¡®Misi¨®n remontada¡¯ para el binomio Rahm-Hayes

Jon Rahm termin¨® la segunda vuelta del Estrella Damm Andaluc¨ªa Valderrama Masters contrariado. Dos bogeys de cierre y un total de -1 le dejan retrasado en la pelea con los mejores de un campo y un torneo que desea dominar. Esta vez el viento le puso trampas. "Si elimino los errores tontos podr¨¦ tener alguna opci¨®n¡±, dec¨ªa el de Barrika, a siete golpes del l¨ªder Bezuidenhout (-8), a tres de Sergio Garc¨ªa, Adri Arnaus, y Quir¨®s, segundos con -4.

Mientras Rahm atend¨ªa a la prensa, en la distancia miraba con sangre fr¨ªa Adam Hayes, un estadounidense de Charlotte que ha visto de todo en el golf. Desde el a?o 2000 ha llevado la bolsa de Jonathan Byrd, Jason Dufner, Russell Henley... pero en 2017 se hizo un caddie fiel. Se comprometi¨® con Rahm, que s¨®lo ha visto llevar su bolsa de palos a Hayes. El de Carolina del Norte ha entendido al golfista de Barrika, con su temperamento y su juego de estrella mundial.

¡°Adam es una figura bastante importante para m¨ª. Aunque la decisi¨®n final siempre es m¨ªa, ¨¦l me da su opini¨®n si pregunto. Me ayuda mucho y si no, no ser¨ªa mi caddie¡±,explicaba Rahm a AS. Hayes y Rahm han forjado una relaci¨®n caddie-jugador de simbiosis.¡±Desde el primer momento que vi a Rahm pegar la bola sab¨ªa que era especial¡±, ha dicho el americano, que portando los palos del vizca¨ªno se convirti¨® en uno de los caddies m¨¢s prestigiosos del PGA Tour y uno de los punteros en la lista de ganancias, al nivel de Michael Greller (Spieth) o Colin Swatton (Jason Day).

Pero lo de Rahm y Hayes es m¨¢s profundo que un jefe-empleado. Entre ellos hay confianza y un buen ambiente que se plasma en visitas a Barrika de Adam, que se qued¨® en Plentzia para pasar unos d¨ªas cerca de Jon, que cuando juega por Carolina del Norte se refugia en la casa de Hayes. El binomio lleva siete t¨ªtulos entre el circuito europeo y americano. Pr¨®xima misi¨®n: remontar en Valderrama.