Ya no querr¨¢s otra cosa.

Los aficionados al mundo de los videojuegos han podido disfrutar de la aventura con tintes ecol¨®gicos que significaba Final Fantasy VII. M¨¢s tarde disfrutaron de la futurista secuela Final Fantasy VIII, y ahora, por fin, con varios meses de diferencia (como siempre) con respecto a los lanzamientos entre Jap¨®n y USA, nos llega la que ser¨¢ la ¨²ltima entrega para la peque?a consola gris de Sony: Final Fantasy IX.

La aventura que nos cuenta este Final Fantasy IX bien pudiera ser descrita como una peque?a-gran historia de fantas¨ªa creada por la mente inquieta del m¨¢s prol¨ªfico de los creadores de cuentos.

Este cuento de hadas, esta aventura medieval, esta "odisea" fant¨¢stica, esta m¨¢gica historia que nos absorbe y nos atrapa, haci¨¦ndonos pasar horas y horas frente al monitor, en contra de lo que las normas de salud aconsejan, entona su particular "canto del cisne" para dejarnos solos con un simple hasta luego, que no es m¨¢s que un hasta la vista... en PS2.

Hironobu Sakaguchi cierra el ciclo Final Fantasy para PSOne con una obra maestra (no nos cansaremos de repetirlo), manteniendo las formas, eso s¨ª. Todo aquel que haya jugado a cualquiera de los Final Fantasy anteriores tendr¨¢ claros los conceptos b¨¢sicos de este juego. Los movimientos, las batallas, los componentes RPG, incluso la mayor¨ªa de los Efectos especiales de sonido, todo sigue como estaba. Entonces, ?d¨®nde est¨¢n las novedades?

Aparte de un nuevo argumento y la recuperaci¨®n de alguna caracter¨ªstica de los Final Fantasy anteriores al VII, casi todas las novedades se centran en la historia (aunque recupere tipos de personajes del pasado), en un apartado gr¨¢fico sencillamente deslumbrante, en una banda sonora de lujo y en una partida superior a las 50 horas de juego.

El nivel gr¨¢fico alcanzado por el juego es sencillamente genial. 4 CDs en los que Square no deja de sorprendernos ni un momento, con una imaginaci¨®n asombrosa que deja a su paso unos decorados dignos del mejor cuento de hadas jam¨¢s imaginado, unos personajes de lo m¨¢s variopinto, que se mueven con una soltura y rapidez que nunca antes se hab¨ªa visto en la saga.

El retorno de Yoshitaka Amano, un hombre que ha cultivado los campos del c¨®mic, del cine y del videojuego, tras no haber participado en las dos entregas anteriores (la 7 y la 8) se ha hecho notar. Su estilo ha quedado plasmado en otros t¨ªtulos legendarios de la PSOne (Front Mission, Gun Hazard...) y por supuesto en los 6 primeros Final Fantasy.

En este Final Fantasy IX su trabajo es impresionante, fabuloso, digno de encomio, mostr¨¢ndose un tanto tradicional al volver a contar con unos personajes con est¨¦tica "superdeformed" pero con muchos m¨¢s pol¨ªgonos en su composici¨®n, mucho m¨¢s detalle en sus rostros (excepto Vivi ;)) y en sus ropas y con unos movimientos m¨¢s r¨¢pidos.

Pero en este apartado tambi¨¦n ha tenido mucho que ver el saber hacer de Shukon Murase y Toshiyuki Hahana, responsables del dise?o de personajes, as¨ª como Hiroshi Arai y Tomohiro Kayano, encargados del modelado de los mismos.

En lo dem¨¢s casi todo sigue igual, es decir, los decorados y localizaciones son prerrenderizados con infinidad de fant¨¢sticos colores que le otorgan al juego una aspecto de sue?o m¨¢gico, de cuento ¨¦pico cuyos escenarios abarcan desde bosques malditos, hasta gigantescas ciudades en la cima de las monta?as, pasando por templos tenebrosos, grutas l¨²gubres o peligrosos volcanes.

La arquitectura es diferente en cada reino y va desde los decorados medievales de Alexandria, hasta las mugrientas minas del este, pasando por los h¨²medos pantanos de los Qu, o el enigm¨¢tico ¨¢rbol de Tifa, el estilo cl¨¢sico de Treno, la majestuosidad de Linddlum, los g¨¦lidos decorados de la Cueva de Hielo, o la devastada Gizamaluke's Grotto (un reino siempre bajo la lluvia).

El sumun de esta org¨ªa de la vista es el planeta Terra, en el cual la imaginaci¨®n se desborda y fluye para dejar tras de s¨ª un paraje de ciencia-ficci¨®n de esos que s¨®lo est¨¢n al alcance de ciertos escritores visionarios el poder imagin¨¢rlos.

Durante las batallas las magias han perdido grandilocuencia pero han ganado en belleza. Si antes cada hechizo se caracterizaba por lo enorme de sus luces y sus colores, ahora nos encontramos con hechizos de efectos m¨¢s peque?os pero mucho m¨¢s bellos, m¨¢s suaves y mucho m¨¢s agradables a la vista.

Menci¨®n aparte para las FMV. (Lo que viene a continuaci¨®n deber¨ªa ir en may¨²sculas) Nunca antes hemos visto animaciones FMV como los que se llegan a ver durante el juego. Por su calidad, por su suavidad, por su perfecci¨®n, por el tratamiento dram¨¢tico de la situaci¨®n de las c¨¢maras, por eso y muchas cosas m¨¢s... ?gracias Square!. No pretendemos llenar este an¨¢lisis de spoilers, pero al final del segundo CD se pueden ver dos de los FMV m¨¢s impresionantes jamas vistos en PSOne. Palabra. Y sin m¨¢s dejamos que se¨¢is vosotros os que juzgu¨¦is, pero os avisamos que s¨®lo con el v¨ªdeo de presentaci¨®n ya se puede empezar a caer la baba. As¨ª que no teng¨¢is prisa por jugar (ya que apretando X se puede saltar el mismo) y gastaros un par de minutos en verlo. Merece la pena.

El paso de los a?os, la mejora de las t¨¦cnicas de dise?o gr¨¢fico, el retorno de Yoshitaka Amano a la saga y el regreso a los or¨ªgenes de la saga (magos y espadas) nos deja sin lugar a dudas, el mejor apartado gr¨¢fico de la saga. Y para ello ha tenido que llevar la PSOne hasta el l¨ªmite.

Nobuo Uematsu es el encargado de las partituras de una banda sonora que viene a redondear un juego perfecto. La dulzura de sus melod¨ªas ajust¨¢ndose como guantes a las distintas situaciones y fases del juego, con diferentes estilos seg¨²n lo que estemos presentando, es algo que pocos juegos tienen a su alcance.

La calidad del sonido es de lo mejor que se ha visto en PSOne en mucho tiempo, y sobre todo nos sorprende la variedad de los estilos que se dan cita en las canciones: m¨²sica de circo, piezas de c¨¢mara, guitarras espa?olas, tenebrosas melod¨ªas tocadas con ¨®rganos de tubos, m¨²sicas de caracter medieval, solos de piano, pero sobre todo el tema central, una canci¨®n que surge de los labios de la protagonista y que sin duda m¨¢s de uno acabar¨¢ silbando por la calle sin darse cuenta, atrapado en la m¨¢gica candidez de sus notas y en la dulzura de su melod¨ªa.

No faltan las cl¨¢sicas musiquillas t¨ªpicas de la saga Final Fantasy, como las que acompa?an a los combates o las que suenan cuando viajamos por el mapa. Sin embargo si ha cambiado la que suena cuando nos subimos a lomos de un Chocobo; en esta ocasi¨®n la musiquilla es mucho m¨¢s divertida y desenfadada.

Pero lo que acaba por convencer es la calidad de sonido que tiene este Final Fantasy IX. Con esto quiero decir lo bien que suenan estas melod¨ªas en la PSOne en un monitor normal. Con estas premisas no es de extra?ar que hasta nuestras tiendas lleguen los 4 CDs que componen la Banda Sonora Original del videojuego, y que ya se est¨¢ vendiendo en otros mercados a precios tan elevados como los de cualquier estrella de la canci¨®n.

Perfecto. No tiene otra definici¨®n. Simplemente por que son los mismos sonidos de siempre de esta saga y no s¨®lo se han superado en su recreaci¨®n, sino que en este juego suenan mejor que nunca. Los golpes, las magias, los clics, los gru?idos de las fieras, los secretos localizados, los objetos que nos entregan, todo suena mejor que nunca.

Pero si algo hay que destacar son los sonidos de los elementos, en especial el del fuego y el agua. Para entrar en detalles diremos que el viento suena como siempre, sin m¨¢s. Pero el fuego y el agua suenan con una perfecci¨®n asombrosa, cercana a lo real. Las hogueras, los r¨ªos, los fuegos, la lluvia... Todo lo que tenga que ver con estos dos elementos (fuego y agua) ha tenido una realizaci¨®n incre¨ªble, que te llevar¨¢ a preguntarte si ese fuego que suena no es en tu habitaci¨®n o ese riachuelo no est¨¢ pasando por tu casa. Lo dicho, real como la vida misma.

  J  u  g  a  b  i  l  i  d  a  d

La jugabilidad no ha variado ni un s¨®lo ¨¢pice. Sigue igual de gratificante. Los que hayan jugado a los dos ¨²ltimos t¨ªtulos de la saga se sorprender¨¢n de no encontrarse un juego tan largo como los anteriores. Y es que en esta ocasi¨®n los muchachos de Square nos deparan un juego un poco m¨¢s corto en su entramado principal. Unas 50 horas nos puede llevar tranquilamente el llegar hasta el final del tercer CD. Eso s¨ª, despacito y con buena letra. Es partir del cuarto cuando podemos decidirnos entre seguir la senda marcada y acceder a la confrontaci¨®n final (una larga cadena de combates) o bien dedicarnos a ganar m¨¢s experiencia y poderes accediendo a las distintas misiones paralelas que podemos acometer en el juego. En nuestras manos est¨¢ decidirnos por uno o por otro ya que no hay un l¨ªmite de tiempo establecido para acabarse el juego.

El malo de la pel¨ªcula en esta ocasi¨®n es Kujah, un personaje tan misterioso como malvado del que no conoceremos muchos detalles hasta el tercer CD. Se nos antoja como uno de los jefes m¨¢s poderosos que esta saga ha conocido y su maldad y poder dejar¨ªa temblando a los de los malos de las anteriores entregas de la saga (dentro de un hipot¨¦tico encuentro, claro est¨¢).

Las ya tradicionales batallas por turnos siguen como estaban, salvo por la excepci¨®n de la inclusi¨®n del estado de TRANCE. Un estado al que nuestros personajes acceden tras haber rellenado una barra de estado en la que se ha ido acumulando los da?os recibidos por los ataques, y gracias al cual nuestros ataques son m¨¢s poderosos, los magos pueden hacer doble uso por turno de sus magias, etc.

A partir de cierto punto de la historia estas batallas se ven adornadas por poderosas invocaciones de entes de otra dimensi¨®n. En nuestra ayuda acuden personajes ya familiares para nosotros como son Shiva, Ramuh, Leviathan o incluso el mism¨ªsimo Od¨ªn, que abandonan su tranquila existencia para arrojar sus poderes contra nuestros enemigos.

Las batallas han sido dise?adas por Yasushi Kurosawa y han sido programadas por Takayuki Niwa.

Se incorpora tambi¨¦n al juego el Active Time Event, un sistema de visionado de acciones de terceros personajes que presenta escenas importantes para la historia pero que se est¨¢n produciendo en otro lugar distinto al de nuestros personajes. No es un sistema muy interactivo, ya que s¨®lo podremos escoger entre entrar y verlo o no entrar y no ver "na de na". Pero lo recomendable es lo primero ya que estos eventos tienen una fuerte conexi¨®n con el hilo argumental y no est¨¢n puestas por capricho.

Para grabar todos nuestros avances, Square ha rescatado de Final Fantasy VI a la entra?able raza de los Moglis (Kupo!), que de nuevo nos ayudar¨¢n en esta misi¨®n. Los Moglis son unos seres rosados con alas, peque?itos, con una extra?a forma de cerditos, que son los encargados de grabar nuestros progresos en el libro gordo de los Moglis. Otra de sus caracter¨ªsticas es la de permitirnos pernoctar en sus peque?as tiendas de campa?a transportables, con el fin de levantarnos restaurados en salud y magia la ma?ana siguiente. Algunos de ellos tambi¨¦n posee la funci¨®n de compra/venta de material, pero estos son escasos a lo largo del juego y s¨®lo aparecen en momentos puntuales. Una ¨²ltima cualidad es la de usar las cartas para comunicarse entre ellos. Cartas postales se entiende, y los carteros encargados de tal reparto no son otros que nuestros personajes. Un sonido caracter¨ªstico nos advierte de su presencia en aquellas pantallas en las que entremos y se encuentre tambi¨¦n uno (o varios) de ellos.

Aparte de la historia, el juego tiene multitud de juegos paralelos a ¨¦sta, que hacen que relajemos un poco las tensiones de peleas, carreras y persecuciones. Juegos en los que siempre obtendremos alg¨²n premio como ¨ªtems, armas o cartas. Si, has le¨ªdo bien, cartas. Otra vez aparece un juego de cartas, como ya lo hiciera en el FFVIII, pero esta vez m¨¢s sofisticado, complicado y dif¨ªcil que el anterior, algo que nos lleva a tomarnos el minijuego con mucha calma. La dificultad se ha multiplicado por cuatro y las posibilidades de "hacernos con todas" pasan por un buen n¨²mero de horas practicando y yendo de partida en partida.

Tambi¨¦n podremos demostrar nuestra pericia saltando a la comba, o durante la representaci¨®n teatral del principio siguiendo la coreograf¨ªa de una pelea con espadas, o cazando ranas, o con juegos de encontrar la bolita pero con personas, participar en una cacer¨ªa de monstruos, etc.

El minijuego que esta vez nos deparan los Chocobos es una especie de "en busca del tesoro" en el cual tenemos que encontrar unos cofres con varios tesoros que est¨¢n repartidos por todo el mapa del mundo. Para saber la localizaci¨®n aproximada de estos tesoros primeramente tenemos que encontrar unas piedras en las que est¨¢ dibujada el ¨¢rea en la que se encuentra el tesoro. Estas piedras s¨®lo las podemos encontrar en el bosque Chocobo, y una vez encontradas las seleccionamos para buscar el tesoro cuya situaci¨®n indican.

Guerras entre reinos, viajes a mundos paralelos, ¨¢rboles sagrados, secuestros inesperados, legiones de magos oscuros, espejos m¨¢gicos, piedras preciosas con poderes de invocaci¨®n, alucinantes escenas de FMV, fren¨¦ticas huidas, batallas colosales, ins¨®litos parajes... e incluso Teatro!.

No lo dejes escapar, no te decepcionar¨¢. Es m¨¢s, puede que no te sientas del todo bien si tus amigos lo juegan y t¨² no. Se podr¨ªa decir que es obligatorio tenerlo, que no ser¨¢s nadie en este mundillo de jugones si no tienes tu Final Fantasy 9. La obra maestra de Square en el momento de la despedida de la saga en PSOne.

El mejor juego de ROL de la historia de PSOne se convertir¨¢ en el cuento m¨¢s maravilloso que se haya jugado nunca, la aventura m¨¢s apasionante, el viaje m¨¢s bello jam¨¢s narrado en una consola.

Dispuesto a arrasar en las listas de ventas, a situarse en el n¨²mero uno y no bajarse en unos meses, "s¨®lo nos queda ponernos de pie y aplaudir" una obra maestra que ha sido posible gracias a la trayectoria art¨ªstica de Square, a su af¨¢n de perfeccionamiento, a los talentosos componentes del equipo al que se le encarg¨® el proyecto, y a una historia como las de antes, con buenos y malos, princesas y "donnadies", guerra y paz, traiciones y amistad, pero sobre todo Fantas¨ªa, mucha Fantas¨ªa. A fin de cuentas, en PSOne, estamos hablando de la Fantas¨ªa Final.