La inevitable decisi¨®n entre Tom Brady y Jimmy Garoppolo
Los New England Patriots tienen un a?o para decidir que camino seguir¨¢n en la posici¨®n de quarterback y, por loco que suene, no est¨¢ clara.
Tom E. Curran es un buen conocedor de las interioridades de los New England Patriots. Es un periodista de los de bol¨ªgrafo y libreta culera. De los que se levanta, se asea, desayuna, da un beso a su se?ora y a sus hijos y se va a los cuarteles generales de F¨®xboro a echar el d¨ªa. Me he inventado lo primero, que no lo s¨¦, pero pill¨¢is la idea.
A lo que voy es que es de esos que sabe mucho m¨¢s de lo que cuenta porque es su trabajo. Ha de cultivar relaciones con empleados de la franquicia, ha de tener los tel¨¦fonos y guardar las distancias con los entrenadores, ha de ser simp¨¢tico y accesible a los jugadores. Su vida, su texto de todos los d¨ªas, necesita de que esa rutina funcione y de que le conf¨ªen secretos inconfesables para demostrar que es de fiar mientras, en equilibrio, nos cuenta lo que puede sobre el funcionamiento del equipo.
No conozco otra manera de cubrir las noticias de un entorno concreto, con gente que es gente las 24 horas del d¨ªa y mareas sociales y personales golpeando en cada orilla.
Por eso cuando Tom E. Curran escribe un art¨ªculo para la NBC diciendo que los New England Patriots est¨¢n a menos de un a?o de verse en la tormenta de decidir entre Tom Brady y Jimmy Garoppolo no me lo tomo a risa, aunque desde fuera lo parezca. Seg¨²n el periodista el debate es muy real dentro de la franquicia.
Y, n¨²meros en mano, lo aterrador es que tiene sentido.
Tom Brady tiene 39 a?os. Est¨¢ en la cima de su carrera y tiene 39 a?os. Ha ganado dos Super Bowls de las ¨²ltimas tres disputadas y tiene 39 a?os. Su estado f¨ªsico es envidiable y su conocimiento del juego est¨¢ en m¨¢ximos hist¨®ricos ya no para ¨¦l sino para cualquiera, y tiene 39 a?os.
Jimmy Garoppolo lleva tres a?os en la plantilla y el pr¨®ximo marzo ser¨¢ agente libre. Compararle con el quarterback m¨¢s grande de todos los tiempos causa hilaridad. Lo entiendo. Sin embargo, las peque?as muestras de talento que ha dejado aqu¨ª y all¨¢ en entrenamientos, pretemporadas y partidos como titular, sobre todo en el inicio de la pasada temporada, le han convertido en una de las figuras m¨¢s apetecibles de toda la NFL.
Y eso, queridos, es la gran clave de todo este asunto.
Porque, si se mantiene el statu quo actual, en la pr¨®xima agencia libre Jimmy Garoppolo va a ser uno de los jugadores con m¨¢s ofertas, tanto en n¨²mero de ellas como en cantidad de millones, de la liga. Y los Patriots, si le quieren retener, tendr¨¢n que igualar esas ofertas, algo que cuadra poco con compartir plantilla con Tom Brady.
En New England saben esto y por eso han escuchado ofertas este a?o por el jugador. Pero algo me dice que, en ese proceso, descubrieron que le quieren como el heredero de Brady a toda costa.
S¨®lo as¨ª se explica que hayan pedido hasta dos primeras rondas por ¨¦l, algo prohibitivo para los equipos que m¨¢s han preguntado por Garoppolo (los Cleveland Browns), ?incluido el n¨²mero uno global!, y, de la misma manera, as¨ª se explica la estrategia del draft de este a?o de los Patriots, que ha sido bien diferente a la habitual.
En vez de cargarse de elecciones para otros a?os lo que han decidido es cambiar a?os de contrato por veteranos. La ventaja que tienen los rookies es que puedes disponer de sus servicios durante cuatro a?os, cinco en el caso de las primeras rondas. Eso les da un enorme valor. Cuando, como han hecho los Patriots en esta ocasi¨®n, cambias tus elecciones en el draft por Brandin Cooks, Kony Ealy, Dwayne Allen o Mike Gillislee, todos ellos con contratos inferiores a los de los rookies, lo que est¨¢s haciendo es apostar al ya en vez de al ma?ana.
Sumemos todo lo anterior y veamos con perspectiva lo que significa: un QB al que para renovar hay que pagar cantidades de titular y por el rechazas ofertas muy notables, una leyenda con 39 a?os de edad, un equipo formado para competir con urgencia sabiendo que en tres a?os el equipo no tendr¨¢ tantas opciones como si hubiesen gastado sus elecciones del draft en rookies. En efecto: la decisi¨®n est¨¢ sobre la mesa.
Los New England Patriots est¨¢n en un plan de un a?o porque en 2018 tendr¨¢n que elegir entre Garoppolo y Brady, y tras lo visto en esta offseason nadie puede descartar que la elecci¨®n no sea el primero.
Ser¨ªa un cataclismo monumental, pero en esta liga ya hemos visto a Steve Young sustituir a Joe Montana en los San Francisco 49ers, a Aaron Rodgers hacer lo propio con Brett Favre en los Green Bay Packers y a Andrew Luck quitarle el sitio a Peyton Manning en los Indianapolis Colts. En los tres casos contra la voluntad de los veteranos. En los tres casos con las leyendas jugando para otros equipos, algo inimaginable meses antes. Si en New England creen, y as¨ª nos lo han hecho creer a todos los dem¨¢s, que Garoppolo es el verdadero heredero de Brady, la inevitable decisi¨®n entre ambos est¨¢ m¨¢s cerca de lo que parece.