Exalumnas del entrenador de Betx¨ª relatan insultos, violencia...
La tercera sesi¨®n del juicio contra el entrenador de gimnasia acusado de abusos sexuales ha contado con el testimonio de varias exalumnas que han descrito el "miedo" que sent¨ªan.

La tercera sesi¨®n del juicio contra el entrenador de gimnasia acusado de abusos sexuales ha contado con el testimonio de varias exalumnas que han descrito el "miedo" que sent¨ªan hacia ¨¦l y que han referido pr¨¢cticas similares con ellas, adem¨¢s de insultos y violencia en los entrenamientos.
Adem¨¢s, una de ellas ha relatado una relaci¨®n sentimental con ¨¦l cuando ten¨ªa 14 a?os durante la sesi¨®n de este viernes, en la que tambi¨¦n ha testificado Luc¨ªa Guisado, seleccionadora nacional, a quien la acusaci¨®n particular quiere pedir que explique las razones de la que a su juicio fue una falta de apoyo por parte de la Federaci¨®n Espa?ola de Gimnasia Art¨ªstica Femenina a las v¨ªctimas.
Guisado ha relatado que no sab¨ªa qu¨¦ gimnastas estaban implicadas en la denuncia y ha asegurado que una de las menores, cuya madre sostiene que perdi¨® una beca nacional por la denuncia, "baj¨® su rendimiento desdeque sufri¨® una lesi¨®n".
El acusado se enfrenta a una pena de prisi¨®n de 28 a?os solicitada por el Ministerio Fiscal, que le considera culpable de cinco delitos de abusos sexuales y abusos sexuales continuados.
Durante esta sesi¨®n del juicio que acoge la Secci¨®n Primera de la Audiencia de Castell¨®n han testificado tambi¨¦n el alcalde de Betx¨ª, Alfred Remolar, una exentrenadora del Club de Gimnasia de Betx¨ª y numerosas exalumnas del mismo que tambi¨¦n fueron entrenadas por el acusado desdelos a?os 90.
Remolar ha dicho que se sinti¨® "triste" al conocer los hechos de los que se acusaba al procesado, que fue conserje del Ayuntamiento durante 35 a?os y ten¨ªa llaves de las instalaciones deportivas, as¨ª como un despacho propio, y ha a?adido que su labor como entrenador no ten¨ªa vinculaci¨®n con el consistorio.
Guisado, que ha declarado por videoconferencia, ha indicado que una gimnasta del club de Betx¨ª que destacaba por su calidad entr¨® en un programade seguimiento de la Federaci¨®n y optaba, entre otras gimnastas, a una beca Blume para formarse en el Centro de Alto Rendimiento de Madrid.
Esta menor, que fue quien present¨® la denuncia por estos hechos, finalmente no obtuvo la beca, aunque, seg¨²n ha sostenido la seleccionadora,fue porque "baj¨® su rendimiento tras sufrir una lesi¨®n" y, en cualquier caso, ha agregado, esa decisi¨®n no depend¨ªa de ella.
Sobre el acusado, Guisado ha indicado que manten¨ªa con ¨¦l la misma relaci¨®n que con el resto de entrenadores y que "considera" que s¨ª "deb¨ªa tener la titulaci¨®n" para poder ejercer como entrenador del circuitonacional.
En la sesi¨®n ha declarado tambi¨¦n una psic¨®loga perito que trat¨® a dos de las menores denunciantes, quien ha dicho que ambas presentaban ansiedad, tristeza y un "asco muy pronunciado" a los masajes de presunto contenido sexual que el acusado daba a las menores, y las ha calificado de v¨ªctimas tanto de abusos sexuales como de maltrato psicol¨®gico y f¨ªsico.
El resto de testigos que han declarado, exalumnas del acusado, todas ellas con muy buen rendimiento y que destacaban entre sus compa?eras, han relatado el miedo, los insultos y la actitud violenta del mismo durantelos entrenamientos, as¨ª como la dureza de los entrenamientos, diarios, en los que el entrenador no toleraba otras actividades que no fueranla gimnasia porque "hasta estudiar estaba mal visto".
Las exalumnas han sido preguntadas por la fiscal y la acusaci¨®n porlos episodios vividos en relaci¨®n a supuestos abusos cometidos por el acusado, que habr¨ªan prescrito ya, aunque el magistrado que preside la sala les ha instado a no preguntar "por unos hechos presuntamente delictivos que no est¨¢n siendo juzgados en esta causa", ante lo cual estas partes han protestado.
Una de las testigos ha asegurado que se sinti¨® "muy mal" por no haber hecho nada cuando todo aquello ocurri¨® y otra ha relatado que la relaci¨®n de cercan¨ªa con el acusado lleg¨® hasta tal punto que "desde los 14 alos 18 a?os" mantuvieron una relaci¨®n sentimental: "Qued¨¢bamos fuera de los entrenamientos y manten¨ªamos relaciones sexuales".
Las testigos han explicado que se refer¨ªan a la sala en la que se realizaban estos masajes como "el cuarto oscuro o el pasaje del terror" y que se hac¨ªan a puerta cerrada.