Cuento de hadas: Ichiro da home run en ¨²ltimo turno en Seattle
El d¨ªa que los Mariners le hicieron un homenaje, el japon¨¦s se vol¨® la barda con los Marlins.
data:image/s3,"s3://crabby-images/07825/078257857101f05118bbbc3127f11c4d3b794f75" alt="SEATTLE, WA - APRIL 19: Ichiro Suzuki #51 of the Miami Marlins hits a solo home run off of relieft pitcher Evan Marshall #41 of the Seattle Mariners during the ninth inningof a game at Safeco Field on April 19, 2017 in Seattle, Washington. The Marins 10-5. Stephen Brashear/Getty Images/AFP
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Si esa fue la ¨²ltima visita de Ichiro Suzuki a Seattle como pelotero en activo, el japon¨¦s se encarg¨® de que fuera memorable.
El mismo d¨ªa en que los Mariners, equipo con el cual jug¨® sus primeros 12 a?os en Grandes Ligas, le rend¨ªan un homenaje al Novato del A?o de 2001 con la entrega de un mu?eco de colecci¨®n en el que se le ve con la franela de Seattle y la de Miami, Ichiro regal¨® algo a¨²n m¨¢s importante: un recuerdo imborrable.
En su ¨²ltimo turno del partido y _ con 43 a?os de edad, posiblemente la ¨²ltima vez que pise Safeco Field como pelotero en activo _ Ichiro se enred¨® con el primer lanzamiento que le vio a Evan Marshal en la novena entrada para depositar la esf¨¦rica por detr¨¢s de la barda de jard¨ªn central.
El cuadrangular del nip¨®n no pudo evitar la derrota de los Marlins 10-5 ante su ex equipo. Tampoco pudo evitar la ovaci¨®n de sus antiguos aficionados, as¨ª como tampoco pudo evitar que peloteros rivales lo felicitaran mientras recorr¨ªa las bases. As¨ª de grande es el menudo pelotero.
¡°Era mi ¨²ltimo turno, obviamente mi ¨²ltima oportunidad. Como estaba la pizarra, eso era lo que quer¨ªa batear, justo eso¡±, dijo Suzuki por medio de un int¨¦rprete sobre su jonr¨®n.
Ichiro, quien a lo largo de sus 17 temporadas ha protagonizado la leyenda urbana de que puede batear home runs a voluntad y que podr¨ªa ganar sin problemas un Home Run Derby si se lo propusiera, como lo dijo su coach de bateo la temporada pasada, un tal Barry Bonds, simplemente no pod¨ªa creer el momento en el que la pelota super¨® la barda y asegura que tuvo que pellizcarse para cerciorarse que no fuera un sue?o.
?l y casi todos en el estadio.
No es normal ver a un pelotero jugar a los 43 a?os, y mucho menos disparando vuelacercas. Pero de Ichiro uno se acostumbr¨® a esperar lo inesperado, especialmente en Seattle, donde conect¨® 2,533 de sus 3,031 imparables en Grandes Ligas, incluyendo 99 de sus 114 home runs. Pese a su avanzada edad, Ichiro dijo que espera volver a jugar en Safeco.
Apenas 114 cuadrangulares en 17 a?os de carrera, eso habla de lo especial del momento del mi¨¦rcoles por la tarde. Tanto que Kyle Seager, quien lleg¨® a Seattle como novato en 2011, un a?o antes de que Ichiro fuera cambiado a los Yankees, tuvo que extenderle la mano mientras Suzuki recorr¨ªa las almohadillas.
¡°Nunca quieres que el rival pegue home run, pero en ese momento, fue algo muy especial. Sent¨ª escalofr¨ªos¡±, reconoci¨® Seager.
Y con toda certeza no fue el ¨²nico.
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