Fara¨®n
- PlataformaPC8.5
- G¨¦neroSimulaci¨®n
- DesarrolladorSierra
- Lanzamiento01/01/1999
- TextoEspa?ol
- VocesEspa?ol
El constructor de pir¨¢mides.
Fara¨®n es un juego que podr¨ªamos definir como constructor de ciudades. La idea es seguir la historia de Egipto desde el periodo predin¨¢stico hasta el imperio nuevo, controlando a una familia que ir¨¢ estableciendo distintas ciudades a lo largo del Nilo.
Fara¨®n es un juego que podr¨ªamos definir como constructor de ciudades. La idea es seguir la historia de Egipto desde el periodo predin¨¢stico hasta el imperio nuevo, controlando a una familia que ir¨¢ estableciendo distintas ciudades a lo largo del Nilo.
El juego se compone de distintas misiones distribuidas en los cinco periodos de la historia de Egipto; en cada una de ellas tendremos que alcanzar unos objetivos m¨ªnimos para conseguir superar la misi¨®n, aunque siempre se nos da la posibilidad de continuar con la misma durante unos a?os m¨¢s (sobre todo para dejar la ciudad a nuestro gusto).
Como nomarcas que seremos (nomarca es el gestor de un nomos, los territorios en los que se divid¨ªa el Nilo) tendremos que organizar todos los aspectos de nuestra ciudad, que son bastantes y muy variados:
Lo primero es preparar un sitio para que viva nuestra gente, ?recalificaremos' terrenos para que nuestros habitantes construyan all¨ª sus casas y haremos caminos para que puedan desplazarse entre las distintas dependencias de la ciudad.
Tendremos que construir una estructura de producci¨®n y distribuci¨®n de alimentos; en cada misi¨®n el terreno es distinto, as¨ª que en unas podremos aprovechar las crecidas del Nilo para construir granjas en los terrenos aluviales, en otras podremos construir granjas (y sus sistemas de riego) en las praderas o en otras tendremos que dedicarnos a la caza del avestruz o a la pesca en el Nilo (o a varias de estas cosas a la vez). Por supuesto que deberemos construir graneros, almacenes y bazares para distribuir los alimentos a nuestra poblaci¨®n.
Otra de las partes fundamentales es conseguir agua potable. El terreno de las orillas del Nilo es muy rico en agua, pero gran parte del territorio en el que nos movemos ser¨¢ des¨¦rtico. Una buena planificaci¨®n de los sistemas de suministro de agua es muy importante para que nuestros habitantes puedan vivir en la ciudad.
Tambi¨¦n debemos preocuparnos de conseguir materias primas y manufacturadas. En todos los escenarios podremos producir algo (arcilla, piedra, granito, oro, cobre, piedras preciosas, ca?a de papiro, etc.) y luego deberemos transformarlo en material ¨²til para nuestra poblaci¨®n (ladrillos, cer¨¢mica, papiros, fibra de lino, joyas ... ) Esto proporcionar¨¢ otra fuente de trabajo para nuestros habitantes (y una fuente de ingresos para nuestra ciudad)
La Religi¨®n en Egipto era el verdadero poder, y sus dioses estaban presentes en todos los aspectos de sus dos vidas (la de los vivos y la de los muertos), as¨ª que tendremos que preocuparnos tambi¨¦n de agradar a los dioses protectores de nuestra ciudad, que variar¨¢n tambi¨¦n seg¨²n el tipo de misi¨®n. Tendremos que honrar principalmente a Osiris, Ra, Ptah, Seth y Bastet. Tambi¨¦n hay algunos otros dioses a los que podremos dedicar parte de nuestros templos (Sebek, Min, Maat, Horus, Am¨®n, Tot, Anubis, Isis, Hator y Sejmet). En este aspecto debemos construir templos y santuarios para nuestros sacerdotes y una plaza de fiestas para montar buenas juergas de vez en cuando y tener a nuestros dioses protectores contentos y tranquilos. En otras misiones podremos construir complejos de templos a algunos dioses que podremos rellenar con altares y or¨¢culos a los dioses menores.
Como no todo va a ser trabajar, deberemos proporcionar espect¨¢culos a nuestros habitantes. En los cruces entre las calles podemos construir quioscos para malabaristas, quioscos para orquestas y pabellones para bailarines. Algunas veces podremos construir los locales de Senet, tambi¨¦n conocidos en nuestra ¨¦poca como baretos o tascas (el Senet es un juego de tablero practicado por los antiguos egipcios). Como es l¨®gico deberemos construir tambi¨¦n escuelas de malabaristas, de danzarines y conservatorios.
En cuanto al transporte, a¨²n no se hab¨ªa inventado el transporte p¨²blico por carretera, aunque s¨ª por el r¨ªo. Para cruzar el Nilo debemos construir transbordadores en las zonas rectas de la orilla, aunque en tramos muy estrechos podemos hacer puentes.
Como ya he dicho, no en todas las misiones hay de todo, as¨ª que tendremos que comerciar con otras ciudades para conseguir lo que necesitemos. Tenemos las opciones de importar y exportar distintas mercanc¨ªas, por tierra o por el r¨ªo, para lo cual deberemos construir muelles de carga y establecer rutas comerciales con las otras ciudades de Egipto.
La educaci¨®n es importante cuando nuestra ciudad empieza a crecer. Hay dos estructuras educativas: la escuela de escribas y la biblioteca. Pero tenemos que tener en cuenta que necesitaremos la industria del papiro para ellas.
Tendremos que tener en cuenta la moral de nuestros ciudadanos; ellos esperan tener comida (de distintos tipos), trabajo y pagar pocos impuestos. Las noticias se extienden r¨¢pido por Egipto, as¨ª que una buena moral ciudadana ayuda a que vengan m¨¢s inmigrantes (trabajadores y contribuyentes) a nuestra ciudad. Tambi¨¦n existen distintos tipos de zonas en nuestra ciudad, donde la gente quiera vivir (lo que se nota en el tama?o y aspecto de las casas) y donde no quiere (habitualmente cerca de las industrias). Para mejorar la moral ciudadana deberemos mantener alimentada y trabajando a la poblaci¨®n, pag¨¢ndoles un salario justo y cobrando pocos impuestos. Influyen mucho tambi¨¦n los adornos en forma de estatuas y plazas y los jardines que vayamos creando dentro de nuestra ciudad.
Para mantener todo esto hace falta dinero, mucho dinero. La gesti¨®n del tesoro de nuestra ciudad tambi¨¦n est¨¢ en nuestras manos; debemos construir el palacio del pueblo (el ayuntamiento) y oficinas de recaudaci¨®n de impuestos repartidas por la ciudad. Tambi¨¦n podremos construir nuestra casa para cobrar un sueldo y as¨ª enriquecer a nuestra familia. (Realmente nuestro sueldo lo gastaremos casi todo en regalos al fara¨®n y a la ciudad, as¨ª que nos vamos a enriquecer poco)
Relaciones con el fara¨®n y otras ciudades: No estamos solos en el Nilo, y tenemos que recordar que no somos m¨¢s que enviados del Fara¨®n. ?ste nos har¨¢ llegar peticiones de vez en cuando que debemos atender si no queremos ver bajar nuestra puntuaci¨®n hasta niveles peligrosos. En el caso en que el Fara¨®n se enfade con nosotros mandar¨¢ a su ej¨¦rcito sobre nuestra ciudad y s¨®lo nos quedar¨¢ volver a empezar con nuestra misi¨®n.
Las otras ciudades y nacionalidades de la zona tambi¨¦n tienen relaciones con nosotros, en algunos casos comerciales y en otros menos amistosas. Puede que nos llegue una petici¨®n de ayuda de otra ciudad (ayuda material principalmente) o puede que nos invada el ej¨¦rcito de otra nacionalidad, as¨ª que tendremos que estar preparados. De todas formas Fara¨®n no es un juego militar, as¨ª que no tendremos que preocuparnos mucho, ya que ni siquiera podremos atacar a las zonas vecinas.
Podremos (y en algunos casos deberemos hacerlo obligatoriamente) formar a nuestros ej¨¦rcitos de tierra con dos tipos de unidades: arqueros e infanter¨ªa y de agua, con barcos de guerra y barcos de transporte para las tropas. Esto implica crear la industria del armamento y la de los barcos, la del cobre y la de la madera (o comerciar con estos materiales).
La gesti¨®n de las tropas es sencilla, pero no trivial; tendremos varias opciones de formaci¨®n para nuestras tropas y nuestros barcos y debemos elegir cu¨¢l ser¨¢ la m¨¢s adecuada en cada tipo de ataque que suframos. Tambi¨¦n tendremos la opci¨®n en alguna de las misiones de construir defensas para nuestra ciudad (muros, torres y portones)
Para sostener todo esto necesitamos una amplia red de estructuras municipales y sanitarias; aqu¨ª debemos incluir a los bomberos, arquitectos, polic¨ªas, jueces, m¨¦dicos, dentistas, farmac¨¦uticos, y embalsamadores que debemos repartir por toda nuestra ciudad para cubrir todas las zonas posibles. Lo m¨¢s peligroso son los incendios, que se extienden por las manzanas de edificios destroz¨¢ndolo todo a su paso y las enfermedades y epidemias, que pueden diezmar a nuestra poblaci¨®n.
Habitualmente los objetivos de cada una de las misiones se basan en conseguir una serie de puntuaciones m¨ªnimas en cuatro niveles distintos: Imperio, Cultura, Prosperidad y Monumentos, adem¨¢s deberemos alcanzar una poblaci¨®n determinada. Para ayudarnos en todo esto tenemos una serie de asesores a los que podemos acudir en cualquier momento y que nos dan informaci¨®n detallada sobre todos los aspectos de los que antes hemos hablado, adem¨¢s de proponernos soluciones a algunos de los problemas.
Opini¨®n personal
Despu¨¦s de todo esto parece un juego muy complicado, dif¨ªcil y ?aburrido?. Pues nada de eso. El nivel de dificultad de las misiones est¨¢ perfectamente ajustado, principalmente limitando las posibilidades del juego, de forma que no tendremos que preocuparnos de todo esto a la vez. Las primeras misiones del juego van a ir introduciendo todos estos conceptos poco a poco hasta que acabas domin¨¢ndolos sin problemas.
La verdad es que s¨ª es complejo, pero no lo parece mientras juegas (yo no me hab¨ªa dado cuenta de la complejidad del juego hasta que no he escrito esto). El juego se hace ¨¢gil y se pasan las horas delante del ordenador construyendo, comerciando y arreglando los problemillas de la ciudad.
Por otra parte la cantidad de niveles del juego no es inmensa, pero s¨ª suficiente. Sobre todo si tenemos en cuenta que las misiones complejas necesitan varias horas de juego. Existen una serie de misiones no integradas en la historia del juego que nos van a permitir tocar otros aspectos, como las guerras o simplemente la construcci¨®n de una ciudad a nuestro gusto, como si fuera Sim City 3000 (ac).
Muy Bueno
Juego de notable acabado que disfrutaremos y recordaremos. Una buena compra, muy recomendable para amantes del g¨¦nero. Est¨¢ bien cuidado a todos los niveles. C¨®mpralo.