Boulmerka: ¡°Cuando gana una mujer es un triunfo de la vida¡±

-?Qu¨¦ hace usted ahora?

-Estoy en Tarragona como directora de la delegaci¨®n de Argelia. Me siento muy feliz de tener a tantos deportistas aqu¨ª. Adem¨¢s, pertenezco al Comit¨¦ Ol¨ªmpico Internacional, a la Comisi¨®n Ejecutiva, y ejerzo como presidenta de la oficina Mujer y Deporte. Tengo un club de atletismo en mi ciudad, Constancia, en Argelia. Y tambi¨¦n una empresa de productos farmac¨¦uticos a nivel internacional que se llama HB.

-Sigue vinculada al deporte. ?Ha variado mucho el papel de la mujer en su pa¨ªs?

-No demasiado. Sigue habiendo un problema social y cultural con las mujeres deportistas en nuestros pa¨ªses. Creo que el Comit¨¦ Ol¨ªmpico deber¨ªa hacer m¨¢s. A¨²n estamos por debajo de la norma de participantes femeninas, y pienso que eso se deber¨ªa corregir imponiendo un porcentaje de dirigentes que sean mujeres en el deporte.

-Como primera mujer en alcanzar un oro ol¨ªmpico para Argelia (en 1.500), ?es reconocida?

-La gente me respeta y me conoce. Lo que hice es extraordinario, pero tuve muchos problemas. Los hombres cuando ganan tienen su triunfo deportivo, pero cuando en mi pa¨ªs vencen las mujeres es una victoria de la vida. Hacemos un doble esfuerzo, el deportivo y el social.

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-?C¨®mo empez¨® usted a practicar deporte en un pa¨ªs con tantos problemas para las mujeres?

-En el colegio, con juegos escolares. Un t¨¦cnico vio que ten¨ªa cualidades y empec¨¦ a entrenarme. ?ramos un grupo muy sano y con buen ambiente, me lo pas¨¦ genial.

-Pero...

-En 1991, cuando gan¨¦ mi primera medalla en el Mundial de Tokio, el im¨¢n del pueblo empez¨® a decir que yo no era una buena musulmana. Dec¨ªa que estaba en contra del islam por correr con pantalones cortos y, seg¨²n ¨¦l, mostrarme desnuda. Eso gener¨® pol¨¦mica en mi localidad, hubo gente a favor, otra en contra... Provoc¨® que me amenazaran y que pensara en la muerte. Tanto mi familia como yo lo pasamos mal. Hubo mucho sufrimiento.

-De ah¨ª su rabia en Barcelona 92 cuando logr¨® el oro. ?C¨®mo valora aquello?

-Fue un sue?o irrepetible. A veces no s¨¦ si soy un ¨¢ngel o soy el diablo, por todo lo que represento en mi pa¨ªs. Soy musulmana y por hacer deporte no significa que no respete la religi¨®n. Considero que debemos seguir haciendo esfuerzos sociales para que no exista esta creencia, aunque no puedes controlar la opini¨®n de la gente.

-?En todos los pa¨ªses musulmanes ocurre lo mismo?

-S¨ª, es generalizado. Hay pa¨ªses que est¨¢n pasando por muchos problemas. Libia cada vez trae menos deportistas a los Juegos Mediterr¨¢neos. Mientras sigan estas tendencias sociales y religiosas ser¨¢ dif¨ªcil que la mujer se emancipe.

-?Qu¨¦ supuso para usted ganar el Pr¨ªncipe de Asturias?

-Me siento espa?ola, porque me prepar¨¦ parte de mi vida aqu¨ª. Me encanta esta naci¨®n y su gente. Fue un orgullo recibir ese premio. Dije a mis deportistas que se vistieran con traje y corbata como muestra de respeto a Espa?a y tambi¨¦n al Rey en el desfile inaugural. Fuimos los ¨²nicos.

-El terrorismo afect¨® a Siria y en T¨²nez hay problemas con los refugiados. ?Y Argelia?

-Nosotros superamos el terrorismo en los 90. No tenemos tantos problemas de ese tipo.

-?Qu¨¦ le parecen estos Juegos?

-No se fomenta la interculturalidad y no hay actividades. Los deportistas compiten y se van al hotel. Lo importante es la interacci¨®n y la cultura.