Los irreductibles galos vuelven a la port¨¢til de Nintendo

C¨¦sar se ha cansado de los irreductibles galos y de su irreductible conducta que ha optado por sitiar su irreductible poblado con una gran -?e irreductible?- empalizada de varios metros de alto, conteniendo -irreductiblemente- a los sitiados galos... pero Ast¨¦rix, haciendo gala de la astucia que le caracteriza, ha osado lanzar un desaf¨ªo a C¨¦sar; si ¨¦l y Obelix consiguen un recuerdo de cada pa¨ªs del imperio romano, C¨¦sar retirar¨¢ la empalizada y se olvidar¨¢ del poblado galo...C¨¦sar ha recogido el desaf¨ªo, pero por todos los medios impedir¨¢ que nuestros h¨¦roes consigan su misi¨®n...

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Bien, pues bajo este argumento, Infogrames, compa?¨ªa -casualmente francesa- que ostenta los derechos de los dos galos m¨¢s famosos de todo el mundo, nos trae un correcto y divertido plataformas para la port¨¢til de Nintendo, teniendo, cuanto menos la osad¨ªa, de intentar hacerse hueco en un g¨¦nero tan trabajado para Game Boy como es el de las plataformas, pr¨¢cticamente monopolizado por la factor¨ªa Nintendo y sus Mario, Wario y compa?¨ªa.

Gr¨¢ficos.

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Poseen la impronta caracter¨ªstica del comic de Uderzo, tanto los sprites de las intros como los sprites de los personajes durante el juego parecen directamente extra¨ªdos de las vi?etas, y ¨¦sto no es s¨®lo para Ast¨¦rix y Ob¨¦lix, si no para todos los personajes del juego, incluidos los enemigos, donde el repertorio es casi un desfile de los personajes que hemos podido ver a lo largo del c¨®mic. Los sprites tienen un tama?o aceptable, tirando a peque?os, y eso si, un movimiento endiabladamente r¨¢pido, circunstancia de rigor para unos sprites peque?os sobre unos escenarios no demasiado complejos pero variad¨ªsimos. El color es muy bueno, apreci¨¢ndose muy bien todas las tonalidades.

M¨²sica.

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Realmente mejor de lo que me esperaba, unas melod¨ªas muy vivas y alegres que lejos de realizar la pr¨¢ctica habitual para esta consola de quitar todo el volumen, nos instan a tararearlas.

Sonido FX.

Muy limitado, ya que se reduce exclusivamente a saltos, gru?idos cuando recibimos un impacto, y sonidos t¨ªpicos cuando recogemos un ¨ªtem, lo cierto es que muy muy limitados.

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Jugabilidad.

El mejor apartado de todo el juego junto con los gr¨¢ficos, que en el fondo, es lo que le pedimos a un juego de Game Boy, que nos haga "gracia" gr¨¢ficamente y que sea capaz de mantenernos con la consola en el bolsillo todo el d¨ªa, bien pues eso en Ob¨¦lix va a pasar. Y va a pasar por la variedad y originalidad de sus fases -atentos al partido de Rugby- y por su sencillez en el desarrollo, la ¨²nica pega que podr¨ªamos achacarle es que cualquier plataformero mediamente experimentado puede machacar el juego en menos de 2 horas en el nivel medio, pero ya os advertimos que el juego est¨¢ enfocado hacia un p¨²blico m¨¢s juvenil.