Gronk y Graham: Cuando los gigantes se encuentran
Los dos mejores jugadores de su posici¨®n tienen mucho en com¨²n salvo una cosa: un enfrentamiento directo
Rob y Jimmy. ?Jimmy y Rob. No importa el orden, cualquiera de los dos te har¨¢ da?o si se lo permites.
O incluso si intentas presentar resistencia.
Rob Gronkowski y Jimmy Graham son algo m¨¢s que el modelo del tight end moderno, son la pesadilla de todo coordinador defensivo, que despu¨¦s de siete temporadas, siguen buscando la manera de frenar a dos gigantes jugando entre ni?os.
Bendecidos con f¨ªsicos impresionantes, y tal vez m¨¢s importante a¨²n, con dos de los mejores pasadores de la historia, Gronkowski y Graham se han adue?ado de los emparrillados desde que llegaron juntos a la NFL separados por solo 53 jugadores en el draft de 2010. Lo incre¨ªble es que Jermaine Gresham fuera seleccionado antes que estos dos.
El domingo, despu¨¦s de siete a?os, finalmente Jimmy y Rob se encontrar¨¢n en un emparrillado de la NFL.
En 2013, los Saints de Graham visitaron New England, pero en ese momento Gronkowski se lesion¨® la rodilla en una grotesca jugada en el ¨²ltimo cuarto de una paliza ante los Browns, lo que lo ausent¨® del encuentro y de otros nueve esa temporada. En una macabra coincidencia, Graham bien pudo no haber jugado, pues no logr¨® recepci¨®n alguna a los seis pases que Drew Brees lanz¨® en su direcci¨®n.
En esta ocasi¨®n ambos prometen ser factor y la evidencia es contundente.
Gronkowski ha sido el mejor amigo de Brady dentro del campo, sus n¨²meros no mienten. M¨¢s de 6000 yardas, 68 touchdowns y un campeonato del Super Bowl. Pero la dupla ser¨¢ puesta a prueba por la ¡®Legion of Boom¡¯, que tiene cuentas pendientes con los Patriots.
Graham no cay¨® en terreno c¨®modo cuando los Saints lo cambiaron a Seattle hace dos a?os. Pero durante sus cinco temporadas al lado de Brees, es dif¨ªcil distinguir sus n¨²meros en comparaci¨®n con los de Gronk. Acumul¨® 78 recepciones y 373 yardas m¨¢s, y apenas tres touchdowns menos. Claro que tambi¨¦n tuvo el beneficio de la salud al participar en 13 encuentros m¨¢s.
Pero una vez en Seattle, Graham cay¨® en un sistema que no le favorec¨ªa, con un quarterback propenso a improvisar y que no supo sacarle, de inicio, provecho a su talento y sus dotes f¨ªsicos. Pero la marea parece cambiar a favor de Graham.
Viene de gozar su mejor juego con el uniforme de Seattle, y lo hizo de forma espectacular con dos touchdowns, ambos con una sola mano. Ahora intentar¨¢ repetirlo ante la segunda mejor defensa de la NFL.
As¨ª que cuando las generaciones futuras hablen del draft de 2010, hablar¨¢n de la generaci¨®n dorada de los tight ends.