Matsuyama revienta un Masters que le da la espalda a Rahm
El japon¨¦s firma una tercera vuelta estratosf¨¦rica (-7) para liderar con -11 y est¨¢ cerca de ganar el primer major para su pa¨ªs. Rahm, al par en otra dura lucha contra Augusta.
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Casi con toda seguridad Kepa, el primog¨¦nito de Jon Rahm y su mujer Kelley, no ver¨¢ a su padre calarse este domingo la chaqueta verde en la jornada final del Masters. Para que eso sucediera, tendr¨ªa que interceder por lo menos San Ignacio de Loyola, patr¨®n de los vizca¨ªnos.
Augusta ense?¨® la dentadura completa en el d¨ªa del movimiento y castig¨® cruelmente a Rahmbo. El de Barrika ha llegado a la cita marcado por un acontecimiento tan especial que pod¨ªa ser la espoleta que le detonara o una distracci¨®n del objetivo. ?l mismo avis¨® de que no conven¨ªa apostar a su victoria si el parto se produc¨ªa durante el torneo y, aunque lleg¨® d¨ªas antes, acab¨® afectando a su preparaci¨®n.
No hace falta que lo diga para saber que Rahm no cambiar¨ªa lo que la vida le acaba de deparar ni por mil triunfos, y lo cierto es que su actuaci¨®n en las tres primeras rondas est¨¢ muy lejos de lo reprochable. Ayer se bati¨® el cobre con bravura y firm¨® tablas con el campo por tercer d¨ªa consecutivo. Jug¨® mejor de lo que sugiere el resultado, pero recibi¨® un portazo cada vez que quiso asomarse a la zona noble de la tabla, en la que deber¨ªa estar por talento y trayectoria (lleva tres top-10 en sus tres ¨²ltimas apariciones).
Las campanas repicaron con su birdie al par 5 del tercero, pero en el cuarto se llev¨® la primera bofetada, ampliada a croch¨¦ en el s¨¦ptimo. El 8, otro par 5, result¨® en un nuevo birdie anulado despu¨¦s por otros dos bogeys al 11 y al 14, especialmente doloroso el primero tras un dardo al trapo que no encontr¨® premio. Enrabietado, se revolvi¨® y rest¨® con un cuatro en el 15 y un dos en el 16 para cerrar al par. "Fue frustrante", se lament¨® despu¨¦s ante los micr¨®fonos, y asegur¨® que intentar¨¢ dar "un susto" en los ¨²ltimos 18 hoyos.
Que pele¨¦ por algo m¨¢s que volver a estar entre los diez primeros no solo depender¨¢ de lo que ¨¦l pueda ofrecer, que debe ser algo mejor que su mejor versi¨®n, tambi¨¦n estar¨¢ supeditado a lo que haga un cuerpo de candidatos muy selecto comandado por Hideki Matsuyama, que est¨¢ otra vez en el nivel que le llev¨® a pelear por los majors a principios de la pasada d¨¦cada. El japon¨¦s, que lleva por apellido el nombre de su ciudad natal, le peg¨® un aut¨¦ntico repaso a Augusta en un d¨ªa que era m¨¢s para sobrevivir que para lanzar una Blitzkrieg. El -7 para -11 en total que firm¨®, sin un solo bogey y con una secuencia demencial eagle-birdie-eagle entre el 15 y el 17 tras reanudarse el juego, detenido m¨¢s de una hora por amenaza de tormenta, pone una distancia importante con sus perseguidores. Los m¨¢s inmediatos sonJustin Rose, Xander Schauffele, Marc Leishman y el desmelenado debutante Zalatoris, todos en -7.
Otra cosa fue el siempre dif¨ªcil tramo final para Jos¨¦ Mar¨ªa Olaz¨¢bal. El sempiterno campe¨®n de Hondarribia se plant¨® inmaculado en el 15, un golpe bajo par con dos birdies y un solo bogey manchando la tarjeta, pero decidi¨® arriesgar en el tercer golpe y se fue al agua. Acabo cediendo dos golpes all¨ª y otros dos entre el 16 y el 17 para terminar con +3 el d¨ªa y +7 en el acumulado. "Iba muy bien hasta ese momento. As¨ª es Augusta, te lo juegas todo en dos metros", asegur¨® un tipo que este domingo jugar¨¢ la ronda final del Masters con 55 a?os. Que le quiten lo bailado.