El domingo que la NFL (y Estados Unidos) necesitaba

?O¨ªs ese suspiro de alivio? Es la NFL soltando todo el aire que llevaba aguantando desde el comienzo de la temporada con las audiencias televisivas. Estas hab¨ªan bajado en torno al 15% respecto al a?o pasado y aunque de puertas afuera no hab¨ªa preocupaci¨®n lo cierto es que en un negocio de estas dimensiones cada estornudo se convierte en una gripe.

Una de las hip¨®tesis m¨¢s extendidas para explicar la ca¨ªda de seguimiento del pasatiempo favorito de los norteamericanos es que hab¨ªan encontrado otra cosa igual de violenta, agresiva, despiadada y competitiva con la que entretenerse: las elecciones presidenciales. Adem¨¢s, este a?o contaba con un aut¨¦ntico villano como protagonista, Donald Trump, y eso siempre vende mucho. Que, por ejemplo, la CNN, haya aumentado un 90% su audiencia este a?o indica bien a las claras a d¨®nde hab¨ªa ido el grueso del americano medio con su mando a distancia.

La otra hip¨®tesis en orden de verosimilitud es que la NFL hab¨ªa programado tantos partidos malos y/o con equipos con una base social disctuble en horario estelar que eso hab¨ªa echado para atr¨¢s al espectador casual, poco interesado en las sutilezas de la defensa de los Chiefs o el doble tight end con full back de los Falcons.

Ambas posibilidades fueron eliminadas este domingo y, oh, sorpresa, la audiencias volvieron a su cauce natural.

La liga puso dos partidazos a degustaci¨®n de un pueblo harto y cansado de las elecciones y que necesita curar heridas a gran velocidad, por lo que se lanz¨® ¨¢vido a la propuesta: nada menos que un Dallas Cowboys-Pittsburgh Steelers seguido de un New England Patriots-Seattle Seahawks. Dos duelos estelares. Tres franquicias de una historia descomunal y uno de los m¨¢s grandes del siglo. Estrellas por doquier.

El Patriots-Sehawks fue el partido m¨¢s visto en un Sunday Night Football de la NBC, sumando streams de internet, de la historia de la cadena si excluimos los playoffs. El Cowboys-Steelers fue a¨²n mejor, siendo el partido m¨¢s visto del a?o y superando ¨¢mpliamente a su hom¨®logo del a?o pasado en la misma jornada.

La crisis, al menos de momento, ha quedado cicatrizada.

Esto no es una tendencia, claro, que para eso hacen falta varias semanas consecutivas con estos n¨²meros, pero s¨ª que parece dar la raz¨®n a las dos hip¨®tesis antes expuestas que explicaban la ca¨ªda de audiencia de la NFL. Baste a?adir, para ahondar a¨²n m¨¢s en ellas, que el partido de F¨®xboro tuvo menos audiencia que el de Dallas. Claro, compet¨ªa con la entrevista que la CBS le hizo al presidente electo, Donald Trump... tanto la NFL, como parece que el pa¨ªs en su conjunto, necesitaban este respiro.?