Dos intercepciones quir¨²rgicas sentenciaron a los Falcons
Aunque Atlanta tuvo la victoria en su mano hasta los minutos finales, los Chiefs fueron casi siempre mejores en ataque y defensa con un Eric Berry decisivo.
New England Patriots - Atlanta Falcons en directo
El partido fue una aut¨¦ntica locura. Es verdad. Pero es tan cierto como que los Chiefs fueron casi siempre mejores y dominaron en el campo a los dos lados del bal¨®n. Atlanta estuvo a punto de llevarse la victoria m¨¢s por la genialidad de su ataque, y por un ¨²ltimo cuarto jugado a la desesperada, que por el aut¨¦ntico rendimiento de cada uno.
Sin embargo, dentro de la ruleta rusa de emociones que puede esconder la realidad de lo sucedido, lo que nos quedar¨¢ en la retina fueron dos intercepciones decisivas que costaron la victoria a Atlanta. Una al final de la primera mitad, cuando Matt Ryan intentaba romper el empate en el marcador a la desesperada, a falta menos de un minuto, y Eric Berry le robaba la cartera y firmaba un ¡®pick six¡¯. Del 13-13 se pasaba a un 13-20, y suerte que despu¨¦s, en escasos 37 segundos, Ryan fue capaz de enmendar de alguna manera el error acercando a su equipo a distancia de field goal, para que Matt Bryan metiera una impresionante patada de 59 yardas.
El segundo gran error tuvo a los mismos protagonistas. Quedaban cuatro minutos y medio y Aldrick Robinson anotaba un touchdown que adelantaba a su equipo 28-27. Los Falcons decid¨ªan intentar la conversi¨®n de dos para dejar a Kansas City a tres puntos, y que un posible field goal en contra forzara el tiempo extra. Sin embargo, el lanzamiento de Ryan a Hooper volvi¨® a ser interceptado por Berry, que llevaba la pelota hasta la end zone contraria. Del posible 30-27 se pasaba a un 28-29 que le costaba la victoria a los locales. Kansas City no tuvo ning¨²n problema para consumir los cuatro minutos y medio restantes y ganar el partido.
Entre esas dos jugadas decisivas, vimos a un equipo de Atlanta que empez¨® mete¨®rico con un primer drive portentoso, con Freeman y Julio Jones jugando a sus anchas, pero que desde entonces ya nunca estuvo a gusto. Fundamentalmente, porque su l¨ªnea ofensiva casi nunca pudo con Justin Houston, Tamba Hali, Chris Jones y compa?¨ªa. Y menos desde que se lesion¨® su tackle derecho, Jake Matthews, que sufri¨® un esguince de rodilla. Con ese panorama, Matt Ryan no ten¨ªa tiempo para lanzar, y aunque aguantaba la pelota como un valiente hasta el ¨²ltimo instante, siempre pasaba forzad¨ªsimo donde pod¨ªa en vez de donde quer¨ªa. Eso baj¨® muchos puntos el rendimiento de un ataque que todo el a?o ha basado su ¨¦xito en la capacidad de llevar siempre la iniciativa y que ante los Chiefs raras veces pudo poner su maquinaria en marcha.
No importa que Julio Jones volviera a superar las 100 yardas (113), que Ryan rozara las 300 de pase (297), que entre Freeman y Coleman superaran las 100 de carrera (el primero consigui¨® dos touchdowns terrestres)¡ Los n¨²meros de ese ataque fueron muy parecidos a los de siempre, sin embargo, solo en series puntuales consiguieron que su juego se pareciera al que son capaces de desarrollar casi cada semana.
Enfrente, los Chiefs fueron todo lo contrario. Alex Smith ten¨ªa todo el tiempo del mundo para lanzar y, adem¨¢s, lo hac¨ªa con precisi¨®n y toda la mala intenci¨®n del mundo. Andy Reid volvi¨® loca a la defensa rival con una variedad de jugadas incre¨ªble que los Falcons nunca fueron capaces de interpretar. Adem¨¢s, el quarterback volvi¨® a dar muestras de la transformaci¨®n que le est¨¢ convirtiendo este a?o en un jugador mucho m¨¢s peligroso. Ahora no se limita a lanzar pases cortos y seguros. Mucho m¨¢s agresivo, busca el pase profundo y le hizo un destrozo a Atlanta con su conexi¨®n con Travis Kelce. El tight end cogi¨® 8 balones para 140 yardas y fue un dolor de cabeza imparable. Pero, adem¨¢s, la irrupci¨®n de Tyreek Hill le ha dado a este ataque el punto de genialidad y desparpajo que le faltaba. El rookie hace da?o por tierra y aire, se revuelve en d¨¦cimas de segundo, hace cambios de direcci¨®n que rompen una y otra vez la cintura a sus rivales, y tiene una aceleraci¨®n casi sobrenatural.
Con esos ingredientes, y la infalibilidad de un Alex Smith que solo marr¨® cuatro lanzamientos (21 de 25 para 270 yardas y un touchdown), la defensa de Atlanta casi siempre estuvo grogui. Y por si fuera poco, los Chiefs se sintieron tan superiores que intentaron dos cuartos downs que acabaron en touchdown. El primero puede parecer hasta l¨®gico, porque estaban en la yarda 3 contraria. Pero el segundo fue en su propia yarda 45, cuando un enga?o de punt termin¨® con una carrera de 55 yardas de Albert Wilson para touchdown.
Ahora, Atlanta est¨¢ 7-5 y todo apunta a que tendr¨¢ por delante una dura batalla con Tampa para ganar su divisi¨®n y merecer una plaza en postemporada. Mientras, los Chiefs no solo se ponen 9-3, adem¨¢s dejan muy claro que ya tienen esa quinta marcha que antes les faltaba, y que ahora les convierte en aut¨¦nticos y leg¨ªtimos aspirantes a ganar el anillo.