c¨¢llate risitas...

Hacia tiempo que no ve¨ªamos en la pantalla de nuestros televisores a las m¨ªticas series de Hanna-Barbera, sustitu¨ªdas en la actualidad por otros personajes y relegadas casi al olvido, permaneciendo ¨²nicamente en la memoria de los que vivimos la ¨¦poca dorada de este par de dibujantes norteamericanos, responsables de joyas de la animaci¨®n como el miedoso Scooby Doo y, como no, una serie que caus¨® estragos durante mas de dos generaciones, los Autos Locos.

Creada all¨¢ por 1960, Wacky Races fue el verdadero baluarte de Hanna junto con Scooby para dar el salto a las pantallas de todo el mundo y convertirse, como quien no quiere, en unos compa?eros inseparables de nuestra infancia. El fant¨¢stico sentido del humor que hacia gala Los Autos Locos, as¨ª como el carisma que cada uno de los personajes pose¨ªa (en especial el eterno y frustrado aspirante a ganador Pierre Nodoyuna y su perro Pat¨¢n) lo convirtieron en todo el ¨¦xito de una ¨¦poca.

Aprovechando el casi olvido que hab¨ªa reca¨ªdo sobre Pat¨¢n, Penelope Glamour y compa?¨ªa, Infogrames decidi¨® hacerse con la licencia de la Warner y publicar una serie de videojuegos para todos los formatos posibles: PC, Game Boy, PlayStation y Dreamcast, que vieron la luz hace unos meses.

Ahora, aprovechando la licencia, Infogrames ha terminado de cuajar la que a priori es la mejor versi¨®n de las 5, la de PlayStation 2, que viene con un apartado gr¨¢fico reforzado y con varias (aunque limitadas) novedades con respecto a sus hom¨®logos.

Los Autos Locos: Pierre Nodoyuna y Pat¨¢n, nombre final con el que se ha bautizado al juego, es un t¨ªtulo muy en la l¨ªnea de Mario Kart, aunque ser¨ªa m¨¢s correcto decir que guarda m¨¢s semejanzas con el m¨ªtico (entre los seguidores NIntenderos) Diddy Kong Racing, por su s¨®lido modo aventura, aunque sin descuidar otras parcelas. Vayamos por partes.

El tono humor¨ªstico tan "a?os setenta" que rodeaba a la serie se encuentra totalmente plasmado en el juego. Empezando por la secuencia de introducci¨®n (absolutamente melanc¨®lica) y terminando por ciertos decorados, vestuario de los personajes o estilo de letra utilizado en los menus.

Comparado con la versi¨®n Dreamcast, el apartado gr¨¢fico no se ha visto renovado de forma aplastante y ambas versiones van a la zaga. Puede decirse que la versi¨®n PS2 es m¨¢s r¨¢pida que la Dreamcast, pero cuenta con peque?os defectos gr¨¢ficos .

Esta versi¨®n PS2 tambi¨¦n cuenta con la inclusi¨®n de la t¨¦cnica del "Cell Shading" que tapar los v¨¦rtices de esos pol¨ªgonos con los mismos colores de las texturas que los rodean y se crea un contorno negro en tiempo real que rodea a los gr¨¢ficos en cuesti¨®n creando el efecto de dibujo animado que resulta ser toda una alucinante recreaci¨®n de los juegos como si de dibujos animados se tratase. Adem¨¢s, si el cell shading no es de tu agrado, el juego ofrece la posibilidad de desactivarlo.

Respecto a los personajes, tienen un look total a cartoon como dicen los yankees, pero est¨¢n muy poco definidos y las texturas que los componen son en baja resoluci¨®n. Lo mismo para los escenarios, que a pesar de ser variados y tener elementos con los que poder interactuar, no son gr¨¢ficamente deslumbrantes. Quiz¨¢ el nivel de elementos que hay repartidos por el escenario es demasiado alto y en algunas ocasiones interfiera en la conducci¨®n y nos confunda (como la noche) pero de eso hablaremos m¨¢s adelante.

El juego de c¨¢maras es bastante completo y podremos seleccionar hasta 4 vistas distintas para la conducci¨®n de nuestro b¨®lido, incluyendo una desde el interior del veh¨ªculo. Hay que decir que esta versi¨®n PAL de los autos locos incluye un selector 50/60 herzios que da idea del cuidado que se ha llevado en el acabado del juego.

La variedad no ha sido tenida en cuenta en lo que a melod¨ªas se refiere en este juego. Puede llegar a cansarnos pero mantiene ese ritmillo fren¨¦tico con el que salpicaba los cap¨ªtulos de la serie en la TV. Todo sea por mantener la fidelidad absoluta a la memoria infantil de los jugones "mayores" y la total asociaci¨®n del juego con los cap¨ªtulos que ahora ven los jugones "j¨®venes" en los canales digitales.

Uno de los apartados m¨¢s trabajados del juego por no decir el que m¨¢s. Y es que desde Infogrames se ha realizado un trabajo encomiable con la localizaci¨®n del juego al castellano. Empezando por los textos que incluso conservan el toque humor¨ªstico de los nombres de los circuitos, y terminando por el doblaje, realizado por profesionales y que es simplemente perfecto.

Durante la carrera escucharemos al m¨ªtico speaker que retransmit¨ªa la carrera en la serie de animaci¨®n y que adem¨¢s presenta la secuencia de introducci¨®n (casi clavada a la de la serie), adem¨¢s de decenas de comentarios de los personajes: al ganar la carrera, al ser atacados, al atacar a los contrarios, al salir nos de pista.... un trabajo absolutamente ejemplar del que deber¨ªan de tomar nota el resto de compa?¨ªas.

En cuesti¨®n de efectos sonoros de los veh¨ªculos, el cat¨¢logo es el propio de cualquier juego de carreras estilo Mario Kart, pero con un toque sonoro acorde al estilo a?os setenta que respira en la serie.

Los autos locos puede ser catalogado como un juego estilo Mario Kart, pero si nos fijamos m¨¢s en ¨¦l descubriremos que guarda m¨¢s semejanzas con Diddy Kong Racing que con el titulo de Karts del fontanero. En Wacky Races tenemos 2 modos de juego principales, el arcade y el aventura, en el que tendremos que ir recorriendo distintos mundos (5) y completar sus circuitos (20) y pruebas especiales (5) para ir sumando estrellas que nos permitir¨¢n avanzar en el juego, descubriendo nuevos secretos.

A pesar que el juego ofrece un marcado car¨¢cter de conducci¨®n arcade, encontramos dos estilos de conducci¨®n Kart y Avanzado, cuyas diferencias son ciertas ayudas a la conducci¨®n.

Wacky Races incluye un total de 12 conductores, 9 de ellos disponibles desde inicio m¨¢s los 3 que se incorporan a medida que avanzamos en el juego. Brutus y Listus en el Troncoswagen, Pedro Bello y su Super Heterodino, Lucas y el oso miedoso en el Alambrique Veloz, aliento de mozzarella Mafio y compa?¨ªa en la Antiguaya, el Sargento Blast y el soldado Meekly en el Superchatarra especial, el Compact Pussycat con Penelope Cruz digo Glamour al volante, el Espantomovil de los hermanos Tenebrosos, y el Rocomovil de los Macana. Posteriormente podremos controlar a Pierre Nodoyuna y Pat¨¢n con el Super Ferrari, al bar¨®n Hans Fritz y el Est¨²car Racuda y al profesor Locovitch en el Autoconvertible.

Los personajes no recogen power ups de los escenarios para despu¨¦s utilizarlos, si no que tienen un cat¨¢logo de 3 habilidades especiales que podr¨¢n utilizar durante toda la carrera para sacar a sus rivales a la cuneta. Para ello tendr¨¢n que recoger Wacky-puntos, que se encontrar¨¢n esparcidos por el circuito, ya que cada ataque especial requiere una cifra determinada de estos elementos. En total existen nada m¨¢s y nada menos que 60 ataques especiales que van desde lanzamiento de piedras a r¨¢fagas de ametralladora, llamaradas de drag¨®n o burbujas de chicle.

La dificultad es muy alta en este juego, nos costar¨¢ mucho alcanzar puestos de cabeza y pese a esto, al m¨ªnimo fallo o p¨¦rdida de velocidad, seremos adelantados por todo el pelot¨®n de enemigos. Los escenarios, al ser tan recargados, no ofrecen ayudas en este punto y m¨¢s que facilitar el trazado, nos confundir¨¢n y nos har¨¢n estamparnos contra una pared que no hemos visto m¨¢s de una vez.

Los modos de juego que ofrece el modo arcade, incluyen el "As de la pista", Campeonato, Contrarreloj y el Batalla para 4 jugadores simult¨¢neos, muy divertido pero que precisa el uso del Multitap de PS2.

Un juego que viene a reforzar a un g¨¦nero en PS2, bastante desprovista de t¨ªtulos de este estilo, que parad¨®jicamente es un g¨¦nero saturado en todas las plataformas actuales.

Un apartado gr¨¢fico correcto, con una correcta conversi¨®n a PAL y opci¨®n a 60 hz (tendr¨¢ que ver que los desarrolladores son europeos y saben lo que se cuece) una vida media elevada y un doblaje absolutamente soberbio.

En el otro lado de la balanza tenemos muy pocas cosas, principalmente su elevada dificultad, desesperante en algunos momentos (en el modo aventura hay que clasificarse el primero para seguir avanzando) y algunos peque?os fallos en el apartado gr¨¢fico.

Si te gustan este tipo de juegos, sobretodo para disfrutarlo en multijugador, o de ni?os has sido fan de la serie y quieres vivir unos momentos de nostalgia a golpe de pad, no lo dudes, este es tu juego.