Carey Price: un indio Ulkatcho contra el gafe en la Stanley Cup
La madre del portero de los Montreal Canadiens fue jefe de esta naci¨®n nativa de la Columbia Brit¨¢nica (Canad¨¢). ?l, lucha para ganar el primer t¨ªtulo de la NHL para los Habs desde 1993. Argentina-Chile en vivo online: Copa Panamericana femenina de hockey
Sin P. K. Subban, ahora en la meca de la m¨²sica estadounidense (Nashville), s¨®lo le queda un jefe a la tribu de los Montreal Canadiens: Carey Price. Nunca mejor dicho. El canadiense es uno de los mejores porteros de la NHL y busca la primera Stanley Cup para los Habs desde 1993 mientras por sus venas corre sangre india.
Su madre es Lynda Price, una antigua jefe de la tribu Ulkatcho, en la Columbia Brit¨¢nica, que apenas llega a los ochocientos miembros. ¡°Ha ido a la facultad y ahora tiene un t¨ªtulo en Derecho, se va a presentar para jefe de nuevo. Es una l¨ªder natural¡±, dec¨ªa su hijo esta misma semana en ESPN. Orgulloso representante de una comunidad minoritaria que lucha por no perder sus ra¨ªces ancestrales, la vida de Carey Price arranca en una zona casi inh¨®spita. Entre parques naturales inmensos, se cri¨® en Lake Anahim, donde pr¨¢cticamente todos son familiares m¨¢s o menos cercanos. Su padre, Jerry (tambi¨¦n portero hasta categor¨ªa junior), hac¨ªa todos los d¨ªas 320 kil¨®metros para que Carey pudiera entrenarse y jugar en una de las ligas infantiles canadienses. La entrega a la pasi¨®n compartida por ambos le llev¨® a invertir 13.000 d¨®lares en una avioneta para poder hacer el trayecto volando en los d¨ªas climatol¨®gicamente ben¨¦volos. Un esfuerzo que dio sus frutos. El chaval acabar¨ªa llegando a la NHL por la puerta grande cuando fue elegido el n¨²mero 5 en el draft de 2005.
Price, un icono en Montreal (su imagen adorna un lateral entero del Bell Center), es la gran esperanza para los devotos de los Canadiens. Ganador del Vezina Trophy al mejor portero de la liga, cinco veces All-Star y oro en los Juegos de Sochi 2014, su larga lesi¨®n en la temporada pasada dinamit¨® a los Habs hasta dejar el equipo hecho unos zorros. Pero Carey ha vuelto. Y con ¨¦l, sus animosos fans. ¡°No paran de mandarme invitaciones de boda pidi¨¦ndome que sea el padrino¡ Y son la mayor¨ªa en septiembre, que estoy un poco liado, as¨ª que tengo que responder que no¡±. Si a los Canadiens les da por saltar la banca y levantar la Stanley Cup, su buz¨®n no va a ser lo suficientemente grande para recibir tanta invitaci¨®n.