Herring se pone el mono de trabajo para acabar con Oquendo

Jamel Herring retuvo por segunda vez el Mundial WBO del superpluma. El estadounidense se impuso a Jonathan Oquendo en una nueva jornada de boxeo en la burbuja que Top Rank tiene en Las Vegas. El triunfo del campe¨®n lleg¨® por descalificaci¨®n en el octavo asalto, y es que el boricua le propin¨® muchos cabezazos, uno hiri¨® al campe¨®n, y el ¨¢rbitro decidi¨® parar las acciones por la reiteraci¨®n tras varios rounds. El corte producido pod¨ªa ir a m¨¢s y ser perjudicial para el estadounidense. La parada fue acertada.

El triunfo de Herring no fue para nada lucido. Tiene mucho m¨¢s boxeo que Oquendo, pero el boricua se emple¨® en hacer una pelea muy f¨ªsica. Desde el primer instante utiliz¨® la misma t¨¢ctica: se arrugaba, sacaba un par de manos y entraba en la corta distancia. Eso en ning¨²n momento complic¨® al campe¨®n, pero s¨ª hizo que la pelea fuese trabada constantemente durante los dos primeros asaltos. En el tercero el gui¨®n fue el mismo, pero Herring ya hab¨ªa le¨ªdo a su oponente. Cada vez conectaba m¨¢s y logr¨® una ca¨ªda en ese tercer acto tras un gran upper.

En el cuarto asalto Oquendo tuvo que levantar un poco. Vio que entrando, a veces muy frontal, pod¨ªa sufrir y redujo las embestidas. Adem¨¢s, el ritmo f¨ªsico tambi¨¦n baj¨®. Eso le sirvi¨® a Herring, quien en distancia luci¨® m¨¢s. Conectaba sus manos y se quitaba el trabajo que el puertorrique?o le sacaba. Todo fue un espejismo, porque Oquendo solo ten¨ªa un plan. Volvi¨® a apretar, aunque ya no pod¨ªa trabar tanto la pelea. Herring le hab¨ªa le¨ªdo muy bien y le iba percutiendo. Asimilaba golpes y segu¨ªa adelante, pero el castigo no cesaba. En uno de las entradas que el campe¨®n no logr¨® frenar, Oquendo le dio un cabezazo. Le cort¨® en el ojo (debajo de la ceja), una herida muy fea. El ¨¢rbitro, Tony Weeks, no dud¨®: "cabezazo voluntario". O lo que es lo mismo, si hab¨ªa parada m¨¦dica, el aspirante ser¨ªa descalificado.

En la esquina del estadounidense trabajaron bien, pero era el quinto asalto, faltaba un mundo y adem¨¢s la pelea estaba siendo en la cota. Oquendo no cambiaba de plan y Herring intentaba, como pod¨ªa, mantenerlo alejado para no perjudicar su corte. Quer¨ªa ganar por sus propios m¨¦ritos y cuidarse de una lesi¨®n mayor. En el sexto y s¨¦ptimo lo consigui¨®, pero en el octavo de nuevo boricua volvi¨® a da?ar ese ojo con la cabeza. La sangre man¨® de nuevo, el corte se ampli¨® y el refer¨ª llam¨® al galeno cuando finaliz¨® el round. Herring ten¨ªa su ojo izquierdo muy da?ado y no permitieron seguir al campe¨®n y la victoria lleg¨® por la v¨ªa de la descalificaci¨®n (tras unos minutos de deliberaci¨®n entre el ¨¢rbitro y los oficiales). La toc¨® trabajar de lo lindo al campe¨®n y ahora ya mira a un gran cartel: Shakur Stevenson, quien renunci¨® al cintur¨®n WBO del peso pluma para subir de peso, deber¨ªa ser su pr¨®xima parada.