As¨ª los veo: los Giants de Barkley siguen en manos de Eli Manning

Antes de empezar, una aclaraci¨®n. Os lo prometo, no le tengo ninguna man¨ªa a Eli Manning. Todo lo contrario, lleva casi 15 a?os proporcion¨¢ndome risas y diversi¨®n a raudales. ?Un crack! El Dr. Jekyll y Mr. Hyde en la NFL, el arte de ser un coloso y un lelo sin soluci¨®n de continuidad. Herman¨ªsimo y bicampe¨®n, doble MVP de la Super Bowl y despistado irredento. Hay miradas que te llegan hasta el tu¨¦tano, por lo que sea, y la de ¨¦l es una de ellas. Inolvidable, diferente y genial. Una mirada perdida capaz de encontrar un pase imposible, pero tambi¨¦n de no ver la pantalla gigante de la cuenta atr¨¢s del reloj. Genio y figura, peluche adorable y puching ball perfecto. Adoro a ese t¨ªo.

Otra cosa es que con sus 37 a?os y medio mal llevados, y su papel¨®n en las ¨²ltimas temporadas, pueda seguir jugando en la NFL. Y digo jugando, no perpetrando. Por respeto a uno mismo y a los dem¨¢s. Eso es lo que vamos a descubrir en 2018. Si los Giants ten¨ªan raz¨®n, si hab¨ªa motivos para creer que ninguno de los quarterbacks disponibles en el draft era un relevo digno y que Saquon Barkley va a convertirse en el mes¨ªas del equipo que viste el azul m¨¢s bonito del mundo. Porque no podemos olvidar que Ben McAdoo lleg¨® a los Giants para sacar lo mejor de Eli, como el entrenador perfecto para su estilo, y se ha marchado por la parte de atr¨¢s despu¨¦s de un fracaso may¨²sculo. Y Eli, no nos vamos a enga?ar, ha lucido galones desde su llegada a la NFL, sin que nadie se haya atrevido a toserle y, sobre todo, sin haber tenido nunca un juego de carrera con empaque de actor principal. Barber, Jacobs, Bradshaw, Jennings y dem¨¢s solo fueron a?o tras a?o convidados de piedra de un equipo en el que el patr¨®n del ataque era Eli, y no s¨¦ c¨®mo le sentar¨¢ a un Manning dejar de ser primer plato del banquete.

Inevitablemente, con el dise?o de equipo que han hecho Gettleman y Pat Shurmur, Eli pasar¨¢ a ser una pieza m¨¢s, y ni mucho menos la m¨¢s importante. Y pese a tener a Odell Beckham a su disposici¨®n, tendr¨¢ que empezar a hacer una cosa que nunca le ha gustado, que es bajar la vista, pasar en corto y mover cadenas, que no me imagino a Shurmur obligando a Eli a jugar como los Eagles de Chip Kelly, por mucho que fuera coordinador ofensivo de Philadelphia en esa etapa.

As¨ª que, por muy ilusionante, atrevido y diferente que haya sido lo que han hecho los Giants en este draft, por muy sobrenatural que pueda parecer Saquon Barkley, seg¨²n muchos analistas el mejor corredor que ha llegado a la NFL en el Siglo XXI, los Giants han podido dejar pasar la ocasi¨®n perfecta para encontrar a su quarterback de futuro. Y al final, el morbo de la temporada 2018 del equipo de la Gran Manzana ser¨¢ ver si han acertado o se han equivocado. Algo que, por otro lado, encanta en Nueva York, el lugar perfecto para que nos enteremos hasta el ¨²ltimo detalle, y d¨ªa a d¨ªa, de c¨®mo va el experimento. Para tranquilidad de todos, John Mara, propietario del equipo, es un se?or serio y conservador, con mucha paciencia y que odia las revoluciones. Tal vez por eso el golpe de tim¨®n que ha dado la franquicia parece m¨¢s medido que salvaje y Shurmur, que ya se ha dado alg¨²n trompazo que otro como entrenador principal, tiene la certeza de que puede trabajar con calma sin que le exijan resultados inmediatos.

ATAQUE: Odell Beckham m¨¢s Saquon Barkley

Dicho lo cual, el 99,99% de los equipos de la NFL vender¨ªa el alma al diablo por tener en su plantilla a Odell Beckham y Saquon Barkley. Dinamita por tierra y por aire. Aunque, para ser sinceros, el eterno problema de los Giants ha sido no solo la falta de un corredor estelar, sino una l¨ªnea ofensiva que abre m¨¢s carriles a la defensa que la Quinta Avenida. Y tal vez por eso tambi¨¦n el equipo ha sufrido un lifting con el fichaje de un Nate Solder con mucho oficio, pero muy maltratado por la vida a sus 30 a?os, y la elecci¨®n en segunda ronda del draft del guard Will Hernandez, al que muchos consideran uno de los grandes robos de este draft. Con ambos parece resuelto el lado izquierdo, que es el m¨¢s complicado. Tambi¨¦n parece buena soluci¨®n devolver a Ereck Flowers al tackle derecho para que resucite, pero mucho tendr¨¢n que mejorar Brett Jones (C) y John Jerry (RG) para que el a?o que viene el equipo no considere una urgencia terminar la reconstrucci¨®n de su l¨ªnea ofensiva.

Qu¨¦ os voy a decir del backfield. Si Saquon Barkley alcanza las expectativas, se convertir¨¢ en uno de los grandes protagonistas de la temporada, como no sea para tanto, hasta el r¨¦cord 3-13 de la temporada pasada va a parecer una quimera. Jonathan Stewart parece solo un paraca¨ªdas lleno de agujeros y como Barkley se lesione va a faltar tiempo para que Eli se eche al monte.

Con Odell Beckham de vuelta el grupo de receptores vuelve a ser para quitar el hipo. Sterling Shepard confirm¨® en su segundo a?o las sensaciones del primero y Evan Engram tuvo un a?o de rookie fabuloso, para convertirse en ese tight end desequilibrante que Eli lleva reclamando tanto tiempo.

Antes de terminar con el ataque, un apunte. Eligieron al quarterback Kyle Lauletta con un pick alto de 4? ronda. En otro momento me parecer¨ªa poco m¨¢s que el proyecto de un suplente. Sin embargo, no le perder¨ªa de vista. Podr¨ªa convertirse en el heredero de Eli a muy corto plazo y creo que en NY creen en ¨¦l muy en serio.

DEFENSA: Cambio a una 3-4 agresiva

El a?o pasado la defensa de los Giants solo cambi¨® un jugador titular respecto a 2016. Eso no impidi¨® que pasar de ser la segunda mejor de la NFL a pegarse un trompazo may¨²sculo. Esta vez han hecho un cambio mucho m¨¢s profundo con James Bettcher como nuevo coordinador defensivo, que se traer¨¢ su 3-4 y su agresividad extrema de los Arizona Cardinals. Para empezar se ha marchado Jason Pierre-Paul, uno de los abanderados de esta franquicia en la ¨²ltima d¨¦cada. Bettcher tambi¨¦n se ha tra¨ªdo de Arizona a Josh Mauro para completar una tremenda l¨ªnea de tres con el NT Damon Harrison y Dalvin Tomlinson, pero a Mauro le han sancionado con 4 partidos tras dar positivo, as¨ª que hasta octubre tendr¨¢n que usar a Martin (otro reci¨¦n llegado de Arizona), Okwara o incluso al rookie BJ Hill. Y eso no es malo en absoluto, porque los que necesita ahora esta defensa es probar jugadores y encontrar las piezas que funcionen.

Lo ¨²nico claro es que el puzzle de la nueva 3-4 est¨¢ por hacer, con el propio Hill, Lorenzo Carter (LB) e incluso RJ Mcintosh (DT) elegidos en un draft que todos consideran maravilloso y, sobre todo, el trade que hicieron con los Rams para conseguir a Alec Ogletree; adem¨¢s de Olivier Vernon o BJ Goodson que ya estaban en la plantilla y no deber¨ªan perder la titularidad.

La secundaria deber¨ªa seguir siendo una de las joyas de la corona de los Giants, pero un bloque magn¨ªfico en 2016 se derrumb¨® en 2017 y est¨¢ demasiado cogido por los pelos en 2018. Dominique Rodgers-Cromartie se ha ido porque ya no daba para m¨¢s y Ross Cockrell porque se lo han birlado los Panthers. Eli Apple ha pasado de ser un prometedor rookie a un jugador problem¨¢tico en el vestuario, Janoris Jenkins vuelve de una complicada lesi¨®n y Sam Beal se lesion¨® para toda la temporada poco despu¨¦s de ser elegido en el draft suplementario. Falta profundidad y demasiadas cosas pueden salir mal. Por suerte, siempre estar¨¢ Landon Collins para multiplicarse y apagar fuegos y deber¨¢n cruzar los dedos para que Darian Thompson (FS) saque su lado bueno.

Con todos esos ingredientes, Bettcher puede formar un gran bloque, pero una 3-4 como las que le gustan al ex de los Cardinals no es f¨¢cil de poner en funcionamiento y es posible que no veamos el aut¨¦ntico potencial de la defensa de los Giants hasta mediada la temporada, cuando sea demasiado tarde.

CONCLUSI?N

Todo apunta a temporada de transici¨®n en Nueva York. Aparentemente, este bloque necesitar¨¢ otra offseason y otro draft para acabar de tapar agujeros. Sin embargo, Redskins y Cowboys tampoco est¨¢n en un gran momento y todos sabemos que la NFC Este es a?o tras a?o una caja de sorpresas. En las casas de apuestas se est¨¢n moviendo en un r¨¦cord de entre 5 y 7 victorias que a m¨ª me parece muy optimista. Hasta el Bye en la semana 9 tienen un calendario complicad¨ªsimo al que podr¨ªan llegar f¨¢cilmente con solo un par de victorias. Despu¨¦s todo parece algo m¨¢s sencillo, pero no mucho. Al final puede ser verdad que los Giants puedan encontrar su quarterback de futuro con un pick alto del draft 2019 despu¨¦s de ganar 4 o 5 partidos.