Todos los aspectos t¨¦cnicos del juego merecen el calificativo de soberbios.

La inclusi¨®n desde el comienzo de Acclaim como uno de los miembros destacados del "dream team" de Nintendo, favoreci¨® la disposici¨®n del hard N64 al equipo de programadores de Iguana USA que tuvieron a lo largo de casi dos a?os, el tiempo suficiente para desarrollar un arcade 3D de perspectiva subjetiva que iba a suponer una revoluci¨®n con respecto a lo conocido hasta la fecha, gracias a las posibilidades ofrecidas por la nueva consola de 64 bits. Y a decir verdad que en un campo tan trillado como los arcades en primera persona, es gratificante comprobar como con las herramientas adecuadas y el tiempo de programaci¨®n necesario, se puede obtener un resultado tan espl¨¦ndido como lo es Turok para Nintendo 64. En el juego encarnamos al primog¨¦nito de la familia Fireseed, que durante generaciones heredan el manto de Turok (Hijo de la Piedra).

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Es en esta parcela donde podremos comprobar de manera satisfactoria el reconocimiento de Turok como uno de los mejores shoot'em up del momento. Asistimos a un despliegue total de efectos visuales como deformaciones, transparencias y reflejos que confieren al juego un nivel de realismo ciertamente excepcional. El sistema de gr¨¢ficos tridimensional contribuye de igual manera a generar esa sensaci¨®n. La pixelaci¨®n como es de suponer en un t¨ªtulo de estas caracter¨ªsticas, brilla por su ausencia. Los enemigos son pol¨ªgonos texturizados que gozan de una IA a la altura de las circunstancias. Todo en el aspecto gr¨¢fico es un aut¨¦ntico deleite. Quiz¨¢ el abuso de la niebla que pretende camuflar la generaci¨®n espont¨¢nea de pol¨ªgonos sea la ¨²nica pega que se le pudiera poner al cartucho. No obstante, est¨¢ perfectamente disimulada por las caracter¨ªsticas del entorno en que se desenvuelve la acci¨®n.

s o n i d o

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Una de las experiencias m¨¢s agradables y representativas de lo que Turok puede ofrecer en este apartado, es como si de un ritual se tratase, conectar la salida de audio de nuestra querida consola a la toma auxiliar del amplificador de un buen equipo de Alta Fidelidad. Acto seguido, hacerse con cualquiera de las armas que se nos ofrecen (una de mis favoritas es la ametralladora rotativa Gautling), apretar el gatillo, y regalar nuestros o¨ªdos con una sucesi¨®n de efectos tan reales que justifican por s¨ª solos la adquisici¨®n de este cartucho. Si a ello a?adimos los gru?idos guturales de los dinosaurios, el sonido del chapoteo en el agua y la gran variedad de efectos ambientales del entorno por el que va transcurriendo la acci¨®n, merece que el calificativo por lo que a sonido FX se refiere, sea realmente bueno. La m¨²sica se adecua perfectamente al conjunto del juego. El redoble constante de tambores por poner un ejemplo, es simple en su concepci¨®n pero convincente para crear el ambiente deseado.

j u g a b i l i d a d

Por lo que al control se refiere, las posibilidades del mando confieren una gran versatilidad de movimiento a nuesto personaje. Quiz¨¢ algunos jugadores empleen m¨¢s tiempo en acostumbrarse a este sistema que, sin embargo, ya est¨¢n adoptando otros t¨ªtulos como Goldeneye 007. Lo cierto es que a veces apuntar, mirar y disparar sobre un objetivo en constante movimiento hace que la coordinaci¨®n entre los dedos ¨ªndice y pulgar sea dif¨ªcil de sincronizar. Afortunadamente disponemos de un tutorial que nos ayuda a adaptarnos al juego y permite calibrar nuestros progresos (todo un detalle).

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a d i c c i ¨® n

Garantizada desde el primer momento. El incremento de la dificultad es progresivo durante el desarrollo del juego. Las distintas fases en nuestra b¨²squeda de las piezas del Cronocetro, tienen su punto ¨¢lgido con la aparici¨®n en escena del correspondiente jefe de fase, que en gran parte de las ocasiones constituye todo un espect¨¢culo. Es digno de verse las caras con una Mantis Gigante que har¨¢ que nuestros dedos queden petrificados sobre el mando de control, no ya por la criatura en cuesti¨®n que ya es motivo de peso, sino por lo condenadamente bien realizado que est¨¢. El hecho de que dispongamos de tres niveles de dificultad, permite que cada jugador pueda optar por la modalidad que mejor prefiera. Este hecho garantiza que la duraci¨®n del cartucho quede m¨¢s que garantizada. Quiz¨¢ se eche de menos un modo multijugador que le hubiera dado mayor longevidad. Sin embargo no debi¨® entrar en el planteamiento final del juego por ser esa una tendencia que todav¨ªa no era el est¨¢ndar por aqu¨¦l entonces. Ahora tan solo nos resta disfrutar de Turok Dinosaur Hunter y aguardar claro est¨¢, la aparici¨®n en escena de Turok 2 sobre el que actualmente trabajan los programadores de Iguana, esta vez eso s¨ª, de la Divisi¨®n Europea de U.K.

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c o n c l u s i ¨® n

Un arcade en primera persona que sigue los paso de t¨ªtulos como "Doom", "Duke Nukem 3D" o "Quake" , y que mejora lo que parec¨ªa inmejorable. Las capacidades t¨¦cnicas de la consola posibilitan un realismo hasta ahora nunca visto, gracias a un sofisticado sistema de gr¨¢ficos tridimensionales de alto rendimiento. Turok es, hoy por hoy, un t¨ªtulo imprescindible para todo buen amante del g¨¦nero, y altamente recomendable para aquellos que quieran disfrutar en todo su esplendor, de las prestaciones y posibilidades que ofrece el Sistema Nintendo 64.

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