La habitaci¨®n del ¨¦xito

La habitaci¨®n 32.010 del Hotel Ezdan de Doha es la habitaci¨®n del ¨¦xito. En esos 40 metros cuadrados han convivido Adri¨¢n Ben (sexto en 800) y Orlando Ortega (bronce en 110 vallas), los?dos mejores clasificados de Espa?a en los Mundiales junto a Ana Peleteiro (sexta en triple). Dos perfiles bien diferentes, porque Ben, de 21 a?os, era el novato que debutaba en el Mundial. Y Orlando, plata ol¨ªmpica y con dos Diamonds League, conoce de sobra la ¨¦lite a los 28.

"?T¨² te pones nervioso cuando compites?", le preguntaba el primer d¨ªa el de Viveiro a Ortega. Como buen gallego, segu¨ªa con los interrogantes: "?Te imaginas que tocas una valla y te quedas fuera?". Orlando sac¨® su filosof¨ªa de ganador: "Pero por qu¨¦ voy a tocar la valla, si pas¨¦ m¨¢s de 1.000 este a?o. Si piensas que vas a fallar, fallas. Si consideras que puedes perder, pierdes". Fue una revelaci¨®n para Ben: "Ah¨ª me concienci¨¦ de salir en la eliminatoria de 800 a pi?¨®n. ?Que no va a fallar nada, que vamos a liarla! ?Por qu¨¦ va a salir mal? Me tranquiliz¨® y eso que yo me pongo nervioso hasta en los entrenamientos".

Ortega, aparte de ser uno de los mejores atletas del mundo, intenta "servir de modelo" a otros: "Siempre procuro ayudar a los chicos j¨®venes mentalmente, que saquen su lado m¨¢s positivo cuando se enfrenten a competiciones importantes. Este chaval tiene 21 a?os, posee un mundo por delante. Era su momento de disfrutarlo, y lo hizo. Estuvo genial, tiene por delante much¨ªsimas m¨¢s carreras as¨ª".

Orlando comenz¨® a competir el lunes, un d¨ªa despu¨¦s de que Ben pasara a la final. El gallego explica c¨®mo se portaba el vallista: "?l optaba a ser campe¨®n del mundo y yo aspiraba a unas semifinales y poco m¨¢s. Y Orlando se quer¨ªa marchar de la habitaci¨®n y sentarse en recepci¨®n para dejarme mi horario de reposo. ?No debi¨® ser al rev¨¦s? En todo caso me tendr¨ªa que haber ido yo, que ¨¦l era el bueno. Orlando es cuadriculado y meticuloso, como debe ser una estrella. Me sorprendi¨® mucho, para bien". Ortega ofrece su razonamiento: "Me gusta respetar los espacios de descanso y de concentraci¨®n. Yo en eso soy muy enfocado".

Ben corri¨® la final de 800 el martes con 1:45.58 y se convirti¨® en el mejor espa?ol de la historia en unos Mundiales en esa distancia. "Seguro que estar con ¨¦l en la habitaci¨®n me dio energ¨ªa positiva", confirma Orlando, que compiti¨® el mi¨¦rcoles: semifinales y la dichosa final. Termin¨® quinto tras la invasi¨®n de calle de McLeod y luego le dieron el bronce a los dos d¨ªas. "Vaya baj¨®n que le pasara eso, pero luego vino la medalla... y fue un subid¨®n", dice Ben sobre el desenlace de Ortega, que aquella jornada "llor¨® mucho: "Fue la m¨¢s larga de mi vida". Cuando tuvo el bronce Orlando y Adri se abrazaron.

"Si es que no soy ni el mejor de mi habitaci¨®n, aunque no est¨¢ mal c¨®mo nos portamos", bromea Ben. "Esto nos dio suerte, a la pr¨®xima repetimos", cierra el vallista. Una foto y se dieron otro abrazo. La 32.010, la habitaci¨®n del ¨¦xito.