Gales da a Italia un golpe de jerarqu¨ªa en el Seis Naciones

Un golpe de jerarqu¨ªa rugb¨ªstica. Eso es lo que se llev¨® este s¨¢bado Italia en la cuarta jornada del Seis Naciones. Se lo dio Gales, que profan¨® (17-29) el otro coliseo de Roma, el Ol¨ªmpico, en un partido sobrio, eficaz (tampoco est¨¢ para mucho m¨¢s), que le entreg¨® en bandeja una Azzurra pardilla, constantemente condenada por sus propios errores, abocada a su octava cuchara de madera seguida salvo que consiga ganar en Escocia el pr¨®ximo fin de semana y Gales no lo haga en Francia. Los brotes verdes de la era Crowley, sin embargo, son evidentes.

Falta un punto m¨¢s de cocci¨®n en un equipo que este s¨¢bado, con la baja de Ange Capuozzo, fue un filo romo. Valiente, s¨ª, empe?ado en jugar a la mano desde atr¨¢s ante el bombardeo a¨¦reo al que le someti¨® Gales, pero despojado del colmillo que le da su joven zaguero cuando las filas contrarias se abren. Con dos botes favorables, uno a patada de Webb aprovechado por Dyer, y otro en un mal pase que favoreci¨® a Liam Williams, ayudado tambi¨¦n por un par de pegatinas, el Puerro abri¨® brecha pronto en la Ciudad Eterna.

Italia, en cambio, fue dejando escapar oportunidades. A ratos precipitada, a ratos escasa de fortuna. Especialmente sangrante fue la del ensayo de Brex, auspiciado por un amago sensacional de Garbisi que tuvo continuidad en Padovani, Varney y Ruzza, anulado finalmente por adelantado. La ventaja termin¨® de dispararse cerca del descanso, cuando Lorenzo Cannone recibi¨® la madre de los castigos: ensayo en contra y amarilla por derribar sobre la l¨ªnea de marca un maul gal¨¦s.

Una de las cosas buenas que tiene esta Azzurra es que ha dejado de abandonarse cuando las cosas no le salen. Y volvi¨® al partido al poco de arrancar la segunda parte, con un sombrero de Allan que hizo bueno Negri. Pero se sabe que dura poco la alegr¨ªa en casa del pobre. Hizo bueno el dicho Faletau, destinatario de una descarga de Webb tras colarse por una puerta de la defensa local para posar el cuarto de los Dragones, el del bonus ofensivo, con Italia a¨²n en inferioridad tras una nueva amarilla, esta a Bruno por un codazo al cuello de un rival.

Salvo por un postrero ensayo con el que Brex arregl¨® un partido gris, la ¨²ltima media hora fue un querer y no poder en el que Italia al menos ofreci¨® una impresi¨®n de orgullo propio complicada de ver hace no mucho. Se estrell¨® repetidamente contra el oficio de un rival que, en las peores horas recientes de su rugby, perdidos 12 de sus ¨²ltimos 15 partidos, patas arriba todo el esquema que nutre a la selecci¨®n, dijo este s¨¢bado que por la cuchara de madera no va pasar.