Eurotour Cycling
- PlataformaPC7
- G¨¦neroDeportes
- DesarrolladorDinamic Multimedia
- Lanzamiento04/05/2001
- TextoEspa?ol
- VocesEspa?ol
Una saga que comienza con buen pie
Eurotour Cycling es el t¨ªtulo que Dinamic Multimedia ha elegido para su juego deportivo sobre el ciclismo. En ¨¦l, el jugador se podr¨¢ convertir en director de un equipo ciclista para conducirlo hasta la victoria.
La base de datos no est¨¢ mal, mostr¨¢ndonos datos deportivos y personales de los corredores y directores del panorama internacional. Pero tampoco se puede decir que sea una enciclopedia de ciclismo. Es de esperar que en sucesivas versiones mejore, con apartados tales como palmar¨¦s de las principales pruebas o datos sobre los grandes ciclistas hist¨®ricos.
Es en el Giro de Italia, en el Tour de Francia y en la Vuelta a Espa?a donde este juego tiene su raz¨®n de ser. En un entorno 3D nada despreciable veremos en tiempo real, o en modo acelerado si es nuestro deseo, todas y cada una de las etapas que componen estas tres grandes vueltas, siguiendo unos trazados muy fieles a los reales de la temporada 2001.
Pero no nos bastar¨¢ con observar el transcurso de la carrera como si estuvi¨¦ramos sentados frente al televisor. Nos meteremos en la piel de un director deportivo para dirigir a nuestros hombres en todo momento y sacarles el m¨¢ximo de resultado, dependiendo de su potencial.
Sin llegar a la perfecci¨®n, estas carreras simuladas nos pueden aproximar a lo que siente un Manolo Sainz o un Eusebio Unzue al guiar un equipo en una gran vuelta. Por un lado, disponemos de m¨²ltiples c¨¢maras para seguir la carrera, una con cada grupo y otra en cada meta, y por otro lado, contamos con nueve ¨®rdenes o l¨ªneas de acci¨®n que dar a cada uno de nuestros hombres.
Digo que no llega a la perfecci¨®n porque tiene fallos evidentes. Para muchos, entre los que me incluyo, puede resultar un sacrilegio ver al jefe de filas tirando del pelot¨®n si no se le dice lo contrario continuamente, como si fuera un gregrario m¨¢s, o poner a uno de nuestros hombres a vigilar a un rival y comprobar como colabora con ¨¦l, cuando nuestra orden pretende que se ponga a rueda, le vigile y ahorre fuerzas, siendo a veces muy dif¨ªcil que deje de hacerlo. Tambi¨¦n resulta complicado que nuestros corredores se sit¨²en a la cola de un grupo peque?o una vez que han tomado la cabeza y si los acompa?antes no est¨¢n dispuestos a dar relevos, y casi imposible lanzar a nuestro sprinter con alguno de sus compa?eros.
A pesar de estos fallos, el juego merece la pena por los muchos aciertos y similitudes con la realidad. Al principio puede parecer que basta con asignar una funci¨®n a cada componente del equipo, acelerar la etapa, verla pasar en un suspiro y comprobar el resultado. Sin embargo, pronto vamos comprobando la gran influencia que tenemos sobre el desarrollo de la carrera con decisiones puntuales, atacando, colaborando o tirando, dependiendo de la situaci¨®n de nuestros rivales directos en la general o para la consecuci¨®n de la victoria de etapa.
La energ¨ªa y el cansancio de los integrantes del pelot¨®n est¨¢ muy bien recreada. Siendo menor el desgaste yendo en cabeza que a rueda, y menor a¨²n arropado por un gran grupo. Tambi¨¦n aumenta m¨¢s el cansancio en ascenso que en llano o descenso, sobre todo para quienes cuentan con par¨¢metros que indican que son rodadores. En contrapartida, los escaladores tienen mayores dificultades en el llano.
Las etapas de alta monta?a tienen la ¨¦pica que cabe esperar de ellas, y nuestra influencia sobre ellas es decisiva si sabemos administrar las fuerzas de nuestro equipo. Eso que tantas veces hemos visto en la televisi¨®n, cuando los gregarios se desgastan uno tras otro y finalmente el jefe de filas ha de asumir el s¨®lo la responsabilidad, lo viviremos en Eurotour Cycling como en la vida misma.
Una vez m¨¢s en el lado negativo, hay que hacer constar que la inteligencia artificial de los equipos rivales deja un tanto que desear. No es normal ver a Armstrong (Ermstrung, m¨¢s concretamente) protagonizar una escapada de 150 kil¨®metros en la segunda etapa del Tour para ser atrapado al final, y salir en la siguiente con el sesenta por ciento de energ¨ªa tras tama?o desgaste. Tampoco es explicable que ataque un hombre fuerte de la carrera y nadie reaccione hasta los ¨²ltimos kil¨®metros si no lo hacemos nosotros.
En definitiva, y poniendo en la balanza lo bueno y lo malo, Eurotour Cycling es un juego imprescindible para los aficionados a este deporte, siempre y cuando no sean demasiado puristas e intransigentes con los fallos que aqu¨ª encontrar¨¢n. Los menos aficionados al ciclismo pueden encontrar algo nuevo y fresco en este t¨ªtulo, se lo pueden tomar como un juego de estrategia en tiempo real, con unos par¨¢metros muy particulares.
Los corredores est¨¢n perfectamente dise?ados, con sus trajes de equipo claramente distinguibles y con ligeras diferencias de cabello, como en el caso de Pantani (quer¨ªa decir Penteno), que aparece con su t¨ªpica cabeza pelada. Se pueden ver distintas inclinaciones sobre el manillar dependiendo de la velocidad y el declive del terreno. No obstante, se echan de menos animaciones a?adidas, entre las que estar¨ªa el ganador levantando los brazos al concluir una etapa o el escapado mirando hacia atr¨¢s para comprobar si se acercan perseguidores.
Tambi¨¦n resulta frustrante que, al movernos entre grupos, la c¨¢mara aparezca en la cola de los mismos, cuando las cosas se suelen cocer en cabeza. Una vez m¨¢s, hay tiempo de sobra para arrastrar la c¨¢mara y ponerla donde deseamos.
Si tenemos un equipo potente con un l¨ªder importante, habr¨¢ que arropar al mismo con equilibrio entre rodadores y escaladores, asign¨¢ndolos como gregarios, pero desconect¨¢ndoles de tal rol cuando no est¨¦n en sus terrenos respectivos puesto que sufrir¨ªan un desgaste innecesario.
Si s¨®lo aspiramos a ganar etapas habr¨¢ que lanzar ataques en llano con los rodadores y en las rampas duras con los escaladores, procurando entrar siempre con alguien en las escapadas que se produzcan por si alguna es la definitiva.
Si tenemos un sprinter habr¨¢ que controlar la carrera en las etapas llanas, para que no haya escapadas y nuestro hombre r¨¢pido tenga opciones de disputar la victoria mano a mano con sus iguales.
En todos los casos hay que reservar fuerzas mientras sea posible, distribuir cuidadosamente los limitados bidones de comida y no dar ni una pedalada de m¨¢s cuando la carrera est¨¦ tranquila, o cuando no se nos haya perdido nada en una etapa concreta porque las circunstancias no afecten a nuestros intereses.
Las carreras menores s¨®lo hay que tom¨¢rselas como preparaci¨®n para llegar bien a las tres grandes, porque estas son las realmente divertidas, y para ganar algo de dinero con las posibles victorias.
Hay que tener cuidado de renovar el contrato a nuestros hombres importantes y fichar a otros mejores siempre que sea posible.
Windows ME, Pentium II 350, tarjeta gr¨¢fica Voodoo Banshee con 16 MB de RAM, DVD-ROM x16, tarjeta de sonido Soundblaster 128.
Resulta curioso el hecho de que, una vez instalado el juego, no hace falta mantener el CD introducido en la unidad para poder jugar.
Bueno
Cumple con las expectativas de lo que es un buen juego, tiene calidad y no presenta fallos graves, aunque le faltan elementos que podr¨ªan haberlo llevado a cotas m¨¢s altas. C¨®mpralo sin miedo.