saga, El Ma?ana Nunca Muere.
No en balde, Agent Under Fire es el resultado de un retraso escandalosamente prolongado. The World Is Not Enough fue lanzado inicialmente para N64 y PSX -con una posterior entrega en miniatura para GBC-, pero la conversi¨®n a PS2 y PC se antojaba demasiado complicada. El juego deb¨ªa aparecer, m¨¢s o menos, en las mismas fechas que el de las dos consolas de antigua generaci¨®n, aunque por problemas t¨¦cnicos e incompatibilidades con el engine, EA soslay¨® la licencia... al menos el del filme. Porque ahora, los chicos de Electronic Arts no han perdido las ganas de seguir aprovechando el fil¨®n de la novela de Ian Fleming y han "improvisado", por as¨ª decirlo, una entrega sin ning¨²n nexo aparente con ninguna cinta, pero que, por otra parte, tiene un parecido innegable con TWINE.
Bond se al¨ªa con el marine de Quake
Agente en Fuego Cruzado, nombre que seguramente recibir¨¢ cuando aparezca por estos lares, cuenta con una particularidad notable: EA ha usado dos motores para darle forma, adem¨¢s varias secuencias CGi. El primero de ellos est¨¢ extra¨ªdo directamente de las oficinas de ID, y se trata del engine de Quake III, un aut¨¦ntica proeza del "shooter" subjetivo. El otro pertenece a la propia Electronic Arts, de su filial canadiense para ser exactos, y servir¨¢ para las fases de conducci¨®n.
Dicho de esta manera, lo cierto es que lo nuevo de Bond promete estar a la altura de los tiempos que corren. Ciertamente las fases en visi¨®n de primera persona est¨¢n muy logradas, pues la acci¨®n discurre tan suave como la seda y los movimientos de los enemigos, trasladados a la consola mediante el motion capture, son una verdadera muestra de sus posibilidades. Sin embargo, algunas texturas de la versi¨®n para PS2 dejaban bastante que desear, y eso es algo que, teniendo en cuenta las capacidades t¨¦cnicas de estas consolas, podr¨ªa ser pulido para la ocasi¨®n. Los escenarios tambi¨¦n estaban muy bien tratados, pues las ciudades de las fases de conducci¨®n demuestran un excelente trabajo en las construcciones geom¨¦tricas, as¨ª como en las deformaciones de los coches cuando se les agujerea la carrocer¨ªa con todo el arsenal de Bond.
Por lo que hemos podido ver, Agent Under Fire para GameCube sobresale y se hunde en algunos aspectos. Empecemos por lo bueno; se han difuminado algunos "jaggies" que hab¨ªa en los bordes de los cuerpos, lo que a fin de cuentas se resume en que el aspecto general tiene mejor acabado. Sin embargo, nos ha llamado la atenci¨®n que, en los niveles en los que hay que andar a oscuras, las balas no emiten ning¨²n tipo de luz sobre los cuerpos, lo que denota la precariedad del port. Probablemente todo se aduzca a que el juego todav¨ªa est¨¢ en v¨ªas de desarrollo. Como en su hom¨®nimo para PS2, dichas balas "flotan" en el aire. Entre que disparas -o te disparan- y llegan al objetivo pasan algunas d¨¦cimas que parecen interminables. Poni¨¦ndonos un poco achacosos, tambi¨¦n habr¨ªa que redefinir las explosiones, puesto que sus efectos son muy poco llamativos y el humo que provocan dura exactamente dos segundos de reloj.
El caso es que el contrato de exclusividad de esta franquicia con la consola de SONY, que le vincula durante 6 meses a PlayStation 2, deber¨ªa permitir que estos "errores" puedan ser optimizados mientras expira el plazo.
El ataque de los clones
007 Agente en Fuego Cruzado nos zambulle de lleno en una trama fabulada por Malprave, la villana de turno que, aprovechando los avances cient¨ªficos en el campo de la clonaci¨®n humana, pretende crear su propio ej¨¦rcito "hecho a medida" y dominar el mundo. Detr¨¢s de esta megaloman¨ªa desmesurada se encuentra el cl¨¢sico enemigo de las pel¨ªculas de James Bond -que aqu¨ª aparece como un h¨ªbrido entre Timothy Dalton y Roger Moore-, aunque en esta ocasi¨®n ha sido creado exclusivamente para el videojuego, al igual que todo del gui¨®n.
Por lo tanto, nuestro objetivo ser¨¢ el de frustrar sus planes a trav¨¦s de las doce fases de que consta el programa. Ocho de ellas se recorrean a pie, como las de toda la vida. Y las cuatro restantes a bordo de coches de post¨ªn.
?Pero no era un shoot'em up?
Tomorrow Never Dies ya incorporaba algunas fases en tercera persona, y The World Is Not Enough contaba con un descenso por la nieve que emulaba una de las escenas m¨¢s trepidantes de la pel¨ªcula. Con Agent Under Fire se ha querido potenciar este cambio de perspectiva. Como hemos comentado, habr¨¢ cuatro fases que transcurrir¨¢n a bordo de diferentes veh¨ªculos: Aston Martin DB5, BMW 750 iL, y el ultra moderno BMW Z8, que aparec¨ªa en el ¨²ltimo filme del agente brit¨¢nico. En algunas de estas fases tomaremos el control del b¨®lido desde una vista externa, siendo casi toda ella una persecuci¨®n constante por las calles de ciudades tan conocidos como Hong Kong; mientras que en otras, tan solo deberemos preocuparnos de compasar bien el arsenal y disparar a todo aquel que se atreva a plantarnos cara, ya sean otros coches que intentan darnos caza u helic¨®pteros -el Final Boss de TWINE a su lado parece un juguete.
Pero Electronic Arts no ha dejado de lado los niveles m¨¢s interesantes. En la piel de 007 deberemos infiltrarnos en bases militares y encontrar documentos que incriminen a Malprave, tratar de no quedar seducidos por las tradicionals chicas Bond -en el caso que nos ocupa dos gemelas explosivas llamadas Bebe y Belle o Carla "Jackal"-, evitar el secuestro de ciertas personas clave, hacer estallar laboratorios o rescatar agentes de la CIA. Todo un repertorio de misiones muy variadas que pondr¨¢n a prueba nuestras dotes como jugador.
No obstante, y haciendo caso a nuestros compa?eros del canal de PlayStation 2, Agent Under Fire peca de una excesiva linealidad. En Goldeneye pod¨ªamos acometer todos los objetivos siguiendo un orden m¨¢s o menos libre -aunque est¨¢ claro que algunos puntos son consecuencia de otros y no pueden tomarse a la ligera- y eso le daba un desarrollo algo m¨¢s abierto del habitual. Aqu¨ª se debe cumplir la consigna a rajatabla, haci¨¦ndolo como se ha estipulado, y punto. Siguiendo con los problemas que planteaba la otra versi¨®n, habr¨ªa que mejorar ostensiblemente la Inteligencia Artificial de los enemigos, pues tardaban bastante en activar las alarmas cuando te descubr¨ªan, adem¨¢s de poder entrar en algunas ¨¢reas pulsando el gatillo contin¨²amente e ignorando por completo que eres un esp¨ªa. A la postre, el juego puede terminarse en unas pocas horas. El Multiplayer tambi¨¦n debe ser reconfigurador casi al completo. La ausencia de bots controlados por la m¨¢quina hace que esta opci¨®n se dirija a los jugadores que cuenten con amistades muy dadas a este tipo de enfrentamientos.
El relevo de R se lo toma muy a pecho
Q es el relevo generacional de R. Interpretado por John Cleese en la gran pantalla, este personaje nos suministrar¨¢ toda una amplia gama de gadgets que se usar¨¢n en ciertos momentos -muy pocos, eso s¨ª- y que nos permitir¨¢n despachar algunos puzzles. El m¨¢s llamativo es una especie de Jet Pack, llamado con mucha originalidad Q-Jet, que permite a Bond encaramarse a plataformas que a pie son inaccesibles. Con el Q-Remote podremos decodificar a distancia c¨®digos de sistemas de seguridad, con la Q-camera hacer fotograf¨ªas de planos o documentos, con el Q-Laser abrir puertas cerradas a cal y canto, con el Q-Claw lanzaremos un doble filamento de fibra con un gancho para subir a algunos lugares, y as¨ª alguno m¨¢s.
Tambi¨¦n hay armas para dar y regalar. Cada una ser¨¢ ¨²til para una situaci¨®n en concreto, y eso otorga, en parte, una pizca de estrategia. Por ejemplo, no puedes equiparte con una Windsor FSU-4 -un rifle de asalto imponente- para los niveles que requieran mayor sigilo. Hay de todo, desde armas potent¨ªsimas como la Koffler & Stock D17, hasta las arrojadizas granadas, pasando por m¨¢s modestas como la Wolfram P2K o una silenciosa pistola de dardos somn¨ªferos.
Fin de la exclusividad: marzo
James Bond 007: Agente en fuego cruzado
- Acci¨®n