Tom Clancy's Rainbow Six
Disfruta de este cl¨¢sico en la port¨¢til
Con los buenos augurios que suponen versiones de ensue?o en todas las plataformas por haber, Ubi Soft y Crawfish se aventuran en versionar a los 8 Bits las m¨¢s de mil p¨¢ginas de literatura miliciana de Tom Clancy, Rainbow Six.
Con los buenos augurios que suponen versiones de ensue?o en todas las plataformas por haber, Ubi Soft y Crawfish se aventuran en versionar a los 8 Bits las m¨¢s de mil p¨¢ginas de literatura miliciana de Tom Clancy, Rainbow Six.
M¨¢s sigiloso que Goldeneye, m¨¢s tenso que Turok, y m¨¢s lento que Metal Gear. Una f¨®rmula que parece haber cuajado como nadie entre millones de usuarios de PC, Nintendo 64, Playstation y Dreamcast, pero que cuenta con un vendabal en contra al probar fortuna en Game Boy Color, y es que el cartucho basado en el best-seller de Tom Clancy nunca se ide¨® para los jugadores con af¨¢n de violencia. Aquellos que buscan ir a lo seguro, sin rodeos, sin pretextos, y sin pre¨¢mbulos, no quedan englobados en el mercado potencial de la obra de Red Storm
Y est¨¢ claro que una consola port¨¢til no es precisamente un elemento de apoyo. La gracia de este tipo de juegos, entre los que se pueden incluir la obra maestra de Kojima o la serie SWAT, es sentarse tranquilamente delante del monitor y echarle una ojeada a todos los pertrechos que puedes ir colocando minuciosamente en su lugar adecuado. Es bastante inc¨®modo agachar la cabeza y definir tus cuerpos, el armamente que llevar¨¢s para la misi¨®n, que tipo de hombres quieres, o que tipo de funci¨®n les encomendar¨¢s para el momento de la verdad. Sin embargo, esta anomal¨ªa puede que se acreciente en plena misi¨®n.
Una respuesta lenta de todos los hombres, y el hecho de estar obligado a recurrir continuamente al men¨² de pausado para alternar controles, confina aun m¨¢s el estereotipo adecuado de usuario.
Con esto no queremos decir que sea un juego complicado sobre el papel, sino que requiere de su tiempo. Necesita que le dediques mucho ¨¦nfasis en aprenderte de memoria para que sirve cada elemento, detalle o arma, que significa ese texto, o saber los movimientos exactos que se ven plasmados en el diagrama del comienzo.
Sabiendo ya los mil y un filtro de que dispone, seguro que puedes sacarle mucho jugo. Y es que viene a conquistar el complicado mercado port¨¢til que excepcionalmente ha visto como una producci¨®n procedente de una dom¨¦stica ha sabido entender este mundo tan complicado.
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Evidentemente no tiene nada que ver a otras versiones de RS. Dejando de lado la perspectiva en primera persona, Ubi se ha centrado en una c¨¢mara cenital en el que se pueda tener al abasto un amplio campo de visi¨®n, incluyendo los interiores de cada edificio.
Los personajes tambi¨¦n sufren las consecuencias del limitado hard de la consola de Nintendo. Hombres peque?os y dentados en cualquiera de sus expresiones, y enemigos repetitivos que se repiten hasta la saciedad en todas las pantallas.
En el mismo plano se mover¨ªan los escenarios, donde incluso parece que est¨¦n cubiertas de una espesa capa de niebla por lo insulsos que resultan, en el que tambi¨¦n pecan por la poca utilizaci¨®n de la paleta de colores, y por alguna que otra confusi¨®n creada por puertas imperceptibles y escaleras entre las que no se difieren los diferentes campos de visi¨®n. La sombra de Metal Gear o Perfect Dark, que utilizan irrevocablemente la misma est¨¦tica, son con muchas creces, superiores a la nueva incursi¨®n de la novela de Tom Clancy en el mundo de los videojuegos.
m ¨² s i c a
Sobresaliendo descaradamente del conjunto en general, las partituras tensas y din¨¢micas de la que dispone la versi¨®n color de Rainbow Six son un aut¨¦ntico regalo a nuestros o¨ªdos. Avezados a sentir como temas desconcertantes hab¨ªan sido introducidos en un estilo de juego que no les pega para nada, los desarrolladores de Red Storm se las han arreglado para remasterizar gran parte de las melod¨ªas de la serie adapt¨¢ndolas a formato MIDI para la ocasi¨®n. Si la nota no alcanza el sobresaliente es porque hay poca variedad teniendo en cuenta el n¨²mero de fases que hay, y sobretodo porque algunas de ellas est¨¢n compuestas por estridencias que intena hacer de acompa?amiento.
s o n i d o f x
Obviamente es dif¨ªcil codificar a la port¨¢til voces digitalizadas y di¨¢logos completos sin exprimir al m¨¢ximo un cartucho, y aun as¨ª, apenas se contabilizan m¨¢s de 20 minutos hablados. Por extensi¨®n, si nunca has jugado a otra de sus encarnaciones, no echar¨¢s en falta tanta indicaci¨®n via oral.
Tampoco han escatimado en reproducir diferentes tipos de disparos, pasos sobre infinidad de superficies, o irreales gritos recreando la muerte de alguno de los mil hombres que vas a encontrar en tu periplo. Con todo, el resultado m¨¢s que correcto no llegar¨¢ a saciar a todos aquellos que ya hayan catado los encantos de otro t¨ªtulo de acci¨®n.
j u g a b i l i d a d
El sistema ha pasado de ser un estipulo mediante la utilizaci¨®n del rat¨®n y las funciones m¨¢s b¨¢sicas del teclado, a ocupar por completo un control pad de toda consola. Entonces, la inc¨®gnita de saber si es posible llevar a cabo todas las instrucciones con "A" y "B" de la peque?a consola no es m¨¢s que un contratiempo solucionado de forma un tanto dudosa. En lugar de ordenar a tus caterva y ver como se desarrollan sus progresos de forma autom¨¢tico, incluso alcanzando objetivos por su propio pie, se alentece de forma estrepitosa obligandonos a controlarlo absolutamente todo; y en este grupo tan global se incluyen los movimientos de los 8 miembros del equipo, aspecto que por supuesto frustrar¨¢ a los que se hayan armado de paciencia y visto como decae el ¨¢nimo cuando nos movemos a mis¨¦rrimas velocidades por decorados bastante amplios.
El salvavidas ha sido constitu¨ªdo por una interminable lista de misiones para todos los que hayan hecho la vista gorda a estos errores tan pronunciados. De todas formas, siempre hubiera venido bien un modo cooperativo para batirte contra la CPU en ayuda de un compa?ero de carne y hueso, aunque despu¨¦s de ver los resultados en otras modalidades, dudamos de si realmente hubiera valido la pena...
c o n c l u s i ¨® n
Que no te enga?e la apariencia, Rainbow Six tiene un p¨²blico mucho m¨¢s reducido que las ineludibles potestades de Metal Gear y Perfect Dark. La acci¨®n es infinitamente m¨¢s tediosa, y tanto gr¨¢ficamente, como en el apartado sonoro (el mejor del juego), salen perjudicados si se intenta reflejar con las obras de Rare y Konami.
No obstante, no hay que desenga?arse. Si eres muy paciente, es m¨¢s que probable que la pen¨²ltima producci¨®n de Red Storm te atraiga como ninguna otra, no ya por las opciones que pone a tu disposici¨®n, sino porque el juego en s¨ª es largo, lento y con una cantidad ingente de cosas por hacer. Un intento que se ha quedado a medio camino de ser lo que realmente se esperaba... una pena.
Mejorable
Puede tener elementos aceptables y entretener, pero en general es una experiencia que no dejar¨¢ huella. S¨®lo recomendable en caso de sequ¨ªa de este g¨¦nero de juegos.