El honor de los Ingebrigtsen est¨¢ en manos del m¨¢s joven
Jakob, de 19 a?os, es el ¨²nico representante de la familia en 1.500. Filip y Henrik, los hermanos mayores, tambi¨¦n corrieron en estos Mundiales.
Los Ingebrigtsen son una familia noruega de la ciudad petrolera de Sandnes. Gjert y Tone, los padres, tuvieron siete hijos. Tres de ellos, Henrik, Filip y Jakob, participaban en estos Mundiales de Doha. Y s¨®lo sobrevive Jakob, de 19 a?os, que qued¨® quinto en 5.000 tras una p¨¢jara brutal y hoy se enfrenta a los 1.500, su distancia predilecta y en la que tiene la segunda mejor marca del a?o (3:30.16) tras el keniano Cheruiyot (3:28.77).
Los tres atletas de esta peculiar prole, cuya vida se transmite por cap¨ªtulos en la TV2 noruega, es seguida desde sus inicios por el fisi¨®logo Leif Inge Tjelta, de la Universidad de Stavanger. "Hacen ejercicio desde muy peque?os y practicaron diferentes deportes. En sus preparaciones corren entre 140 y 160 kil¨®metros a la semana, con un 25% de espacio a lo anaer¨®bico. Est¨¢n controlados por test sangu¨ªneos de lactato y desde chavales les motiva para la actividad su padre y entrenador, Gjert", explica el cient¨ªfico en un art¨ªculo que facilit¨® a AS.
Entre ellos, Jakob es el que mejor perfil tiene, con una capacidad aer¨®bico de superdotado. "Su consumo m¨¢ximo de ox¨ªgeno con diez a?os era de 70 mililitros, a los doce ya se entrenaba diariamente y decidi¨® ser atleta cuando Henrik se proclam¨® campe¨®n de Europa en 2012. Ahora ya hace el mismo volumen que sus dos hermanos", apunta Tjelta.
Con 17, Jakob fue campe¨®n de Europa en 2018 de 1.500 y 5.000. Hoy le toca el asalto mundial. Se enfrentar¨¢ a la duda de si en una carrera a tren o t¨¢ctica, con el peligroso Lewandowski. Todo el clan Ingebrigtsen desplazado a Doha se encontrar¨¢ en vilo. El honor de la familia est¨¢ en juego.