Kilian Jornet, superatleta sin monta?as con un solo objetivo: acelerar para el reto en asfalto
Kilian Jornet habla con AS del nuevo enfoque para este 2020 sin grandes carreras de monta?a a la vista y ofrece pistas de su pr¨®ximo desaf¨ªo en asfalto.
Ser Kilian Jornet y cumplir la cuarentena en casa no debe ser tarea sencilla. Y mucho menos con un amplio repertorio de monta?as y crestas para escoger. Pero el sentido de la responsabilidad por la pandemia del coronavirus y un compromiso ¨¦tico imperan. Incluso cuando la norma no obliga en Noruega, donde reside, a un confinamiento estricto. "Aqu¨ª es distinto. Podr¨ªas hacer salto BASE si quisieras, pero se trata de ser coherente y responsable. Entreno en casa y cuando salgo corro riesgo cero para no tener que acudir a los servicios sanitarios", cuenta a AS por videollamada.
Kilian Jornet es ahora mismo un superatleta sin monta?as. En su plan diario y en el futuro pr¨®ximo. El coronavirus ha alterado completamente el calendario de carreras y su plan de entrenamiento. Preocupaci¨®n cero.
Nuevo objetivo.
"Tenemos estr¨¦s por estar parados y perder lo ganado, pero no debe ser as¨ª. No pasa nada por estar un mes haciendo menos. Luego podemos recuperar r¨¢pido y aprovechar este tiempo para mejorar otros aspectos. La vuelta a la competici¨®n ser¨¢ gradual. Ahora tendr¨ªa que estar en el Himalaya escalando. Se cancelaron las expediciones, as¨ª que he visto esta situaci¨®n como una oportunidad para prepararme mejor para el reto en asfalto", explica.
Cambio de chip. El desaf¨ªo que tiene al mundo runner intrigado gana en prioridad. Es tiempo de adaptarse a un nuevo entrenamiento. El objetivo ahora es ganar velocidad. "Estaba haciendo tiradas diarias en cinta de cuarenta o cincuenta kil¨®metros, pero he bajado para hacer m¨¢ximo treinta y trabajar las series. Desde los 200 metros hasta un kil¨®metro intentando ir r¨¢pido. Yo tengo un buen VO2max, un buen sistema aer¨®bico. Me falta la econom¨ªa de carrera y la velocidad, que es mi punto d¨¦bil. Hay que trabajar lo que sufro", admite esbozando una sonrisa.
La propia preparaci¨®n es en s¨ª misma el reto. La cinta con la que entrena en Noruega alcanza como m¨¢ximo los 20 kil¨®metros por hora. "Juego con la inclinaci¨®n al tres o cuatro por ciento para trabajar un poco m¨¢s. Esta velocidad es buena para tiradas largas. Yo necesito ahora mover las piernas r¨¢pido", apunta. Unas sesiones que combina con series en la carretera que est¨¢ junto a su casa si quiere acelerar m¨¢s. "Hab¨ªan pasado 30 a?os, mi vida, sin correr en asfalto. Empec¨¦ un poco el a?o pasado y este lo mantengo. Es muy duro. Se nota en las piernas y tengo que tener m¨¢s cuidado porque es m¨¢s f¨¢cil lesionarse. Al menos para m¨ª que estoy acostumbrado a la monta?a", admite.
El suspense contin¨²a envolviendo al desaf¨ªo. El formato y el momento son las grandes inc¨®gnitas. Mientras tanto Jornet ofrece pistas. "En agosto llevar¨¦ tiempo entrenando y ver¨¦ c¨®mo me encuentro y si las lesiones respetan. A partir de ah¨ª ir¨¦ pensando. Quiz¨¢s en oto?o y si no en invierno. Sin duda va a ser larga distancia. No voy a hacer cien metros o cosas as¨ª. Quiz¨¢s sea media marat¨®n o marat¨®n. En funci¨®n del entrenamiento decidir¨¦", desliza.
Pasan las semanas y la urgencia por ejercitarse aprieta, pero Kilian Jornet insiste en tener paciencia.Y se muestra contrario a los permisos de entrenamiento para los deportistas de ¨¦lite. "Es dif¨ªcil. ?C¨®mo defines ¨¦lite? Al final hay que ponerlo en perspectiva. Se ha visto con los Juegos. No va a terminar el confinamiento y vamos a tener que correr r¨¢pido. La vuelta ser¨¢ gradual. Y se trata de ser coherentes", explica. El virus es la prioridad y no la competici¨®n, insiste, aunque reconoce que muchos deportistas viven de ella.
La vida de Kilian Jornet en confinamiento incorpora, adem¨¢s del alto rendimiento, responsabilidades por la paternidad, labores de casa y tiempo de ocio. Tiempo para leer y animar a la lectura y tiempo tambi¨¦n para reflexionar sobre el planeta. "Es una buena oportunidad que espero no perdamos. Los gobiernos con decisiones valientes y la gente tenemos el poder de cambiar cosas. Podemos aprender a reconstruir de una manera que nos ayude a prevenir la pr¨®xima crisis. Podemos hacer m¨¢s cosas con menos", argumenta. Y de ah¨ª a la fragilidad del ser humano y un punto para la esperanza. "En la monta?a sientes a menudo que eres poca cosa. Ah¨ª te das cuenta de que realmente somos muy fr¨¢giles. No somos superiores a nada y no todo depende de nosotros mismos. Lo que m¨¢s esperanza da es ver c¨®mo la gente con posturas diferentes se une y es solidaria. Si nos unimos somos capaces de hacer muchas cosas. Yo s¨ª conf¨ªo en el ser humano. Es momento de pensar en colectivo. Saldremos de esta reforzados" reflexiona.
Los tiempos est¨¢n cambiando, pero la clave est¨¢ en adaptarse r¨¢pido. Llega la conversaci¨®n a su fin y sale a relucir Emil Z¨¢topek, el atleta checo que dej¨® una frase para el imaginario maratoniano: "Si quieres correr, corre una milla. Si quieres cambiar tu vida, corre un marat¨®n". Kilian Jornet hace rato que ha superado en monta?a los 42 kil¨®metros y 195 metros. El reto para un esp¨ªritu libre como ¨¦l ahora es otro. Es el tiempo de asaltar el asfalto.