Cinco intercepciones de Big Ben hundieron a los Steelers
Roethlisberger tuvo uno de los peores partidos de su carrera frente a los Jacksonville Jaguars y confirm¨® las preocupantes se?ales sobre su cuesta abajo.
Ben Roethlisberger jam¨¢s hab¨ªa lanzado cinco intercepciones en un s¨®lo partido hasta hoy. En un partido lamentable frente a los Jacksonville Jaguars, el quarterback de los Pittsburgh Steelers hundi¨® a su equipo en una actuaci¨®n que sirve para acrecentar las preocupantes se?ales que emite un jugador que parece ya en su cuesta abajo en la NFL.
La defensa de los Jacksonville Jaguars no es ninguna broma, eso desde luego. Jalen Ramsey tuvo una jornada m¨¢s la capacidad de demostrar que, a pesar de estar s¨®lo en su segunda temporada, ya es un cornerback ¨¦lite en la liga. Con su trabajo y su presi¨®n sobre los receptores de los Steelers, sobre todo sobre Antonio Brown, consigui¨® sacar de quicio al ataque de Pittsburgh.
?l s¨®lo sum¨® una de las cinco intercepciones, pero apareci¨® en el campo casi en cada instante. Su compa?ero safety, Tashaun Gipson, se llev¨® dos de los regales de Big Ben, Barry Church otro y el linebacker Telvin Smith complet¨® la media decena. Dos de ellas fueron retornadas para touchdown y fueron la gran clave para que los Steelers recibieron 30 puntos de los Jaguars sin poder anotar nada m¨¢s que 9.
Y, quiz¨¢s exagerando, la impresi¨®n que dio por el campo Ben Roethlisberger fue a¨²n peor que las cinco intercepciones. Vale, sin quiz¨¢s: es una exageraci¨®n. Nada es peor que que tu quarterback de cinco balones al rival.
Lo que pasa es que Big Ben ya el a?o pasado pareci¨® estar m¨¢s viejo, a ojos vista, de lo que cabr¨ªa esperar, y en este inicio de temporada esa sensaci¨®n se ha acrecentado.
Durante toda la offseason ha ido dejando perlas aqu¨ª y all¨¢ de que se estaba pensando el volver a la NFL o no este a?o, y que iba a tomar la decisi¨®n de a?o en a?o. Pudo parecer que lo dec¨ªa por decir y, sin embargo, vi¨¦ndolo por el campo esas dudas adquieren todo el significado. Lento, pesado, casi torp¨®n, y con una falta de recursos notable. No hay que olvidar que Big Ben fue un jugador que vivi¨® much¨ªsimo de su capacidad f¨ªsica, de su aguante en el pocket y de sacar jugadas de la manga cuando todo parec¨ªa perdido.
Ahora es dif¨ªcil imaginarle en ese rol. La cuesta abajo f¨ªsica se le nota m¨¢s a ¨¦l que a otro tipo de pasadores. No hac¨ªa falta una tarde cinco intercepciones para darse cuenta de ello, porque era una evidencia, pero s¨ª que supone un aldabonazo de cruda realidad para la franquicia.
Esto no quiere decir que no pueda tener buenos partidos de aqu¨ª en adelante o que a¨²n no le queden gotas de inmensa calidad aqu¨ª y all¨¢. Un s¨®lo partido, por malo que haya sido, no es indicativo de lo que puede ser toda la campa?a. Lo que si que da toda la sensaci¨®n es de que los Pittsburgh Steelers tienen un serio problema en el puesto de quarterback porque su titular est¨¢ m¨¢s cerca de la retirada, f¨ªsica y mental, con cada partido.