La injusta expulsi¨®n de Lane ser¨¢ decisiva para los playoffs

Es genial. Nos pasamos toda la offseason discutiendo sobre la calidad de unas plantillas y otras, diseccionando sus fichajes, sus p¨¦rdidas, sus elecciones en el draft, la calidad de su staff y de su plantilla, su margen contra el cap¡­ Y lo primero que volvemos a descubrir a?o tras a?o, como si fu¨¦ramos bebes que renacemos cada doce meses, es que hay muchos otros factores que influyen en el resultado de un partido, que marcan su desarrollo y que pueden tener una importancia decisiva en enero, cuando llega el momento de la verdad.

Esos intangibles y peque?os detalles casi nunca nos importan demasiado. Cuando acaba un partido, solemos poner sobre una balanza el juego global de uno y otro equipo y si el resultado final est¨¢ acorde con el juego desarrollado apelamos a la justicia po¨¦tica o damos por hecho que seguramente ese suceso puntual no habr¨ªa alterado tanto el resultado final. Por algo ser¨¢ que los grandes equipos cuidan hasta donde pueden esos detalles con mimo. En realidad, el famoso mantra ¡¯Do your Job¡¯ no deja de ser un recuerdo a cada jugador de que tiene que hacer en cada momento exactamente lo que debe, sin tomarse justicias por su mano, sin intentar genialidades imprevistas ni buscar hinchar las estad¨ªsticas personales a costa del equipo. Una forma de primar el bloque sobre el individuo. Y no hace falta que os explique que en la NFL eso es garant¨ªa de ¨¦xito.

Jugadores actuando como ni?os

Hemos visto durante muchos a?os a equipos como los Bengals destrozar su temporada porque a un jugador o a otro se iba la pinza en el momento m¨¢s inoportuno de un partido. Y el origen de eso est¨¢ siempre en problemas de disciplina dentro de un vestuario. Tambi¨¦n he visto a Ndamukong Suh destruir una y otra vez el buen trabajo de toda la defensa, y tambi¨¦n el suyo propio, haciendo una ni?er¨ªa en tercer down y largo con la jugada ya finalizada. Y ayer vi a Jeremy Lane dar un pu?etazo absurdo para destrozar todas las opciones de los Seahawks contra los Packers.

Perd¨®n. Esperad un momento. Ahora que lo pienso, no vi a Jeremy Lane dar ning¨²n pu?etazo a nadie. M¨¢s bien le vi entrar en una disputa con Davante Adams con algunos agarrones en los que, curiosamente, pareci¨® tener m¨¢s culpa el receptor de Green Bay que el cornerback de Seattle.

La conclusi¨®n es que en el minuto 9:37 del primer cuarto del duelo en la cumbre entre Packers y Seahawks, una rivalidad que comienza a tomar tintes ¨¦picos, Aaron Rodgers fue interceptado por Nazair Jones en la yarda 36 del campo de Seattle y el defensive tackle de 138 kilos de peso corri¨® durante 64 yardas en las que hizo temblar el c¨¦sped de Lambeau Field y lleg¨® a la end zone rival. 0-7 en el marcador y p¨¢nico en el reino del queso.

Otra vez os pido perd¨®n. Creo que he vuelto a precipitarme. De 0-7 nada. Dos pa?uelos volaron por el cielo para dejar el pick six en una simple intercepci¨®n a secas, bal¨®n para Seattle en la yarda 50 y pelillos a la mar.

?rbitros acumulando errores

Durante algunos minutos no entend¨ª nada. ?Dos pa?uelos! ?Por qu¨¦? El primer lleg¨® por un bloqueo ilegal de Cliff Avril sobre Aaron Rodgers que solo han visto los seguidores m¨¢s ac¨¦rrimos de los Packers. El resto seguimos estupefactos desde la jornada del domingo, intentando entender qu¨¦ es exactamente un bloqueo ilegal por la espalda ahora que los ¨¢rbitros han abierto un mundo nuevo de penalizaciones en ese tema.

El segundo pa?uelo es a¨²n m¨¢s grave. Porque fue m¨¢s all¨¢ de una penalizaci¨®n. Jeremi Lane fue expulsado del partido por darle un supuesto pu?etazo a Davante Adams que nadie ha visto. Por muchas veces que miro la jugada, veo m¨¢s bien al receptor de Green Bay haciendo un doble face mask escandaloso y arrojando al suelo a Lane que, b¨¢sicamente, intenta defenderse del ataque de un tipo desbocado. Por otra parte, una jugada que se repite en muchas ocasiones en un partido sin que suela ir a m¨¢s y que en todo caso mereci¨® un pa?uelo para Adams y nunca una expulsi¨®n por agresi¨®n.

Por esa regla de tres, habr¨ªa que empezar a expulsar a todos los protagonistas de los empujones que se suene producir entre jugadores de la l¨ªnea al final de casi cada jugada.

M¨¢s importante de lo que parece

Esas dos penalizaciones inexistentes pueden parecer intrascendentes despu¨¦s de ver el Packers 17 ¨C Seahawks 9 del domingo. Y m¨¢s despu¨¦s de ver la incompetente l¨ªnea ofensiva de Seattle. Sin embargo, creo que la expulsi¨®n de Lane marc¨® decisivamente el partido y quiz¨¢ fuera lo que marcara la balanza en un choque en el que los Packers no anotaron un solo punto en toda la primera mitad.

Tras la expulsi¨®n de Lane, segundo cornerback de la ¡®Legion of Boom¡¯, Shaquill Griffin tom¨® su lugar y por ah¨ª se desangraron los Seahawks. El cornerback rookie elegido en tercera ronda se convirti¨® en la v¨ªctima propiciatoria que desangr¨® Aaron Rodgers en el altar de sacrificio del partido. El quarterback de los Packers, que un domingo m¨¢s demostr¨® que sabe sacar m¨¢s partido que ning¨²n jugador en la historia de los peque?os detalles y de cualquier ventaja, por insignificante que parezca, carg¨® todo el juego de pase sobre Griffin que termin¨® sepultado por un bombardeo constante y pidiendo la hora.

Implicaciones en postemporada

Por muy mal que est¨¦ la l¨ªnea ofensiva de Seattle, fue ese detalle, un doble clamoroso error arbitral, el que marc¨® el desarrollo de un partido que al final de la temporada puede ser decisivo. Nadie duda que ambos equipos estar¨¢n en postemporada salvo sorpresa, su r¨¦cord puede ser muy similar, no volver¨¢n a enfrentarse y el primer criterio de desempate ser¨¢ el enfrentamiento directo entre ambos. Una expulsi¨®n inexplicable podr¨ªa marcar el factor campo en los playoffs de la conferencia nacional cuando la temporada acaba de comenzar.

Porque tampoco estar¨ªa mal que el ¡®Do Your Job¡¯ que ya inspira no a uno, sino a bastantes equipos de la NFL, tambi¨¦n fuera tenido en cuenta por Roger Goodell en lo que se refiere al trabajo arbitral. Para que algunos intangibles decisivos dejen de ser incontrolables.

Y ahora, a esperar la sanci¨®n de Lane y el consiguiente informe del comit¨¦ arbitral explicando que los cebras lo hicieron fenomenal. Una l¨¢stima.