Richard Sherman ri?e a Pete Carroll por sus decisiones

?Conoc¨¦is a Richard Sherman? Es un gran, pero gran, cornerback de los Seattle Seahawks. Uno de los integrantes de la fascinante, y a buen seguro recordada por los siglos de los siglos, 'Legion of Boom', que cuando una unidad en la NFL tiene nombre es que es cosa seria. Y, adem¨¢s, es uno de los tipos que m¨¢s dinero va a ganar en el futuro en el mundo del espect¨¢culo period¨ªstivo deportivo en los Estados Unidos. Lo aseguro. Porque cuando uno tiene la bocaza de Sherman las cosas suelen ir as¨ª.

Ayer volvi¨® a ejercer de hombre con opini¨®n para todo. Opini¨®n firme, decidida y expresada con la vehemencia del que siempre tiene la raz¨®n. Del que sabe de todo. Oro puro, por supuesto, para lo que antes os comentaba.

En un momento del partido entre su equipo y Los Angeles Rams, disputado ayer, sse le vio encararse en la banda nada menos que con el coordinador ofensivo, Darrell Bevell, y con su entrenador jefe, Pete Carroll. Con sus modales habituales, por supuesto. A voces y con absoluto dominio de todo cuanto ocurre en el universo, ese en el que ¨¦l es el centro.

Les ech¨® la bronca, a dos superiores, por su decisi¨®n de lanzar un pase en la yarda uno. Es comprensible el enfado, que esta gente perdi¨® una Super Bowl por lanzar un bal¨®n desde la yarda uno, pero no parece que Sherman est¨¦ en disposici¨®n, no a¨²n al menos, de dar ¨®rdenes a Carroll y Bevell. No, desde luego, dada su posici¨®n jer¨¢rquica.

"No me gusta que pasemos la bola en la yarda uno. Por suerte fue incompleto, pero no voy a dejar que se contin¨²e haciendo esto". Ah¨ª lo ten¨¦is. As¨ª explic¨® su postura, sus gestos, su enfado. ?l no va a dejar que se siga haciendo esto.

Este mismo a?o ya hab¨ªa montado un n¨²mero igual de espectacular cuando, en el partido contra los Atlanta Falcons, se enfrent¨® con su compa?ero Kam Chancellor en la banda por una jugada de Julio Jones. La mayor¨ªa de la defensa acudi¨® a calmarle y apenas lo consiguieron.

Huelga se?alar la de veces que ha menospreciado a sus rivales, que les ha golpeado sin venir a cuento y que les ha explicado como de "sorry receivers" son o como de miedo tienen los QBs, como Aaron Rodgers, a pasar a su lado del campo.

Esta misma semana, por ejemplo, calific¨® los partidos de los jueves de la NFL como un "festival de mierda" y que ten¨ªan que ser eliminados. Estoy convencido de que, llegado el caso, renunciar¨¢ al porcentaje del beneficio de casi 1.000 millones de d¨®lares que generan esos partidos, y que el 51% se va a sueldos de jugadores, para quitarles del calendario. No os quepa duda de que luchar¨¢ a brazo partido en el pr¨®ximo convenio colectivo para ganar menoss dinero. ?l y todas las dem¨¢s partes implicadas, claro.

Richard Sherman est¨¢ feliz en su faceta de cr¨ªtico absoluto, con opini¨®n constante, sobre todo los asuntos de la liga. No cabe duda de que eso tiene gran valor si lo hace dentro de la coherencia y los cauces adecuados. Pero cuando ya se permite el lujo de criticar, con sus modos habituales, a su propio entrenador por las jugadas que decide en cada momento, es posible que el personaje haya devorado al jugador, aunque a algunos nos resulte rid¨ªculo.

Le va a ir bien, que duda cabe