Colts ganan sobrados a Texans y jugaran contra Chiefs en Kansas

Los Colts salieron como un vendaval en ataque y frenaron desde el primer instante las embestidas de la defensa de los Texans. T.Y. Hilton emerg¨ªa en cada tercer down para desesperar a Watt, Clowney y compa?¨ªa mientras Frank Reich, entrenador de Indianapolis, pon¨ªa en pr¨¢ctica un plan de juego imaginativo, variado, espectacular para el espectador y pr¨¢ctico para el marcador. Una sucesi¨®n de joyas que sirvieron para engarzar dos touchdowns seguidos, de Ebron y Mack, que dejaron el marcador 0-14 y a los Texans muy tocados. Solo hab¨ªan pasado once minutos y los de Houston estaban completamente groguis.

Los pases largos del quarterback local casi ten¨ªan ¨¦xito, pero un ¡®casi¡¯ no da yardas, el juego de carrera no aparec¨ªa, la l¨ªnea ofensiva se mostraba tan fr¨¢gil como casi siempre y DeAndre Hopkins no consegu¨ªa ser factor. La banda de los Texans estaba a punto de entrar en estado de p¨¢nico y decidi¨® jugarse un cuarto down en medio campo que termin¨® con intercepci¨®n a Watson tras un lanzamiento insensato. Un escalofr¨ªo recorri¨® la espalda de los seguidores de Houston. Por suerte para ellos, Luck sufri¨® casi de inmediato una intercepci¨®n cuando los Colts ya estaban en la yarda 17 rival, la anotaci¨®n parec¨ªa inevitable y el partido parec¨ªa casi sentenciado a las primeras de cambio.

Pero las buenas noticias no duraban mucho en la banda de Houston. Tras un nuevo tres y fuera los Colts recuperaban el bal¨®n y Jadeveon Clowney sufr¨ªa un golpe en la cabeza que le sacaba provisionalmente del partido. Mientras tanto, la l¨ªnea ofensiva de los Colts segu¨ªa protagonizando uno de sus festivales a los que nos ha acostumbrado en la segunda mitad de la temporada. Luck ten¨ªa todo el tiempo del mundo para lanzar y Mack autopistas para correr por dentro y por fuera. Era un mon¨®logo, una aut¨¦ntica paliza t¨¢ctica de los visitantes, que lo ten¨ªan todo de cara despu¨¦s de que Dontrelle Inman anotara el tercer touchdown del equipo y dejara el marcador 0-21. La secundaria de los Texans, sin el apoyo de su agresivo front seven, volv¨ªa a mostrarse como un grupo con problemas que dejaba demasiado espacio a los receptores. Eso era un fabuloso regalo de reyes Magos para un quarterback con el talento de Andrew Luck.

Taquicardias de Bill O¡¯Brien

Antes del descanso, los Texans parecieron resucitar al mismo tiempo que DeAndre Hopkins empezaba a ver balones, Keke Coutee cog¨ªa todo lo que pasaba por su lado y Deshaun Watson se jugaba la vida corriendo en cuanto ten¨ªa una puerta abierta. Pero todo acab¨® en nada cuando Bill O¡¯Brien decid¨ªa jugarse un cuarto down y uno en la yarda nueve rival. Puede parecer una decisi¨®n aceptable e incluso l¨®gica visto c¨®mo estaba transcurriendo el partido, pero en ese momento los Texans necesitaban por encima de todo romper la din¨¢mica y poner sus primeros puntos en el marcador, aunque fueran solo tres. Y m¨¢s sabiendo que empezar¨ªan atacando en el tercer cuarto. Y hasta tuvieron suerte, porque los Colts volvieron a estar cerca de anotar en los pocos segundos que les quedaron antes de irse al vestuario.

Los Colts se fueron a descansar con 191 yardas de pase, 85 de carrera y cinco minutos de posesi¨®n m¨¢s que sus rivales, que solo hab¨ªan conseguido reunir 90 de pase y 36 de carrera en dos cuartos completos.

En la segunda mitad la defensa de Houston ajust¨® y Luck dej¨® de jugar tan c¨®modo. Los Colts tuvieron que despejar en sus tres primeros ataques, pero la ofensiva local no consegu¨ªa sacar provecho de esa ventaja. Watson se empe?aba en buscar a un Hopkins muy bien cubierto por Pierre Desir. El quarterback segu¨ªa jugando muy presionado y su equipo viv¨ªa sobre todo gracias a sus carreras desesperadas, que tampoco serv¨ªan para llegar a la zona de anotaci¨®n. As¨ª, sin que ninguno de los dos equipos consiguiera poner puntos en el marcador, transcurri¨® un tercer cuarto bastante ins¨ªpido en el que unos no pod¨ªan y otros solo necesitaban que transcurriera el tiempo con los menos sobresaltos posibles.

Touchdown dudoso de los Texans

Por fin, a falta de once minutos, Keke Coutee entraba en la zona de anotaci¨®n rival tras recibir un pase de Watson 7-21. Pero fue un touchdown con sobresalto, como todo lo que les estaba sucediendo a los Texans durante el partido. En su empe?o por marcar a toda costa alarg¨® el brazo y perdi¨® el control de la pelota sobre la l¨ªnea de anotaci¨®n. Despu¨¦s de revisar la jugada los ¨¢rbitros dieron el touchdown como bueno, pero si le hubieran devuelto la pelota a los Colts por ¡®fumble¡¯ y ¡®touchback¡¯ nadie habr¨ªa podido rechistar.

Tras esa anotaci¨®n los Colts tuvieron que devolverle la pelota a sus rivales despu¨¦s de seis jugadas y de consumir solo tres minutos. Pero el ataque de los Texans sigui¨® viviendo de tirones, de cuartos downs y de carreras desesperadas de Watson y acab¨® muriendo en cuarto down en la yarda 21 de los Colts. El choque estaba decidido. Quedaban cuatro minutos pero todo el pescado estaba vendido y m¨¢s con Marlon Mack atravesando la defensa rival hasta sumar 148 yardas de carrera y comi¨¦ndose lo que quedaba de reloj. En realidad, llevaba vendido desde el final del primer cuarto. Los de Indian¨¢polis hab¨ªan sido siempre muy superiores y hab¨ªan conseguido que el encuentro se disputara siempre bajo el guion que m¨¢s les conven¨ªa. Los Texans, por su parte, necesitan mejorar mucho su l¨ªnea ofensiva, su secundaria, y probablemente su staff t¨¦cnico para dejar de ser simplemente un equipo competitivo en temporada regular y empezar a serlo en enero. Mientras, los Chiefs esperan a unos colts que ya han dejado muy claro que no han entrado en estos playoffs como simples invitados, y que tienen argumentos para ganarle a cualquiera.