Romo dijo a Witten: "Los Cowboys antes que la amistad"
El ya ex quarterback de la franquicia de Dallas fue esencial para mantener la unidad del vestuario cuando fue mandado al banquillo por Dak Prescott.Patriots-Eagles: Super Bowl LII en vivo
Tony Romo, ex quarterback de los Dallas Cowboys y nuevo flamante fichaje como comentarista de la NFL en la CBS, siempre ha tenido fama de ser un extraordinario compa?ero, alguien con quien ir hombro con hombro a la batalla y el t¨ªpico l¨ªder que es capaz de estar junto a la pieza m¨¢s peque?a y prescindible del equipo al mismo tiempo que cena con el propietario de la franquicia, Jerry Jones, teniendo el respeto de ambos. Es una tarea de herc¨²lea dificultad y para la que est¨¢n preparadas muy pocas personas.
El a?o pasado tuvo ocasi¨®n de demostrarlo por ¨²ltima vez, y sali¨® del envite con matr¨ªcula de honor.
Tras su lesi¨®n en pretemporada Dak Prescott, rookie, ocup¨® su puesto de QB titular. El equipo cogi¨® un nivel de juego extraordinario y, con ¨¦l, llegaron las victorias. Una ley no escrita pero esencial del deporte en general, y de la NFL en particular, es que lo que est¨¢ funcionando no se toca, as¨ª que cuando Tony Romo se recuper¨® de su lesi¨®n, en las manos de Jason Garrett, entrenador del equipo, estaba una decisi¨®n en apariencia dif¨ªcil pero que result¨® muy sencilla: seguir con el rookie o dar el puesto de nuevo a su leg¨ªtimo due?o, el veterano. Fue lo primero, claro, que en la victoria todo es m¨¢s sencillo.
En ese momento, Romo se pudo convertir en una bomba en el vestuario. Ese vestuario le adoraba. Le adora. Si el jugador hubiese mostrado su disgusto bien podr¨ªa haberse comenzado un peque?o incendio, un peque?o mot¨ªn, que a saber que consecuencias tendr¨ªa. El gran QB lo sab¨ªa. Ese poder era suyo para hacer lo que quisiera.
Y lo que hizo fue, exactamente, lo que quiso: seguir siendo el gran compa?ero y el gran profesional de equipo que fue, que es. Romo cogi¨® a su mejor amigo en la plantilla, Jason Witten, el tight end que entr¨® junto a ¨¦l en el equipo en 2003 y le orden¨® que pusiera a los Dallas Cowboys por encima de su amistad, que su situaci¨®n no deb¨ªa ocupar ni un s¨®lo segundo en su cabeza y que el ¨²nico objetivo era ganar y ayudar a los chavales, el citado Prescott y Zeke Elliott por encima de todos, a pelear por el anillo de la Super Bowl.
No es de extra?ar que Jerry Jones le haya reverenciado hasta el final. Todo lo que ha hecho Tony Romo por los Dallas Cowboys ha sido ejemplar. Siempre. En cada instante.