Final Fantasy IX (PlayStation)

Y es que si algo tienen en com¨²n todos y cada uno de los juegos de esta epopeya jug¨¢til es la genialidad. Personajes dise?ados hasta el m¨¢s m¨ªnimo detalle y con una personalidad muy definida conviven en un mundo en el que pasado, presente y futuro se conjugan para configurar una realidad en la que ning¨²n detalle se escapa a la genialidad de los guionistas de Square, aut¨¦nticos responsables de la solidez de las historias contadas (y del ¨¦xito de "Final Fantasy", a mi humilde entender). Cada uno de los episodios es un fant¨¢stico cuento de hadas, cobijo de peligrosas aventuras e imposibles historias de amor que se entremezclan felizmente formando un cocktail simplemente irresistible.

Antes que nada me gustar¨ªa decir que Square mantiene un gran hermetismo con respecto a este juego. En su p¨¢gina web, y a pesar de la proximidad del lanzamiento en Jap¨®n (19 de julio), no hay ninguna informaci¨®n sobre ¨¦l, por lo que algunos de los datos que en este avance aparecen pueden no ser del todo correctos, o incluso no verse reflejados en el producto final. Una vez dicho esto, veamos qu¨¦ nos puede ofrecer el, a priori, t¨ªtulo que con m¨¢s posibilidades cuenta para hacerse con el premio de mejor juego del a?o para Playstation.

Si en "Final Fantasy VII" se utiliz¨® un look SD (Super Deformer, al estilo "Dragon Fall") y en "Final Fantasy VIII" se le dio un cariz m¨¢s realista al producto, en este "Final Fantasy IX" se ha intentado recuperar el estilo medieval que imperaba en los primeros episodios de la serie, en los que los castillos, los caballeros y la magia eran los protagonistas indiscutibles. No obstante, esto no supondr¨¢ necesariamente una revoluci¨®n en el control de nuestros personajes, pues los hechizos y los objetos encantados han sido siempre una constante en esta gran saga.

Hasta ocho caracteres principales se erigen como los protagonistas del juego. Aventureros como Zitan, un joven de 16 primaveras tan ansioso de correr aventuras como de conquistar al m¨¢ximo n¨²mero posible de damiselas. Su principal habilidad es la de robar objetos y distraer a sus enemigos. Aunque Zitan ser¨¢ el protagonista de la aventura, Vivi, un Brujo Negro muy poderoso de tan s¨®lo 7 a?os de edad, tendr¨¢ un papel trascendental en ella. Sus habilidades incluyen la capacidad de recuperar sus puntos de magia durante el combate. Por supuesto, no pod¨ªa faltar la inevitable hero¨ªna femenina que equilibrara la plantilla. La princesa Garnet, al principio altiva y ego¨ªsta, se dar¨¢ cuenta de que ser miembro de la realeza no implica ser mejor persona. Es una poderosa hechicera y puede invocar a criaturas eternas y ejecutar hechizos de magia blanca. Otros personajes, quiz¨¢ no tan carism¨¢ticos pero con un papel igual de importante en la historia son:

El dise?o de ¨¦stos y de otros muchos han corrido a cargo del genial Yoshitaka Amano, que vuelve tras un "peque?o" par¨¦ntesis en la saga, no habiendo colaborado en las dos ¨²ltimas entregas.

El mundo de Gaia, d¨®nde transcurren las aventuras de este "Final Fantasy IX", est¨¢ dividido en cuatro naciones-pa¨ªses, que no son m¨¢s que islas flotantes que contienen tanto grandes ciudades como diminutas aldeas. Como se deduce, el pasar de isla a isla ser¨ªa una tediosa labor si no fuera por las aeronaves, dragones y dem¨¢s veh¨ªculos voladores. Por lo tanto, ser¨¢ de vital importancia el agenciarnos r¨¢pidamente un medio de transporte o, en su defecto, infiltrarnos disimuladamente en una nave mercante o similar. A pesar de las pocas im¨¢genes disponibles, es l¨ªcito suponer que el sistema de movimiento ser¨¢ el mismo que en el de los dos ¨²ltimos episodios de la saga. Es decir, perspectiva cenital y libertad de movimientos en el exterior de las ciudades, mientras que cuando estemos en el interior de ellas recuperaremos el sistema de c¨¢maras que populariz¨® "Alone in the dark", recorriendo escenarios prerenderizados.

En cuanto a los combates, se han introducido unos peque?os cambios con respecto al anterior episodio, aunque no son in¨¦ditos. Por ejemplo, y al igual que en la aventura de Cloud y Tifa, se ha habilitado una barra de "L¨ªmite", que se ir¨¢ incrementando a medida que los enemigos se ensa?en con nosotros. Una vez que est¨¦ llena del todo, seremos capaces de realizar ataques y ejecutar conjuros muy poderosos. Otro "cambio" es la recuperaci¨®n de las orbes, esas raras esferas que permit¨ªan convertir a nuestras armas en objetos m¨¢gicos. Su funci¨®n es parecida, pero ahora, si conseguimos muchos puntos de experiencia y las cargamos al m¨¢ximo, en vez de crearse otra orbe (como en "Final Fantasy VII") conseguiremos que nuestro personaje disponga de esas habilidades de forma intr¨ªnseca: es decir, aunque se vea desprovisto de esa orbe, continuar¨¢ disponiendo de los poderes que ella le proporciona. Todo sea por incorporar nuevos alicientes a la aventura.

Hablando de alicientes, estar¨¦is de acuerdo conmigo en que uno de los principales aciertos de Square es el de no limitar la aventura a "La Aventura" en s¨ª misma. Es decir, que aparte de los objetivos prefijados hay otros extras que contribuyen a aumentar la vida del juego. Por ejemplo, en "Final Fantasy VII" estaba Gold Saucer y las carreras de Chocobo. En el octavo cap¨ªtulo encontremos un apasionante (y adictivo :) ) juego de cartas que nos permit¨ªa interactuar con casi cualquier habitante de Gaia. A pesar de que no ha trascendido el que en ¨¦ste "Final Fantasy IX" aparecer¨¢, s¨ª se ha confirmado que los Chocobos seguir¨¢n siendo parte fundamental en ¨¦l. Para los reci¨¦n llegados a esto de "Final Fantasy", los Chocobos son una especie de avestruz con cara de pato que viven en el universo de Squaresoft (!hasta tienen un juego de karts y un RPG para ellos solos!). Hay muchas especies, y cada una de ellas, adem¨¢s de ser de diferente color, tiene caracter¨ªsticas que las hace ¨²nicas. Vamos, como los Yoshis pero con pelo :).

Otro acierto, a mi entender, por parte de los programadores de Squaresoft, ha sido la inclusi¨®n de un "Detector de eventos". ?Cu¨¢ntas veces nos ha pasado el leer en una revista que en un sitio concreto hay un objeto especial pero no hemos sido capaces de localizarlo? No problemo. Ahora, con el "Real Time Event Detector" (Detector de eventos en tiempo real), y siempre que estemos cerca de un lugar o persona con la que si interactuamos puede pasar algo "especial", aparecer¨¢ en pantalla un s¨ªmbolo que nos avisar¨¢ de ello.

?Y cu¨¢l ser¨¢ el argumento del juego? Si en "Final Fantasy VII" ¨¦ramos unos terroristas que combat¨ªan contra una s¨²per-empresa, y en "Final Fantasy VIII" form¨¢bamos parte de la ¨¦lite de los mercenarios, en el ¨²ltimo episodio de la saga deberemos tomar parte en un conflicto multinacional. La reina Bahne, madre de Garnet y gobernanta del pa¨ªs de Alexandr¨ªa, ha comenzado a atacar injustificadamente a peque?os pueblos. El rey Cid, del vecino reino de Lindblum, hogar de Zitan, decide tomar cartas en el asunto y env¨ªa a un grupo de mercenarios para que secuestren a Garnet y as¨ª forzar a su madre que detenga sus fechor¨ªas. Pero Garnet, que tampoco entiende porqu¨¦ su madre act¨²a de la forma en la que lo est¨¢ haciendo, se une a Zitan para intentar descubrir qu¨¦ hay detr¨¢s de sus actos. ?Qu¨¦ os parece? Se nota que los guionistas de Square no descansan ni un momento...

La maravillosa saga de Square no pod¨ªa haber encontrado mejor forma de despedirse de nuestras PSX. Ahora solamente queda esperar a que salga a la venta y as¨ª poder vivir esos m¨¢gicos momentos que tan solo unos pocos juegos pueden proporcionarnos. La sensaci¨®n de libertad, de controlar nuestro destino, las historias paralelas, los innumerables objetos y armaduras, los hechizos, las magias, etc... son las se?as de una saga que se ha ganado por derecho propio un rinc¨®n en el Hall of Fame, lugar d¨®nde solo los aut¨¦nticos n¨²meros uno pueden estar. Y es que este "Final Fantasy IX" es uno de ellos: que no os quepa duda. Una curiosidad para los seguidores incondicionales: Hironobu Sakaguchi, el productor ejecutivo del juego ha asegurado que el tema principal de ¨¦ste ser¨¢ el mismo que el de la pel¨ªcula del mismo nombre que se estrenar¨¢ en el 2001.