Irlanda conquista Murrayfield y ya huele a Grand Slam

Una hora. Fue el tiempo que consigui¨® sujetar Escocia este domingo a Irlanda en Murrayfield, hasta que un arre¨®n celta en el ecuador de la segunda mitad ti?¨® de verde el Centenary Quaich (7-22), que deja al Tr¨¦bol a un triunfo m¨¢s, el s¨¢bado que viene ante Inglaterra, de abrochar su primer Grand Slam en el Seis Naciones desde 2018. Para hacerse con el t¨ªtulo le valdr¨ªa simplemente con sumar un punto bonus, con el que anular¨ªa cualquier posible resultado de Francia ante Gales.

Descabalgada de la pugna Inglaterra por Francia el s¨¢bado en una aut¨¦ntica sangr¨ªa, pasaba por Edimburgo el ¨²ltimo tren para Escocia en el d¨ªa en que Stuart Hogg cumpl¨ªa 100 apariciones con el Cardo. Y salieron los locales con un esp¨ªritu acorde a la ocasi¨®n. Pegajosos atr¨¢s en los primeros envites de la abrasiva delantera irlandesa; torpes por otro lado en muchos momentos potencialmente definitorios. Este equipo es as¨ª. Solo encuentra est¨ªmulo cuando camina al filo des la desgracia. Contra pron¨®stico, golpe¨® primero con una descarga de Tuipulotu, quiz¨¢ el hombre m¨¢s valioso del torneo para Townsend, destino Huw Jones, cuatro posados en la cita, otra de las sensaciones caledonias.

Fue m¨¢s un par¨¦ntesis en el guion esperado que la consecuencia de una secuencia de dominio escoc¨¦s, y no tard¨® mucho el Tr¨¦bol en volver a poner los puntos sobre las ¨ªes. Se encarg¨® Mack Hansen, con una zambullida en el bander¨ªn en la que encogi¨® el cuerpo a la perfecci¨®n para evitar que le sacaran del campo. Fall¨® la conversi¨®n Sexton y dej¨® a Escocia a tiro de un golpe de castigo que Russell, con tiempo cumplido, esquiv¨® para ir a touch. Brava decisi¨®n que enardeci¨® a Murrayfield, hasta que la parroquia vio como Turner era expulsado por la l¨ªnea lateral a cent¨ªmetros del ensayo. Remar y remar para, de una forma u otra, ahogarse siempre en la orilla.

As¨ª que Irlanda se fue por delante a vestuarios, con la sensaci¨®n de que la fruta estaba madura. Solo hab¨ªa que mover el ¨¢rbol y por eso no tard¨® mucho Andy Farrell en dar entrada a Gibson-Park en el 9. Tres minutos y una sucesi¨®n de fases rel¨¢mpago con sus ¡®gordos¡¯ en la 22 escocesa, se gener¨® el espacio suficiente para que Lowe irrumpiera por su ala y encarrilase la victoria. Ser¨ªa palmaria poco despu¨¦s, cuando una incursi¨®n por el cerrado de los irlandeses dio con los huesos de Conan en la zona de marca.

Pasada la conversi¨®n, la efem¨¦ride: Johny Sexton, con 557 puntos, empata con Ronan O¡¯Gara como m¨¢ximo anotador de la historia de la cita. Su predecesor en el 10 del Tr¨¦bol. De ¡®padres¡¯ a ¡®hijos¡¯ en una tarde que acerca mucho a Irlanda al que ser¨ªa su tercer pleno del siglo y al primer entorchado del mandato de Andy Farrell, el quinto desde la conversi¨®n a Seis Naciones de una potencia que, sin tener el rugby tan entretejido con su ADN como sus vecinos, s¨ª tiene algo que pueden envidiar: una estructura s¨®lida que est¨¢ a punto de dar r¨¦ditos una vez m¨¢s.