Los Hispanos vuelven a ganar pese a dormirse en los laureles
Ruman¨ªa estuvo m¨¢s controlada en este segundo partido, pero le endos¨® 15 goles a Espa?a en el ¨²ltimo cuarto.
Segundo Espa?a-Rumania en Avil¨¦s, y segundo triunfo espa?ol, con id?entica diferencia que el jueves, cuatro goles, pero el 33-29 del primer d¨ªa fue m¨¢s sufrido que el 35-31 del s¨¢bado, porque los Hispanos llegaron a rozar los 10 tantos de renta ante el ¨²ltimo cuarto de partido. Es posible que esta Selecci¨®n en prueba pensase que ya estaba todo hecho, pero cuando se est¨¢ de meritorio no se puede bajar el pie del acelerador: en esas circunstancias siempre se act¨²a con el alma, aunque sea un partido amistoso, pero trascendente para que tome sus nota el seleccionador.
Lo? cierto es que Espa?a nunca sinti¨® el aliento en el cogote, que marc¨® distancias con los extremos desde el inicio, que funcion¨® mejor el 6-0 defensivo, que se control¨® mejor la conexi¨®n de la primera linea con los pivotes rumanos. Y tambi¨¦n es que cierto que se dio una imagen m¨¢s solida de colectivo, por lo menos durante 45 minutos, con buenas actuaciones individuales y con novedades en los roles.
Por ejemplo, se intuye que Ribera pretende que sus jugadores grandes no necesiten relevo ataque y defensa, que no le obliguen a cambios para evitar el contragol que se ha puesto de moda. Por eso tal vez ya prueba a Guardiola en ataque, y a Rub¨¦n March¨¢n en defensa, y a Miguel S¨¢nchez en el centro de la defensa, en e,l 6-0 y en el 5-1, porque parece que es la apuesta del seleccionador para que se asiente como relevo natural de Viran Morros.
En el minuto 45 el 25-16 destacaba el ataque y la defensa espa?ola, pero encanj¨® 15 tantos en ese ¨²ltimo cuarto, la mitad que en todo el partido. Tal vez poque Pascual atac¨® con siete, y eso le cost¨® colocarse a la defensa espa?ola, pero m¨¢s que el detalle t¨¢ctico la impresi¨®n era de que los Hispanos quisieron gustarse y a¨²n, como colectivo, no est¨¢n para exhibiciones, lo que facilit¨® el trabajo defensivo rumano, interesado en que la diferencia quedase comedida.