CORONAVIRUS
Las mayores locuras que hacen los deportistas en sus casas
Ironman, marat¨®n en la terraza, escalada en la cocina, saltos de p¨¦rtiga en el patio... El confinamiento ha desarrolado el ingenio de los deportistas para seguir entrenando.
Del ironman casero que acomete en Girona el triatleta alem¨¢n Jan Frodeno a la escalada de sal¨®n, pasando por el DeCasaThlon para atletas "combineros" convocado para este mismo s¨¢bado: las personas adictas al deporte son capaces de concebir las mayores locuras con tal de hacer m¨¢s digerible el confinamiento.
Son propuestas audaces engendradas no s¨®lo por la imaginaci¨®n calenturienta de los deportistas desesperados, sino tambi¨¦n por instituciones tan respetables como la Federaci¨®n Espa?ola de Atletismo, que acaba de lanzar el decatl¨®n casero con el marbete "DeCasaThlon".
En el ej¨¦rcito de "friquis" confinados militan, por un lado, deportistas profesionales que tienen, por contrato, la obligaci¨®n de mantenerse en forma con miras a una futura liberaci¨®n; por otro, los aficionados. Desde el m¨¢s fiel "popular", cumplidor escrupuloso de sus planes semanales, hasta el novicio que, obligado por el encierro, descubre ahora las excelencias del deporte-salud.
He aqu¨ª algunos ejemplos:
Ironman de bolsillo:
Jan Frodeno, campe¨®n ol¨ªmpico de triatl¨®n en Pek¨ªn 2008 y tres veces oro mundial en la modalidad m¨¢s extrema, el ironman, lleva a cabo este mismo s¨¢bado, con fines ben¨¦ficos, esta modalidad extrema del triatl¨®n en su casa de Girona.
"Me dijeron: no intentes algo aso en casa, y yo les dije: quiero nadar 3,8 kil¨®metros, hacer 180 kil¨®metros en bicicleta y correr un marat¨®n. Todo en casa, entre el amanecer y el ocaso", escribi¨® en sus redes sociales.
Ha empezado a las 8.00, con retransmisi¨®n en directo en su cuenta de Facebook. Obviamente, utiliza su piscina, una bicicleta est¨¢tica y una cinta de correr. Los aficionados pueden acompa?arlo, mediante la plataforma Zwift, en los segmentos de ciclismo y marat¨®n. Calcula que la nataci¨®n le llevar¨¢ 50 minutos y la bici cuatro horas y media. Despu¨¦s de 20 minutos de descanso, atacar¨¢ el marat¨®n en cinta sin hacer c¨¢lculos de tiempo.
Colgados de la mesa del sal¨®n:
Los amantes de la escalada confinados lo tienen m¨¢s dif¨ªcil para "matar el gusanillo" en las estrecheces de su domicilio, pero no hay obst¨¢culo que se resista a una voluntad firme.
Las redes sociales han divulgado im¨¢genes ins¨®litas de escaladores frustrados. Algunos aparecen colgados de la mesa del sal¨®n realizando extra?as contorsiones que reproducen los movimientos de la escalada. Otros utilizan la estrecha escalera que conduce al s¨®tano para trepar por las paredes con una pierna en cada muro.
La estadounidense Brooke Raboutou public¨® un v¨ªdeo en el que aparece escalando por los muebles de su cocina hasta llegar a la nevera. "El tour de la cocina. No se preocupen, despu¨¦s de hacerlo lav¨¦ la encimera tres veces", advierte.
Un decatl¨®n casero de una hora:
Las diez disciplinas de la combinada atl¨¦tica, es decir, 100 metros, longitud, peso, altura, 400, 110 metros vallas, disco, p¨¦rtiga, jabalina y 1.500, que en una competici¨®n oficial duran dos d¨ªas, aqu¨ª en s¨®lo una hora. Tal es la propuesta de la Federaci¨®n Espa?ola de Atletismo para hacer m¨¢s llevadero el S¨¢bado Santo.
Los artefactos para los lanzamientos -precisa el reglamento oficial- han de ser fabricados por los deportistas utilizando lo que tengan m¨¢s a mano en casa, y a continuaci¨®n se detallan las condiciones de cada prueba.
Como los jueces no pueden desplazarse durante el estado de alarma, se requiere la m¨¢s estricta honradez de los participantes, que, ahuyentado la tentaci¨®n de aumentar sus marcas, deben comunicar sus resultados por internet para que sean evaluados.
Un marat¨®n en la terraza:
Las existencias de cintas deslizantes para correr se agotaron r¨¢pidamente en cuando entr¨® en vigor el confinamiento cuasi mundial por el estado de alarma. Quienes no tienen una en casa no tienen m¨¢s remedio que usar los tramos m¨¢s largos de sus domicilios para ejercitarse en la carrera.
Correr un marat¨®n, ya sea en el pasillo o en la terraza es un desatino que puede acarrear -lo advierten los m¨¦dicos especialistas- lesiones como tendinitis, fascitis plantar, roturas de menisco o de fibras musculares, pero los impenitentes no se arredran.
Luis Mu?oz, un espa?ol de 19 a?os que vive en Nueva York, eligi¨® para estrenarse en el marat¨®n la terraza de su casa, que mide seis metros. Lo acab¨®, seg¨²n cuenta en Twitter, en poco m¨¢s de cuatro horas y media.
Saltar 5,61 con una p¨¦tiga en la patio de casa:
El atleta franc¨¦s Renaud Lavillenie, exr¨¦cord mundial de p¨¦rtiga ahora en posesi¨®n del sueco Armand Duplantis, decidi¨® seguir entrenando los saltos y lo hizo en el patio de su casa en una localidad francesa.
Lavillenie se elev¨®, con s¨®lo diez pasos de carrera, por encima de los 5,61 metros comose puede observar en una v¨ªdeo que public¨® en twitter. El pertiguista franc¨¦s cuenta en casa con todo lo indispensable para realizar con seguridad los saltos (peque?o foso y colchoneta homologada). Lavillenie intent¨® saltar los 5,85 pero se le resistieron.
Entrenar saques de tenis contra una s¨¢bana:
Los tenistas que no disponen de una pista en el jard¨ªn padecen todos los inconvenientes del confinamiento y est¨¢n obligados, como cualquier otro deportista, a exprimir su caletre en busca de soluciones. El espa?ol Pablo And¨²jar ha encontrado una muy simple para entrenar el saque.
El valenciano lo ha publicado en las redes sociales. En un extremo de su terraza colg¨® una s¨¢bana en un tendedero de ropa y, desde el otro lado, se dedic¨® a estrellar bolas contra el lienzo desplegado.
A la escena no le falt¨® el toque humano. And¨²jar, n¨²mero 53 en la lista mundial, recibi¨® la ayuda de uno de sus peque?os, que ejerci¨® de recogepelotas con la ayuda de un carrito de juguete.